Ha sido durante décadas uno de los hombres fuertes entre bambalinas de la casa real española y máximo confidente de sus miembros de alto rango. Para muchos un auténtico desconocido, pero no entre los muros del Palacio de la Zarzuela, donde su figura ha sido una constante. Ha muerto Serafín Sedano a los 92 años, el capellán de la casa del Rey, testigo de primera mano de muchos de los momentos clave de los Borbones, como el bautizo de la Princesa Leonor y su hermana, la Infanta Sofía.
Ha sido por canales oficiales dependientes del Palacio del Pardo que se ha dado a conocer la triste noticia del fallecimiento del religioso, cuya vida ha estado vinculada a la de la familia real española. La coincidencia ha querido que su muerte se produzca el mismo día que los Reyes Felipe y Letizia celebran su 21 aniversario de boda.
Adiós al confesor real tras cerca de 30 años de servicio en la casa del rey
"Los familiares de don Serafín han confirmado su fallecimiento. A partir de las 12 horas. de hoy, jueves 22 de mayo, se instalará la capilla ardiente en la Capilla de los Alabarderos del cuartel El Rey de la Guardia Real. Estará abierta a todo en que quiera despedirse", reza el mensaje que se ha difundido a través de los canales oficiales del Palacio de El Pardo para anunciar la repentina muerte de Serafín Sedano, el conocido como el guardián de los secretos de la familia real española.
El capellán de Zarzuela ha fallecido después de casi 30 años al servicio de la casa del Rey y al poco tiempo de solicitar su cese de funciones el rey Felipe VI. Fue el confesor de la familia real y figura determinantes en muchos de los momentos clave de la familia, como el bautismo de la Princesa Leonor y la Infanta Sofía. Con su marcha se van todos las intimidades de sus reales confidentes, que siempre custodió con profesionalidad y haciendo honor a su importante cargo.
Bautizo princesa Leonor. GTRES
La carta de despedida de Serafín Sedano, capellán de la casa de Su Majestad el Rey Felipe VI
Lo último que supimos de Serafín Sedano fue una misiva pública de despedida que difundió el pasado mes de noviembre, cuando renunció a su cargo como capellán, a los 92 años. En esta informó que ya le había trasladado a Felipe VI su decisión de dar por finalizadas sus funciones tras una larguísima labor como capellán.
"El 31 de julio de 2024 escribo una carta a Su Majestad el Rey Felipe VI para que me dé el relevo de Su Casa (...). En el momento presente soy un sacerdote de 92 años, 68 de pastor y sin ninguna misión canónica. Mi situación actual es de una persona privada con derecho a una intimidad. Quiero pedir vuestra generosidad en el perdón de tantas cosas que no haya hecho bien y os hayan podido molestar. El que pide perdón reconoce con humildad los fallos y el que sabe perdonar tiene un corazón valiente", recoge el extenso documento con el que Sedano anunció su retirada.
Bautizo de la Princesa Leonor en presencia de sus padres, sus abuelos y Serafín Sedano. GTRES
La estrecha relación del capellán real con Juan Carlos I y el resto de Borbones
Hasta su jubilación, don Sera, como conocían a Serafín Sedano sus más allegados y personas de confianza, ofició la tradicional misa de los domingos a la que acudía la Reina Sofía cuando sus quehaceres institucionales se lo permitían, junto con su incondicional hermana Irene de Grecia, y el Rey Felipe VI. Cuentan desde 'Vanitatis', que la relación del párroco y la familia real española iba más allá de la de sacerdote y feligreses. Mantuvo una relación muy estrecha con el rey Juan Carlos, con quien compartió años de confidencias e intimidades propias de su labor como confesor.
"Desde el cambio de trono y también desde la marcha del padre de Felipe VI a Emiratos, don Serafín Sedano siguió teniendo la confianza de los Reyes, especialmente la de Felipe VI, educado en la fe católica como corresponde a un monarca español", señalan desde el citado medio.
Aunque Zarzuela no se ha pronunciado al respecto todavía, Felipe VI y la Reina Letizia, así como la emérita y su hermana Irene, podrán despedirse del hombre religioso, custodio de sus secretos, si así lo desean en la capilla que se ha dispuesto en su honor para darle el último adiós. La coincidencia ha querido que la muerte de Serafín Sedano se produzca el mismo día que los Reyes cumplen 21 años de casados. Un día feliz que se ha visto algo empañado por el deceso de quien asumió un papel del todo relevante en el seno de la casa real durante cerca de 30 años. Tres décadas que se dice pronto, pero es una vida entera dedicada a los Borbones y su fe.