El Rey Felipe VI rompe el protocolo en su último acto al reencontrarse con alguien muy especial de su pasado: su gesto más comentado

La Casa Real española no ha dejado de acaparar las miradas desde los últimos días. Desde Palacio, han hecho públicas una serie de imágenes de la Princesa Leonor a bordo de la fraga Blas de Lezo, donde continúa con su formación naval, y en la que le hemos visto de lo más desenvuelta tanto en el puente de mando, como realizando todo tipo de maniobras y guardias tanto de día como de noche. La heredera se ha volcado al 100% en esta etapa a muy pocos días de aterrizar en Gijón, ciudad en la que se reencontrará con sus compañeros del Juan Sebastián de Elcano.

En paralelo, ha sido el Rey Felipe VI quien se ha convertido en el centro de todos los focos debido al último y especial cara a cara que ha vivido en un acto público. Un encuentro en el que no ha dudado en romper el protocolo por un motivo muy destacado.

El Rey Felipe VI rompe el protocolo al reencontrarse con Carmen Iglesias, una mujer que ha marcado su vida

Hace apenas unos días, el Felipe VI recibió en audiencia en el Palacio de la Zarzuela a los miembros de la Real Academia de la Historia. El marido de la Reina Letizia saludó a todos los presentes y las cámaras captaron el momento exacto en el que se reencontró con Carmen Iglesias, una de las figuras más influyentes de su vida tanto a nivel profesional como personal.

Nada más ver a Carmen Iglesias, la cara del Rey Felipe VI cambió por completo. Un momento muy emocionante para él en el que no dudó ni un solo momento en romper el protocolo y dedicarle a la que fuera su profesora en el pasado un tierno y cálido abrazo. Un gesto de lo más espontáneo con el que el padre de la Princesa Leonor y la Infanta Sofía ha dejado constancia de la pieza clave que ha sido la historiadora y el papel tan fundamental que ha jugado en su formación cuando tan solo era Príncipe de Asturias.

En este acto tan significativo para el monarca, ha tenido lugar la entrega del libro que conmemora la primera década de Felipe VI en el trono. Una cita repleta de confidencias y gestos. Uno de los más comentados, sin duda alguna, cuando el marido de la Reina Letizia ha cogido del brazo a Carmen Iglesias, un nuevo acercamiento con el que presume del estrecho vínculo que sigue manteniendo con su profesora a día de hoy.

El otro error de protocolo en el que se han visto envueltos Felipe VI y Letizia

El pasado domingo 29 de junio, Felipe VI y la Reina Letizia reaparecieron en el Real Alcázar de Sevilla para presidir una cena dentro dentro del marco de la IV Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo de Naciones Unidas. Un evento en la capital hispalense en la que se dieron cita 12 Jefes de Gobierno, 35 Jefes de Estado y más de una treintena de representantes de Organismos Internacionales. Para la ocasión, la madre de la Princesa Leonor y la Infanta Sofía lució un espectacular vestido de Carolina Herrera de color azul y con apliques dorados.

Sin embargo, lo más llamativo de la jornada fue el fallo de protocolo que tuvo lugar entre Felipe VI, Letizia, Pedro Sánchez y Begoña Gómez. Un error que desde Casa Real solventaron de una manera muy rápida. El presidente del Gobierno y su mujer fueron los primeros en saludar a los Reyes y, en un despiste, en vez de posar junto a ellos para inmortalizar el momento como ocurre en todos los actos de estas características y al igual que han llevado a cabo el resto de invitados, siguieron como si nada pasada.

Visto el error, el encargado de protocolo de Palacio tuvo que intervenir y no dudó en pedir a Pedro Sánchez y a Begoña Gómez que volvieran a saludar, por segunda vez, a los Reyes de España y, acto seguido, fotografiarles juntos ante todos los medios de comunicación que se encontraban presentes. Una anécdota que no ha pasado desapercibida y que han aprovechado para reírse por la confusión.

Este gesto, tan comentado durante los últimos días, protagonizado por Pedro Sánchez y su mujer en su encuentro con los Reyes de España en Sevilla ha sido analizado por María José Gómez y Verdú, experta en protocolo, en SEMANA: "Es un gesto cargado de simbolismo que, en un acto institucional de alto nivel, compromete la armonía de la escena, rompe la narrativa del respeto institucional y proyecta una imagen de descoordinación o desinterés por las formas", nos cuenta en esta revista. A pesar de todo y después de que la escena haya corrido como la pólvora, ellos quisieron quitarle hierro al asunto y continuar con el resto de saludos a los invitados, entre los que se encontraban también Juanma Moreno (presidente de la Junta de Andalucía) y su mujer Manuela Villena.