Un nuevo número de SEMANA ya está a la venta repleto de actualidad, reportajes fotográficos y entrevistas exclusivas. Los grandes protagonistas de nuestra portada son, sin lugar a dudas, Carlos Fitz-James Stuart y Belén Corsini de Lacalle, que se dieron el ‘sí, quiero’ en una romántica boda en los jardines del Palacio de Liria este sábado 22 de mayo. El hijo menor del actual duque de Alba, de 29 años, y la empresaria, de 31, reunieron a un selecto grupo de invitados para ponerle el broche de oro a su amor. Debido a las restricciones de la pandemia provocada por el coronavirus, fueron 300 los invitados que pudieron ser testigos de una de las bodas del año.

Todos los detalles y las fotos de la boda entre Carlos Fitz-James y Belén Corsini, en SEMANA

En el interior de tu revista favorita, que ya puede encontrar de forma física en los quioscos, o descargando la versión online AQUÍ, puedes encontrar un amplio reportaje fotográfico y todos los detalles de la boda del año. La Casa de Alba ha vivido uno de los momentos más especiales del año con el enlace de los condes de Osorno. Como viene siendo habitual, esta celebración ya forma parte de la historia de las boda de Alba, dignas de la realeza.

El primero en llegar al altar fue el novio del brazo de su madre y madrina, Matilde Solís Beaumont, una de las más elegantes con un vestido-capa rojo de Lorenzo Caprile, (mismo diseñador que eligió para la boda de su hijo mayor, Fernando Fitz-James Stuart con Sofía Palazuelo), mantilla negra y zapatos y clutch de pedrería en blanco roto. Siguiendo la tradición familiar de los Alba, el novio llevó el uniforme de gala de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, una de las órdenes más antiguas de la nobleza.

Una romántica boda, digna de la realeza

Posteriormente, llegó Belén Corsini de Lacalle del brazo de su padre, el padrino de la boda, Juan Carlos Corsini. El empresario del sector agropecuario e inmobiliario estaba muy emocionado y vivió uno de los momentos más emotivos de su vida. La novia estaba radiante con un vestido blanco firmado por Navascués, una de las casas de moda nupcial con mayor prestigio de todo Madrid, con un diseño de Cristina Martínez-Pardo Cobián; ha deslumbrado gracias a su sencillez y elegancia en su gran día.

La pandemia no fue capaz de ensombrecer la última gran boda de la familia Alba, tan clásica y elegante como todas las que vivimos en los años pasados. La última fue hace casi tres años, cuando el hermano del novio, Fernando Fitz-James, y Sofía Palazuelo se casaron en el mismo escenario. Lo único es que ellos tuvieron cerca de 700 invitados, una gran diferencia respecto a los 300 de esta última boda.

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