Tanto si quieres combatir el insomnio como si tu objetivo es bajar de peso, la piña es la fruta perfecta para incluir en tu última comida del día.
En los últimos tiempos, la hinchazón, el insomnio y la ansiedad se han convertido en enemigos frecuentes a batir. La alimentación es una herramienta muy útil a la hora de cuidar nuestra salud y puede ayudarnos a dormir mejor, combatir la inflamación y, por supuesto, a perder peso. Algunos alimentos son capaces de dar ese empujoncito para lograrlo y la piña es uno de los que no debería faltar en tu lista de la compra.
¿Tomar piña en la cena puede hacernos dormir mejor?
No es lo único que deberías hacer para poder dormir a pierna suelta por las noches, pero es de gran ayuda. La piña es una fruta diurética que ayuda a evitar la retención de líquidos y combate la inflamación. Es ligera y se digiere rápido, pero ¿de qué forma puede ayudarnos a dormir mejor? Además de mejorar el proceso de digestión para que no interfiera en el sueño, un estudio observó que la piña aumentaba los niveles de melatonina, por lo que tomarla en la cena sería una buena idea si queremos dormir como un bebé por la noche. También se vio que los plátanos y las naranjas elevaban esta hormona pero en menor medida que la piña.
¿Por qué puede elevar la piña los niveles de melatonina? Por su contenido en triptófano, un aminoácido que el cuerpo puede usar para producir melatonina y serotonina, hormonas que regulan el ciclo del sueño y el estado de ánimo. La piña también es rica en vitamina C, fibra y antioxidantes, que benefician la salud en general.
Varios estudios concluyeron que la piña es un alimento que puede favorecer el sueño, siempre y cuando se consuma con moderación y dentro de una dieta equilibrada. Se recomienda comer una rodaja de piña unas dos horas antes de ir a la cama, para que sus efectos sean más óptimos.
La piña contiene triptófano, un aminoácido que el cuerpo puede usar para producir melatonina, la hormona del sueño. (Pexels)
Beneficios de la piña para controlar la inflamación y adelgazar
La piña no sólo es una fruta exótica que podemos disfrutar en verano para refrescarnos, realmente es un alimento que tiene numerosos beneficios para la salud y podemos incluirla fácilmente en nuestros menús, tanto en frío como en caliente:
- Ayuda a bajar de peso y a eliminar líquidos, es baja en calorías, rica en agua y en fibra, y tiene propiedades diuréticas.
- Mejora la digestión y previene el estreñimiento, ya que contiene una enzima llamada bromelina, que descompone las proteínas y estimula la secreción de jugos gástricos.
- Fortalece el sistema inmunológico y previene infecciones, al ser rica en vitamina C, un potente antioxidante que combate los radicales libres y estimula la producción de glóbulos blancos.
- Protege la salud cardiovascular y regula la presión arterial, gracias al potasio, un mineral que equilibra los niveles de sodio y favorece la relajación de los vasos sanguíneos.
- Previene el envejecimiento prematuro y el cáncer, ya que contiene polifenoles, carotenoides y otros compuestos que tienen propiedades antiinflamatorias y anticancerígenas.
- Refuerza la salud ósea y muscular, algo de gran ayuda en la menopausia. ¿Cómo actúa? El manganeso que contiene es un mineral que interviene en la formación de colágeno y también en el metabolismo del calcio.
- Aumenta el estado de ánimo y el rendimiento físico por su contenido en carbohidratos, que aportan energía y estimulan la producción de serotonina, un neurotransmisor que regula el humor y también el sueño.
La piña cuenta con numerosos beneficios como fortalecer la salud de los huesos y mejorar el estado de ánimo. (Pexels)
Otros alimentos que ayudan a dormir bien (y a perder peso)
Si quieres ayudarte de la alimentación para asegurarte un buen descanso y controlar el peso, opta por aquellos que tengan nutrientes que favorezcan la producción de melatonina (la hormona del sueño). Esta hormona regula el ciclo del sueño y ayuda a controlar el apetito, además de mejorar el metabolismo y la inflamación. ¿Qué alimentos debemos tener en cuenta?
•Frutos rojos: Los frutos rojos como las fresas, las cerezas, los arándanos y las moras son ricos en carbohidratos, que estimulan la liberación de serotonina, un neurotransmisor que se convierte en melatonina. Son también fuente de antioxidantes, vitaminas y fibra, que protegen la salud celular, previenen el envejecimiento prematuro y mejoran la digestión.
•Yogur: Es una fuente de proteína y calcio, que facilita la absorción del triptófano, un aminoácido esencial que también se transforma en melatonina. El yogur, además, contiene probióticos, que mejoran la salud intestinal y modulan el sistema inmunitario.
•Nueces: Son otro alimento que contiene triptófano y melatonina, además de ácidos grasos omega-3, que reducen la inflamación y el colesterol. Las nueces también aportan magnesio, un mineral que relaja los músculos y ayuda a conciliar el sueño, un ingrediente que no debería faltarte este otoña para reforzar tus defensas.
•Salmón: El salmón es una proteína de alta calidad que contiene ácidos grasos omega-3 y vitamina D, dos nutrientes que mejoran la función cerebral y el estado de ánimo. El salmón también tiene un efecto saciante y termogénico, ¿esto qué quiere decir? Que aumenta el gasto calórico y ayuda a quemar grasa.
•Infusión de manzanilla: Esta popular infusión de hierbas tiene propiedades relajantes y sedantes. La manzanilla ayuda a reducir el estrés, la ansiedad y el insomnio, al actuar sobre los receptores GABA del cerebro. Además, tiene un efecto diurético y antiinflamatorio, lo que favorece la eliminación de líquidos y toxinas.