La naturaleza nos brinda muchos tesoros que se han usado durante miles de años como remedios naturales. La cúrcuma es uno de ellos y su acción antiinflamatoria la convierte en una opción perfecta para cuidar y mejorar nuestra salud de forma natural desde la mesa.

Se ha convertido en uno de los ingredientes de moda en los últimos años, de hecho, famosas como Gwyneth Paltrow o Kate Middleton la utilizan mucho en sus platos, pero su fama va más allá de las tendencias. La cúrcuma es un alimento antiinflamatorio y rico en antioxidantes que ha demostrado ser beneficioso para reducir los efectos de algunas enfermedades y para prevenir dolencias, además de ayudar al organismo a mantener un buen estado de salud. Te contamos todo lo que dice la ciencia sobre esta especia prodigiosa perfecta para incluir en tu dieta antiinflamatoria.

¿Qué es la cúrcuma?

Seguro que has oído hablar de ella porque es una especia esencial para cualquier foodie o amante de la alimentación saludable. La cúrcuma es una especia de color amarillo intenso que se obtiene de la raíz de la planta Curcuma longa, originaria de Asia. Es uno de los ingredientes principales del curry, el famoso (y riquísimo) plato de la cocina india, pero también se usa como colorante alimentario natural para evitar utilizar en elaboraciones colorantes artificiales nada recomendables. 

No sólo es un condimento de lo más vistoso y aromático, es un ingrediente con muchos beneficios saludables gracias a los principios activos que contiene y que le aportan sus propiedades medicinales. El más importante es la curcumina, un pigmento amarillo que actúa como un potente antioxidante y antiinflamatorio. La curcumina representa entre el 2% y el 5% del peso de la cúrcuma, y es la responsable de su color característico. Además de la curcumina, la cúrcuma contiene otros compuestos saludables como: aceite esencial, curcuminoides, proteínas, vitaminas (como vitamina C, E y K), y minerales (como hierro, magnesio, potasio o zinc).

Beneficios de la cúrcuma para la salud

La cúrcuma se ha utilizado desde hace miles de años en la medicina tradicional india, y china, para tratar diversas dolencias. En la actualidad, no sólo es una tendencia gastro en redes sociales, hay numerosos estudios científicos que han avalado esos efectos beneficiosos para la salud humana que ya le confería a la cúrcuma la práctica médica ancestral. ¿Cuáles son esos beneficios?

  • Mejora la digestión: La cúrcuma estimula la secreción de bilis y facilita el proceso digestivo. Ayuda a aliviar los síntomas de indigestión, dispepsia, flatulencia o hinchazón abdominal.
  • Protege el hígado: Esta especia tiene una acción hepatoprotectora y desintoxicante. ¿Qué significa esto? Que favorece la eliminación de toxinas del organismo y a regenerar las células hepáticas dañadas por el alcohol, los medicamentos o las infecciones.
  • Combate la inflamación: La inflamación es la responsable de muchísimas enfermedades modernas y es básico controlarla para mantener el organismo saludable. La cúrcuma es una aliada perfecta ya que, según un estudio de la Universidad de Granada, publicado en la revista médica Nutrición Hospitalaria, es un antiinflamatorio natural que inhibe la acción de las enzimas COX-2 y 5-LOX, responsables de la producción de sustancias proinflamatorias como las prostaglandinas o los leucotrienos. La cúrcuma, han observado los científicos, puede ayudar a reducir el dolor y la inflamación asociados a enfermedades como la artritis reumatoide, la osteoartritis, la colitis ulcerosa o el síndrome del intestino irritable.
 
 
 
 
 
 
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¿Puede la cúrcuma ser un apoyo frente al cáncer?

La cúrcuma podría ser un ingrediente muy a tener en cuenta para incluir en la dieta como prevención de enfermedades incluso como un complemento aliado para tratar algunas enfermedades. 

En el estudio del Departamento de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad de Granada, exponen que “se sugiere que el suministro de polifenoles y particularmente de curcuminoides podría ser valioso como complemento al tratamiento farmacéutico, pero también al tratamiento prebiótico, en condiciones que han demostrado ser bastante resistentes al tratamiento como la enfermedad de Crohn, en pacientes con estancias prolongadas en unidades de cuidados intensivos, pero también en condiciones como cáncer, cirrosis hepática, enfermedad renal crónica, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, diabetes y enfermedad de Alzheimer”.

¿Realmente la cúrcuma sería efectiva en un caso de cáncer? Hay diversos estudios, como la revisión científica publicada en la revista Nutrients, que han evaluado la acción o efecto beneficioso de la cúrcuma sobre el cáncer. Las propiedades anticancerígenas de la cúrcuma se se deberían a su capacidad para interferir con diferentes vías moleculares implicadas en el desarrollo y la progresión del cáncer. La cúrcuma podría inhibir el crecimiento de las células tumorales, inducir su muerte programada o apoptosis, y evitar la metástasis o la propagación del cáncer a otros órganos. Los estudios sugieren que puede ser útil para prevenir, o tratar, diferentes tipos de cáncer, como el de mama, el de colon, el de próstata, el de piel o el de páncreas. 

La cúrcuma puede tratar enfermedades como la artritis reumatoide o el cáncer.
La cúrcuma es una especia antiinflamatoria que mejora la digestión y puede ayudar a reducir el dolor asociado a ciertas enfermedades. (Pexels)

 

La cúrcuma como aliada para prevenir y tratar enfermedades

  • Mejora la salud cardiovascular: La cúrcuma tiene un efecto beneficioso sobre el corazón y los vasos sanguíneos. Ayuda a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre, previniendo la formación de placas de ateroma que pueden obstruir las arterias y causar infartos o accidentes cerebrovasculares. También tiene un efecto antitrombótico, que impide la formación de coágulos que pueden bloquear el flujo sanguíneo. Además, la cúrcuma ayuda a regular la presión arterial, la coagulación y la inflamación.
  • Previene el Alzheimer: Esta especia prodigiosa tiene un efecto neuroprotector que puede prevenir o retrasar el deterioro cognitivo asociado al envejecimiento y a enfermedades como el Alzheimer. La cúrcuma puede atravesar la barrera hematoencefálica y actuar sobre el cerebro, donde puede reducir la inflamación, el estrés oxidativo y la acumulación de placas de beta-amiloide, que son las principales causas del Alzheimer. También puede estimular la producción de nuevas neuronas o neurogénesis, y mejorar la memoria y el aprendizaje.
  • Combate la depresión: En un ensayo controlado publicado en la Revista china de medicina integrativa, se observó una reducción significativa de la ansiedad en los sujetos que tomaron curcumina. La cúrcuma tiene un efecto antidepresivo que se debe a su capacidad para aumentar los niveles de neurotransmisores como la serotonina y la dopamina, que están implicados en el estado de ánimo, la motivación y el placer. Además, puede reducir los niveles de cortisol, que es la hormona del estrés, y mejorar los síntomas de ansiedad, fatiga o insomnio asociados a la depresión. Algunos estudios han demostrado que la cúrcuma puede ser tan eficaz como algunos antidepresivos convencionales, pero con menos efectos secundarios.
La cúrcuma podría ser una gran aliada en tratamientos contra el cáncer.
Diversos estudios científico han observado que la cúrcuma podría ser un valioso complemento para tratar enfermedades como el cáncer o la enfermedad de Alzheimer. (Pexels)

 

Cómo tomar cúrcuma y aumentar su biodisponibilidad

Puedes incluir cúrcuma en tus menús fácilmente añadiéndola en polvo, como cualquier especia, en guisos, salteados y sopas. También le da un toque diferente y delicioso a las recetas de repostería como bizcochos, galletas, magdalenas... La leche dorada o golden milk (leche o bebida vegetal con cúrcuma) es una bebida antiinflamatoria excelente, y también puedes incorporar cúrcuma a los cereales del desayuno, infusiones, smoothies, zumos...

 
 
 
 
 
 
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El problema que tiene la cúrcuma es que nuestro organismo no la absorbe de manera óptima. ¿Cómo podemos ayudar a nuestro cuerpo a hacer biodisponible esta asombrosa especia? Un estudio publicado en la revista Foods asegura que “la ingestión de curcumina por sí sola no genera los beneficios para la salud asociados debido a su escasa biodisponibilidad, que parece deberse principalmente a una mala absorción, un rápido metabolismo y una rápida eliminación. Hay varios componentes que pueden aumentar la biodisponibilidad. Por ejemplo, la piperina es el principal componente activo de la pimienta negra y, cuando se combina en un complejo con curcumina, se ha demostrado que aumenta la biodisponibilidad en un 2000 %. La curcumina combinada con agentes potenciadores proporciona múltiples beneficios para la salud”.

 

Siempre que vayas a agregar cúrcuma a tus platos recuerda añadir también pimienta negra para pueda ser absorbida correctamente por el organismo. ¿Te has convenido ya de que necesitas esta especia en tu despensa?