La confianza y la seguridad en uno mismo son clave para desarrollar una vida plena y satisfactoria. Si nuestra autoestima es baja surgirá el malestar emocional, la incapacidad para gestionar experiencias vitales e incluso puede afectar negativamente a nuestra salud física y mental.

La forma en la que nos tratamos y nos valoramos puede modificar nuestro bienestar y nuestra capacidad para afrontar retos en la vida. Una baja autoestima altera nuestra relación con nosotros mismos y con nuestro entorno y puede generar miedo, inseguridad, autocrítica, perfeccionismo, dependencia… ¿Podemos ser conscientes de que tenemos una baja autoestima? ¿Cómo podemos mejorarla para ganar calidad de vida y bienestar?

como-evitar-cosas-afecten-para-ser-mas-feliz

También te interesará

Cómo evitar que las cosas te afecten tanto y conseguir ser más feliz

¿Qué es la autoestima?

Para poder sanar y/o modificar algo en nuestro ser primero tenemos que identificarlo. ¿Qué es la autoestima? Sonia Díaz Rois, coach especialista en gestión de la Ira y Eneagrama, explica a SEMANA que: “Podríamos definir la autoestima como “la opinión que tenemos de nosotros mismos y de nuestra valía, en base a la interpretación que hacemos sobre nuestras experiencias, pensamientos y sentimientos.”

coach

Si esa valoración que hacemos sobre nosotros es autocrítica, negativa, mínima… surgen entonces el miedo al rechazo, las inseguridades, el no confiar en el criterio propio, la dificultad para tomar decisiones o la incapacidad para asumir riesgos, además de aislamiento, ansiedad, tristeza y sensación de incomprensión por parte de los demás.

Nos cuenta Sonia que en los seis pilares de la autoestima, Nathaniel Branden escribió: “la autoestima es confiar en nuestra habilidad para pensar, confiar en nuestra habilidad para afrontar los desafíos básicos de la vida y confiar en nuestro derecho a tener éxito y ser felices. Sentirse dignos, merecedores, con derecho a expresar nuestra necesidades y deseos, alcanzar nuestros valores y disfrutar de los frutos del esfuerzo”. Una definición que engloba todas las respuestas ya que ser conscientes de que somos dignos y merecedores es lo que va a hacer que elevemos la autoestima.

El psiquiatra e investigador Luis Rojas Marcos, puso de manifiesto en una frase la importancia del binomio autoestima-felicidad: “tener una buena opinión de uno mismo es el componente más importante para sentir felicidad”. Tener una autoestima elevada va a hacer que nos sintamos mejor, más confiados, más seguros y, por tanto, más tranquilos y felices.

Baja autoestima qué es
Valorarse a uno mismo es uno de los pilares más importantes para ser feliz. (Pexels)

¿Cómo detectar una baja autoestima?

El problema aflora cuando hay un desequilibrio entre nuestra esencia y la lectura que hacemos de aquello que percibimos de nosotros. “Cuanta más coherencia exista entre lo que somos y lo que realmente creemos que somos, más posibilidades tendremos de movernos por la vida desde una autoestima sana”, afirma Díaz Rois.

La comunicación que tenemos con nosotros mismos es vital a la hora de desarrollar una autoestima alta y saludable. La forma en la que nos hablamos y nos dirigimos a nosotros mismos suele ser la culpable de la merma de seguridad y confianza. ¿Qué podemos hacer para cambiarlo? “Es hora de hacer algo para modificar esa comunicación que puede provocar reinterpretaciones dañinas, dando paso a sentimientos y actitudes tales como no confiar en uno mismo, anticipar resultados negativos, compararse con los demás para salir perdiendo, no atreverse a decir lo que uno siente…”, asegura la experta.

Sonia Díaz Rois nos da algunas claves para detectar una baja autoestima:

  • Sentimiento de culpa por sentirse responsable o causante de lo que ocurre.
  • No sentirse capaz y creer que se cometerán errores o se fallará.
  • No ser capaz de reconocer las metas alcanzadas y los logros en general.
  • Concepto y autovaloración negativa y pesimista de uno mismo.
  • Evitar compartir la opinión y exponerse a los demás por miedo a cometer errores.
  • Anteponer las necesidades de los demás a las de uno mismo.
  • No sentirse con derecho a decir que “no” y sobreadaptarse a las decisiones de los demás.
  • Pensar que los demás nos quieren por lo que hacemos y conseguimos, y no por lo que somos.
  • Compararse y salir perdiendo al considerarse inferior o menos capaz.

Baja autoestima: estrategias para mejorarla.
Hay que modificar la forma de comunicarse con uno mismo para mejorar la autoestima. (Pexels)

Herramientas para mejorar nuestra autoestima

Una vez que somos conscientes de esa baja autoestima, es hora de trabajar en el desarrollo personal para poder elevar esa seguridad y confianza para poder tener una vida más sana y feliz. ¿Por dónde empezamos? Es fundamental conectar con uno mismo y recuperar nuestra confianza básica, además de implementar acciones que nos ayuden a demostrarnos que somos capaces, para que paso a paso empecemos a reconocer nuestra valía”, apunta la coach.

coach

Estas son algunas estrategias básicas que la experta propone para mejorar la autoestima y ganar en confianza:

  • Haz lo posible por evitar caer en la queja y el victimismo para poder empezar a asumir tu responsabilidad. Aunque cueste, es el mejor modo de empezar a hacer cambios. Si ves que te cuesta, pide ayuda.
  • Genera compromisos contigo mismo y pasa a la acción. Haciendo y obteniendo resultados, es el mejor modo de empezar a darte cuenta de hasta dónde eres capaz de llegar.
  • Deja de atribuir el éxito a la suerte y empieza a reconocer tus méritos, tu dedicación, constancia y esfuerzo.
  • Celebra y reconoce tus logros, recréate en esos momentos de alegría para crear nuevas memorias emocionales.
  • Reinterpreta los fracasos como oportunidades de aprendizaje y recuerda que nadie nació aprendido.
  • Trabaja en tus áreas de mejora y reconoce también tus talentos.
  • Comunícate contigo mismo desde la asertividad y procura desapegarte de lo que piensen los demás.
  • Compárate contigo mismo y con aquello que vas logrando día a día.
  • Aprende a decir No, de manera asertiva, cuando sea necesario y evita sobreadaptarte a los demás.

Trabajar el autocuidado, la escucha interior y respetar nuestras necesidades, es el primer paso hacia una vida más satisfactoria. Cuidar de ti como lo harías de alguien de quien eres responsable va a aumentar tus niveles de bienestar y felicidad.