La puerta secreta del Palacio Real que los Reyes solo utilizan en caso de emergencia

Durante los últimos días, mucho se ha hablado del último posado de los Reyes, Felipe y Letizia, acompañados por sus hijas, la Princesa Leonor y la infanta Sofía, con motivo del 20 aniversario del 'sí, quiero' de los monarcas. Casa Real distribuyó once instantáneas que fueron tomadas en los jardines del Campo del Moro, con el Palacio Real de fondo, por los miembros del equipo de la propia monarquía. Sin embargo, pocos saben que justo en ese lugar hay una puerta incógnita, que solo se utilizan en caso de emergencia y permitió que se tomaran las imágenes sin causar ningún revuelo. 

Hay que tener en cuenta que los jardines Campo del Moro están abiertos al público todos los días. Sin embargo, aunque muchos señalaran que pudieron cerrarlos para la ocasión, desde Patrimonio Nacional, que serían los encargados de dar aviso si hay cierre de este tipo de lugares, no dieron ninguna información al respecto. ¿Puede que salieran los Reyes por esa puerta 'secreta' que poco se sabe de ella?

Las fotos del nuevo posado de los Reyes fueron tomadas tras una 'puerta secreta': ¿qué sabemos de ella?

Ha sido el periodista, Martín Bianchi, quien ha revelado el escenario de estas imágenes y la existencia de una puerta secreta de la que se ha hablado poco a lo largo de los años. Una puerta que "utilizaban los Reyes en la antigüedad para entrar y salir de Palacio sin que nadie los viera". Sin embargo, esta 'escapatoria' data de los tiempos de José Bonaparte, pues fue construido bajo la atenta dirección de Juan de Villanueva, e impulsada por Bonaparte. 

Además, esta puerta 'secreta' "fue por donde Alfonso XIII, en vísperas de la proclamación de la República, huyó y nunca más regresó porque no tuvo la valentía de salir por la puerta principal y huyó en su coche", ha continuado revelando el mencionado periodista. Sin lugar a dudas, un escenario repleto de misterio e incógnitas del que incluso las hijas de los Reyes podrían no tener constancia de las mismas. 

A pesar de que este túnel Bonaparte, se llama así porque fue impulsado por José Bonaparte, es uno de esos secretos de los que se ha hablado a lo largo de los años, no sería de extrañar que existan otras 'puertas secretas' o 'puertas incógnitas' tanto en Palacio Real como en las inmediaciones de Palacio de la Zarzuela, que solo pueden ser utilizadas en caso de emergencia. 

Lo que se sabe del túnel Bonaparte, escenario de las últimas imágenes de Felipe y Letizia

Madrid está repleto de túneles secretos, aunque algunos guardan más historia que otros, como es este caso. El túnel Bonaparte unía la supuesta casa Palacio del Rey Francés (el Palacio de Vargas, en la Casa de Campo, ya desaparecido), con un paseo ajardinado en el Campo del Moro, que precisamente es el sitio donde fueron tomadas las imágenes de los Reyes y sus hijas. 

Existen muchas teorías respecto a este túnel y a los escarceos que provocaba. Por ejemplo, algunos apuntan a que José Bonaparte dormía cada noche en el Palacio de Vargas por temor a que se produjera un atentado contra su figura y, cada día, regresaba al Palacio Real para trabajar. Otras teorías aseguran que su amante estaba alojada "temporalmente" en el Palacio de Vargas y ambos usaban ese túnel para vivir diferentes encuentros amorosos. Sin embargo, como hemos dicho anteriormente, todo son teorías y poco se sabe 'oficialmente' sobre ello. 

Las habitaciones 'secretas' en el Palacio de la Zarzuela

A lo largo de los años, mucho se ha hablado de las diferentes estancias de la que poco se saben en el Palacio de la Zarzuela. Una de ellas, por ejemplo, fue la bodega de Felipe VI en la que hay albergadas hasta 10.000 botellas de vino, por un valor incalculable, muchas de ellas regalos tanto al monarca como a su padre, el rey Don Juan Carlos, pues ambos comparten la pasión por un buen vino y han compartido bodega durante muchos años. 

La existencia de esta misteriosa bodega la destapó el primo de la Reina Letizia, David Rocasolano, en su libro, 'Adiós, princesa': "Tras visitar habitaciones y despachos, bajamos a los sótanos y Letizia abrió un portalón. Yo pensaba que, por fin, iba a conocer la biblioteca. Pero cuando se encendieron unas tenues luces, ante mí se abrió una vinoteca particular inmensa. Paseamos por el laberinto de anaqueles pisando arena de playa, paladeando el aroma noble y sobrio de roble y contemplando el fabuloso espectáculo del vino". "Felipe me aclaró: Es arena de playa. La traen expresamente de una playa del Índico porque tiene las condiciones perfectas para mantener la humedad", se podían leer entre sus líneas.