Kiko Rivera se ha mostrado muy reacio a contestar a los medios en su llegada al aeropuerto tras uno de sus viajes. Muy serio y visiblemente molesto, ha intentado no comentar nada sobre la sonada ausencia de su amigo Antonio Tejado en su cuarenta cumpleaños, al cual estaba invitado y al que finalmente no asistió por su sorprendente detención por la policía de Sevilla como implicado en el robo con fuerza en el domicilio de su tía María del Monte.