No es ningún secreto que Paz Padilla no llevó bien la separación de su hija, Anna Ferrer, cuando -hace un año aproximadamente- se fue a estudiar a Londres para continuar su formación en materia económica.
La humorista, que protagonizó la última entrega del programa 'Mi casa es la vuestra', le confesó a Bertín Osborne que lo pasó muy mal y el gran susto que vivió cuando su hija le confesó que no se encontraba bien físicamente.
Seis visitas en tres meses
Hasta tal punto le echaba de menos la actriz y presentadora que, en los primeros tres meses de la estancia de Anna en la capital británica, llegó a viajar hasta en en seis ocasiones. Paz le decía que era porque así aprendía inglés.
Síntomas preocupantes
Como cualquier madre que tiene lejos a su hija, la andaluza estaba muy pendiente de ella, más aún, cuando le contó que no se encontraba bien del estómago, no tenía hambre, sentía nauseas y dolor.
Pidió ayuda a una psicóloga
Paz estaba convencida de que estos síntomas correspondían más a un origen psicológico que físico y pidió asesoramiento a una amiga suya que ejerce como psicóloga.
Un trabajo emocional
La psicóloga a la que consultó la humorista le recomendó que hiciera un trabajo emocional, por un lado Anna debía contarle las cosas que mas echaba de menos estando en Londres, y los amigos y la familia debían escribir una carta a la joven para decirla lo mucho que la querían.
Le llevó al médico
Cuando Anna volvió a España, este verano, le seguía doliendo el estómago, así que fueron a consultar a un médico especialista, que le recomendó que se hiciera una serie de pruebas
Tenía una bacteria en el estomago
El resultado de las pruebas determinaron que Anna tenía una bacteria en el estómago, que se llama Helicobacter pylori y es una de las infecciones humanas más habituales. Es ciertamente molesta y obliga a tomar una medicación bastante potente.
Paz también estaba enferma
La actriz también se hizo la prueba, obligada casi por su hija, y resultó que también estaba enferma, por lo que tuvo que empezar un tratamiento que incluía tomar siete pastillas al día y que ha tenido algunos efectos secundarios bastante incómodos.
Se emocionó al recordar a su amigo Chiquito
Durante el programa, también hubo tiempo para recordar a un gran amigo de Paz, el humorista Chiquito de la Calzada, momento en el que no puedo evitar emocionarse y que se le saltaran las lágrimas.
Visitas muy especiales
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En el espacio también hubo visitas de otros humoristas como Pablo Carbonell o el niño Adrián Martín, aquejado de una hidrocefalia, y que tiene un don para la música que asombra y emociona a todos por igual.
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