Este lunes, Doña Sofía ha disfrutado de una de sus pasiones (la música) en una de las semanas más intensas de su vida. Un día después de celebrar en familia su 82 cumpleaños, la reina emérita ha presidido el Concierto Extraordinario a beneficio de las becas de Juventudes Musicales de Madrid. Una cita a la que acude cada año y que se ha celebrado en un escenario que es muy familiar para ella, el Auditorio Nacional de Música de Madrid. Lo ha hecho con quien suele ser su acompañante habitual en esta gala: su hermana Irene de Grecia.
El acto de entrega de las becas, concedidas este año a jóvenes talentos de cuerda, piano y canto, ha estado precedido por un recital ofrecido por el tenor Juan Diego Flórez y el pianista Vincenzo Scalera. Para la ocasión, la emérita ha elegido un estilismo que parece ser su 'outfit' favorito para este tipo de citas: un traje de chaqueta azul con estampado floral que ha lucido en otras ocasiones. Se lo hemos visto en 2019 en diversos actos, como la XXVIII edición del Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana, así como en el Concierto de estreno de la obra ganadora de XXXVI Premio Reina Sofía de Composición Musical.
![La Reina Sofía, noche de concierto tras celebrar su 82 cumpleaños](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 800 1200"%3E%3C/svg%3E)
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En su noche con la música, la madre de Felipe VI ha podido escuchar piezas de Beethoven, Mendelssohn, Strauss, Verdi, Rossini, Bellini o Puccini, entre otros. Un verdadero deleite para sus oídos, ya que es una enamorada de la música sinfónica, en especial de la perteneciente al periodo barroco.
Muy activa con su agenda de compromisos
Su cita con la música clásica ha tenido lugar un día después de que celebrara 82 años. Un cumpleaños muy especial, ya que se produce en un delicado momento para la Familia Real. Hace tres meses, el Rey Juan Carlos viajaba rumbo a Emiratos Árabes Unidos a raíz de las informaciones que le relacionaban con supuestos negocios ilícitos, lo que la ha dejado sola como cabeza de familia en Zarzuela. Cabe destacar que, a diferencia de su marido, que anunció su retirada de la vida institucional en junio de 2019, la Reina Sofía sigue cumpliendo activamente una agenda oficial que ha retomado nuevamente tras el confinamiento obligado por la pandemia del coronavirus.
Bien es cierto que en el último año su presencia en actos públicos se ha visto reducida, pero aún es fiel a sus compromisos de siempre, como la reciente entrega de los Premios Princesa de Asturias, celebrados en Oviedo, adonde no ha faltado nunca. Tampoco ha faltado a numerosas convocatorias del Banco de Alimentos en distintos puntos de nuestra geografía. Así, ha comprobado 'in situ' cómo trabaja esta organización benéfica y cómo es el trabajo de sus voluntarios en su recorrido por los lugares de España más golpeados por la crisis económica generada por el Covid-19.
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En la celebración del 82 cumpleaños de Doña Sofía, celebrada en el palacio de la Zarzuela, estuvo presente la
infanta Elena con sus dos hijos, Felipe y Victoria de Marichalar. También asistieron la
infanta Margarita, hermana del rey Juan Carlos I, y su marido,
Carlos Zurita. Todos ellos arroparon a la soberana en un aniversario que coincide con la reciente noticia de la Fiscalía Anticorrupción, que está investigando los gastos de varias tarjetas de crédito que usaban el rey Juan Carlos de Borbón y su esposa, así como también varios de sus familiares más directos: entre ellos, algunos de sus nietos. Son tarjetas que, según elDiario.es, se abonaban desde una cuenta en la que ni el rey emérito ni su familia aparecen como titulares.
![La Reina Sofía, noche de concierto tras celebrar su 82 cumpleaños](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 799 1200"%3E%3C/svg%3E)
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Doña Sofía, a la que vimos por última vez en un local de Murcia tomando unas tapas tras asistir a un acto solidario, ha demostrado, una vez más, que sabe muy bien cómo poner buena cara a pesar de la tempestad que rodea a su marido, quien sigue alejado del mundanal ruido en Abu Dabi. Mientras él ha encontrado refugio a casi 7.600 kilómetros de Madrid, ella sigue al pie del cañón y codeándose con otros rostros conocidos, como Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa, con quienes ha coincidido en su último acto público.