Los medicamentos para tratar la diabetes tipo 2 se pusieron de moda hace unos meses gracias a su capacidad para reducir el apetito y facilitar la pérdida de peso. Sin embargo, los expertos advierten de que su uso no debe ser indiscriminado ya que la pérdida de peso no es su función principal sino un efecto secundario que va acompañado de otras consecuencias. ¿Es mejor tomar entonces suplementos para adelgazar? Una experta nutricionista despeja nuestras dudas.

¿Suplementos o medicamentos?

La demanda de estos fármacos destinados a pacientes de diabetes 2 ha crecido tanto en los últimos meses que incluso se han producido problemas de desabastecimiento, algo muy peligroso para las personas que controlan su enfermedad con estos medicamentos. ¿Por qué ha ocurrido esto? Pues porque son fármacos que controlan los niveles de azúcar en sangre, algo fundamental para tratar la diabetes 2 pero que tiene como efectos colaterales la pérdida de peso y la reducción del apetito. Estos efectos secundarios del tratamiento son la razón por la que se ha dado ese auge o boom que ha hecho que incluso esos medicamentos llegasen a escasear y a faltar en muchas farmacias.

¿Hasta dónde podemos llegar con tal de adelgazar? ¿Estos medicamentos son la solución a la obesidad o a esos kilos de más? ¿Son mejores que los suplementos que han sido fabricados para perder peso? Itziar Digón, psicóloga experta en alimentación, insiste en la importancia de un enfoque más amplio: “Los cambios en el peso corporal no provienen exclusivamente de una inyección o píldora, deben sumar también un cambio en la conducta alimentaria”. Estos fármacos ayudan a reducir el apetito, pero Digón recuerda que “Podemos encontrar en la suplementación herramientas que nos ayuden a conseguir este cambio definitivo en nuestra conducta alimentaria, no solo limitando el hambre sino con una acción integral; desde regular nuestra microbiota hasta facilitar el equilibrio emocional”, asegura.

Dieta

Freepik

La regulación de la glucosa en sangre

¿Por qué mantener los niveles de glucosa en sangre es vital para el control de peso? Muy fácil. El cuerpo obtiene energía de los alimentos, transformando los carbohidratos en glucosa, que circula por la sangre y es utilizada por las células. Sin embargo, los picos y caídas bruscas en los niveles de glucosa pueden generar sensación de hambre constante, fatiga y favorecer la acumulación de grasa, dificultando el control del peso.

Cuando consumimos alimentos con alto índice glucémico, como azúcares refinados, harinas blancas y productos ultraprocesados, la glucosa en sangre se eleva rápidamente. En respuesta, el cuerpo libera grandes cantidades de insulina para regularla, lo que provoca una bajada brusca que nos deja cansados y con ganas de comer más, generando un círculo vicioso de hambre y almacenamiento de grasa.

Por el contrario, si optamos por carbohidratos complejos, proteínas y grasas saludables, la glucosa se libera de forma gradual, manteniendo niveles estables, evitando altibajos y favoreciendo la saciedad. Esto permite que el cuerpo utilice la energía de manera más eficiente, ayudando a controlar el peso.

Dieta

Freepik

Estrategias para regular la glucosa y controlar el peso

Hay herramientas que podemos utilizar para mantener estables nuestros niveles de glucosa en sangre y controlar así el peso:

  • Prioriza carbohidratos de calidad: No todos los carbohidratos funcionan igual en el cuerpo. Los carbohidratos refinados, como el pan blanco, las galletas o los cereales azucarados, provocan picos rápidos de glucosa seguidos de bajones que nos hacen sentir cansancio y hambre de nuevo. En cambio, los carbohidratos complejos, como la avena, el pan integral, la quinoa y las legumbres, liberan energía de manera progresiva, evitando fluctuaciones bruscas y manteniendo la saciedad por más tiempo.
  • Incorpora proteínas en cada comida: Las proteínas ralentizan la absorción de glucosa y ayudan a estabilizar los niveles de azúcar en sangre. Al añadir alimentos ricos en proteínas como huevos, pollo, pescado, yogur natural o frutos secos en cada comida, evitas subidas bruscas de glucosa y prolongas la sensación de saciedad, lo que reduce el riesgo de picoteo entre comidas.
  • Realiza actividad física regularmente: El ejercicio es fundamental para el control de la glucosa. La actividad física aumenta la sensibilidad a la insulina, lo que permite que la glucosa se utilice de manera eficiente en lugar de almacenarse en forma de grasa. Tanto el entrenamiento de fuerza como el ejercicio aeróbico contribuyen a estabilizar los niveles de azúcar, mejorar el metabolismo y mantener la energía.
  • Mantente hidratado: La hidratación también juega un papel clave en la regulación de la glucosa. El agua ayuda a transportar nutrientes, facilita la digestión y evita que el cuerpo tenga que esforzarse más para procesar el azúcar. Asegurarte de beber suficiente agua durante el día mantiene el metabolismo activo y favorece la estabilidad de los niveles de glucosa.
  • Suplementación: Los suplementos pueden ser una herramienta complementaria muy útil para ayudar a estabilizar los niveles de glucosa en sangre y ayudar al cuerpo a depurarse. Los ácidos grasos Omega-3 antiinflamatorios, berberina, el cardo mariano con efecto détox o la fibra soluble que puede ralentizar la absorción de azúcar y evitar picos bruscos de insulina son un elemento interesante para incluir en la dieta dentro de una alimentación saludable y el ejercicio regular. Además, también pueden dar apoyo al equilibrio emocional y mejorar nuestra salud digestiva.
Luxmetique

  • Fórmula Control 3 de LUXMETIQUE (65,95€): Tres productos en uno que ofrece una rutina de 3 pasos para resetear el organismo, controlar el peso y mejorar la estabilidad emocional. Contiene ácidos grasos Omega 3, extracto de azafrán, extracto de citrus que facilita la quema de grasa, Fibersol 2, una fibra de fermentación lenta que controla la curva de glucosa y favorece la saciedad y, además, plantas medicinales para facilitar el descanso. Su fórmula está libre de azúcar y de lactosa.
Dietformpic

  • Dietformpic (27,90€ / 30 cápsulas): Su fórmula cuenta con Reducose® y Berberina, junto con Alcachofa, Colina y Cromo. Ayuda a controlar los niveles de glucosa en sangre, reduce el apetito y los antojos, estimula la quema de grasa y mejora la función hepática.

Siguiendo estas estrategias de manera constante, tendrás un mejor control del peso, evitarás los altibajos energéticos, reducirás la sensación de hambre y favorecerás la salud metabólica a largo plazo.