Todo consiste en esforzarse y tener paciencia, con unas claves que siempre funcionan: ejercicios para los glúteos, hidratación permanente y, por supuesto, una alimentación

sana y equilibrada, con ciertos alimentos que ayudan a conservar unos glúteos

firmes.

Hay tablas y ejercicios para glúteos que son muy sencillos y no llevan mucho tiempo a lo largo del día, por lo que sólo hace falta ser constante. Las sentadillas de toda la vida, las zancadas, subir y bajar escaleras….y otra serie de ejercicios que ayudan no sólo a adquirir fuerza en los glúteos, sino a conservarlos durante mucho tiempo.

Las claves para conseguir unos glúteos firmes y bonitos

Los ejercicios para glúteos consiguen fortalecer y mantener firme esa parte del cuerpo de la mujer, con sencillos tablas que podemos practicar en nuestra vida cotidiana, sin el menor esfuerzo.

Las clásicas sentadillas, subir y bajar escaleras, el conocido como el ejercicio del gato, el de la silla, o las grandes zancadas cuando caminamos o simplemente como una parte más de nuestra tabla de ejercicios, son perfectas para mantener unos glúteos perfectos. Si nos ejercitamos todos los días, durante al menos un mes, es muy probable que de cara al verano podamos conseguir lucir ese trasero casi perfecto.

Un clásico en ejercicios que fortalecen los glúteos: las sentadillas

Las sentadillas son uno de los ejercicios para glúteos más habituales. Es muy eficaz, y también fácil de hacer. Para hacer sentadillas, nos posicionamos con los pies separados en línea con los hombros, y comenzamos a bajar doblando las rodillas, como si nos estuviéramos sentando.

Debemos llegar a la posición de cuclillas, y volver a levantarnos, manteniendo siempre la espalda recta. Repetiremos esta serie de ejercicios durante, al menos un par de minutos, aumentando progresivamente el tiempo a medida que avancemos.

Es muy fácil, lleva poco tiempo de nuestra rutina habitual, y podemos dedicarle un mes, combinado con otros ejercicios, para tener nuestra puesta a punto de los glúteos en tiempo récord.

La posición del gato y los ejercicios de silla

Estos dos ejercicios para glúteos son fáciles de hacer en casa, y muy efectivos. Para hacer el ejercicio del gato, nos colocamos a gatas en una colchoneta de gimnasia, subiendo con fuerza una pierna hacia arriba, y después volvemos a colocarla en posición, y estiramos la otra.

Las piernas deben quedar altas, por encima de la cabeza, y lo más recomendable es hacer

este ejercicio en sesiones de diez, aumentando progresivamente el número a medida que avancen los días.

Para hacer este fácil ejercicio de la silla, permaneceremos en pie, colocando las manos en el respaldo de una silla, mientras mantenemos la espalda recta. Elevamos una pierna hacia atrás lo más que podamos, para volverla a colocar n la posición original, y elevar la otra. Se puede hacer en series de diez, aumentando su número, igual que el ejercicio del gato, a medida de que vayamos adquiriendo más práctica y elasticidad.

Las escaleras y las zancadas: dos métodos que nunca fallan

Dar grandes zancadas es un ejercicio para glúteos fácil y muy cómodo de realizar. Podemos hacerlo en casa, dando pasos hacia adelante más largos de lo habitual, procurando que nuestros muslos queden en paralelo al suelo, mientras que nuestra otra pierna se estira en diagonal.

También podemos practicarlo en la calle, dando zancadas más largas al caminar. Si estamos en casa, haciendo una tabla, realizamos la misma operación dando un paso

adelante con una pierna, volvemos al principio, y lo hacemos con la otra.

También se pueden hacer en series, aumentando cada día, hasta conseguir el rendimiento y el tiempo deseados, combinando todos estos ejercicios. Subir escaleras es también uno de los ejercicios para glúteos más socorridos.

Lo podemos hacer en casa, o en la calle, cada vez que tengamos ocasión de poder subir escaleras en lugar de coger un ascensor. De hecho, muchos gimnasios utilizan esta técnica para dar firmeza a los glúteos, con diferentes aparatos de step. Con este ejercicio se endurecen los músculos de los glúteos.

Por otra parte caminar lo más que podamos, a paso ligero y sin pararnos, durante al menos media hora, es una de las técnicas más efectivas para fortalecer glúteos, es asequible para todas las mujeres, y basta con proponerse hacer una caminata de una media hora, a paso ligero, con un calzado adecuado.

Es importante que tengamos en cuenta que hay que hidratarse, y beber mucha agua al día, al menos 2 litros durante toda nuestra jornada, para eliminar toxinas. Aunque también la alimentación es importante. Veamos qué alimentos ayudan a complementar esos ejercicios para glúteos y conseguir los mejores resultados en tiempo récord.

La alimentación: el gran aliado del fortalecimiento de los glúteos

La alimentación sana y equilibrada es importante, como complemento a los ejercicios para glúteos, y existen determinados alimentos que nos pueden ayudar, como por ejemplo las legumbres, sobre todo los garbanzos y las judías negras y blancas, el aguacate, muy beneficioso para lograr un aumento del volumen de los glúteos, y también para tener una buena salud cardiovascular.

Consumir huevo también puede ayudarnos a fortalecer los músculos de los glúteos porque tiene mucha proteína, y es uno de los alimentos más recomendados para deportistas de alta competición que, como podemos comprobar, tienen unos glúteos perfectos. Además, el trigo es un producto básico para ayudar a eliminar la molesta y antiestética celulitis porque contiene proteínas, grasas, minerales y vitaminas, muy beneficiosas para el fortalecimiento de los músculos.

La leche y las carnes magras son una excelente fuente de proteínas. Las carnes magras son bajas en grasa, no engordan, y son óptimas como alimento esencial, para no consumir grasas saturadas. La leche es muy recomendable porque tiene mucho calcio y fortalece los huesos, a todas las edades y es una buena fuente de proteína para tonificar los músculos.

Combinar una alimentación saludable con unos ejercicios enfocados a fortalecer los músculos, serán nuestros mejores aliados para tener unos glúteos fuertes y tonificados. Y los ejercicios son sencillos de realizar, sólo hay que ser constantes, para obtener los mejores resultados en un corto espacio de tiempo.