Existen muchos recursos para conseguir el vientre plano deseado. De paso reducir centímetros, perder volumen y refirmar músculos y tejidos. Pero no olvides que los milagros comienzan por empezar ya y ser constantes en lo buenos hábitos. Sin olvidar elegir un bañador que mejor disimule defectos y realce virtudes.

El primer paso para conseguir vientre plano

Debes empezar revisando la alimentación. Es fundamental abandonar las bebidas gaseosas, incluso las light, que hinchan y no aportan beneficios. Sustitúyelos por infusiones, frías o calientes, de hierbas drenantes y que ayuden a regular el transito intestinal. Las tisanas a base de canela, salvia y laurel, o el zumo de un limón con agua tibia (sin azúcar) son perfectas para tomar en ayunas. Ayudan al organismo a desintoxicarse y al aparato digestivo a hacer mejor sus funciones.

El agua mineral aromatizada con hierbas y frutas, como las que tenemos en todos nuestros centros, son un recurso fantástico para purificar y reducir con todo el sabor. Y , por supuesto, abandonar el picoteo, los fritos, los alimentos procesados: no abuses tampoco de los hidratos de carbono ni de las grasas saturadas y opta por los gazpachos, ensaladas y proteínas magras.

El ejercicio, aliado del vientre plano

Moverse, el ejercicio es el mejor aliado de un vientre firme. Indudablemente, los abdominales son los reyes para endurecer. Hay que hacer una tabla específica a diario –que puedes encontrar fácilmente en Internet- adecuada a tu agilidad. Y también a tu edad y forma física. Te ayudará a redefinir cintura y marcar “tableta”.

Pero si la gimnasia no es lo tuyo, sustitúyela por 30 minutos de paseo al día. Camina con paso ligero, acompasando la respiración y aprentando los músculos abdominales, o lo que es lo mismo, intentando hacer abdominales hipopresivos en movimiento. Si eres constante, en un mes notarás una mejora considerable.

Cosméticos con efecto "diana"

La acción cosmética puede ayudarte en tu objetivo. Aplícate cada vez que salgas de la ducha una crema reductora, si tienes acumulación de grasa, o reafirmante si la flacidez es el problema. Por sí solas no son milagrosas, pero si lo acompañas de un tratamiento en cabina con la tecnología adecuada notarás los resultados. Y si , haces ejercicio y vigilas tu dieta, ayudan y además nutren, hidratan y dejan una piel de terciopelo. Así estará preparada para recibir el sol y broncearse mejor.

La aparatología a base de radiofrecuencia es perfecta para reafirmar el tejido cutáneo y quemar grasa. Dependiendo siempre  de la temperatura a la que se emplee. La electroestimulación, es una gran aliada para endurecer músculos y redefinir curvas. En el abdomen da muy buenos resultados. Los infrarrojos, la vacunterapia, los HIFU (Ultrasonidos Focalizados de Alta Frecuencia), la cavitación, las ondas electromagnéticas…Son muchas las tecnologías médico-estéticas que ayudan a moldear, reducir, drenar, redefinir, etc.

Consejo final para despedirte de la grasa abdominal

¿Mi consejo? Realizar un tratamiento que combine la aparatología dependiendo de las necesidades en cada persona en cada momento. Ser contante y seguir la prescripción de la esteticista. Y recuerda que, en la mayoría de los aparatos, son necesarias entre 12 y 15 sesiones para obtener resultados, aunque estos se comiencen apreciar desde el primer momento. No creas en los milagros, haz que se produzcan y comienza ya tu plan “vientre plano”