Dulce: una bomba de relojería

No me retracto de las palabras que escribí antes de 'Supervivientes': Dulce me da mucho miedo. Y ahora lo digo con conocimiento de causa...

Quién soy yo para juzgar moralmente a Dulce o para desentrañar su mente, para eso tendría que ser o sacerdote o psicólogo, y ni una cosa de la otra. No me voy a posicionar en su relación amor-odio con Mila Ximénez, quien retomara su vida pública diciendo aquello de que Isabel Pantoja era 'oscura, siniestra, tenebrosa...' (o algo por el estilo). Tampoco voy a meterme en si la relación que mantiene con Chabelita es sana mentalmente, castradora o de dependencia.

Lo que realmente me preocupa es que Dulce decida tirar de la manta, como aquellos imputados que llegan a acuerdos extrajudiciales para reducir sus condenas a cambio de largar lo suyo. Dulce está amagando y soltando miguitas de pan, como en el cuento de Pulgarcito, que llevan directamente a Cantora.La niñera más famosa de España vivió con Isabel Pantoja desde que tenía 18 años, lo que suponen casi tres décadas siendo su sombra en la intimidad de su hogar. Estoy seguro de que sabe más que María Navarro, la madre de Lola Dueñas, esa mánager que espantaba a los paparazzi a bolsazos. La segunda ha guardado siempre silencio, pero... ¿lo hará Dulce?

Dulce ha sufrido el rechazo y la exclusión, aunque ha mostrado abnegación y fidelidad extrema a lo largo de los años, lo que puede convertir su cabeza en un nido de avispas. El mismo Kiko Rivera le deseaba la muerte la semana pasada con una cara de ira que cuando le muestren las imágenes a la concursante de 'Supervivientes' puede abrir la caja de Pandora (¿o debería decir Cantora?).Chabelita Pantoja, a la hora de elegir se posicionaría del lado de su madre, por lo que Dulce perdería no solo su confianza y su cariño, además de un trabajo vitalicio, pero la niñera podría convertirse en un colaboradora televisiva, un puesto que requiere de tener mucha trastienda, desparpajo y resistencia psíquica. Un trabajo muy lucrativo que bien administrado le podría dar para una jubilación más que relajada.

Aún quedan muchos capítulos por escribirse en 'Supervivientes' y si la audiencia es inteligente la dejará hasta las galas finales en Honduras, ya que en las situaciones extremas es cuando se desata la lengua, se escupen los sentimientos y se dicen cosas de las que luego podrías arrepentirte.En torno a Cantora siempre ha habido leyendas urbanas, dimes y diretes, misterios propios de una novela de terror gótico, pero muy poca claridad, nada de luz y taquígrafos. Dulce podría arrojar claridad a un enclave en el que vive recluida, cual Greta Gargo, la cantante más famosa de España sobre la que se habla mucho y se sabe poco. Porque su hermano Agustín está mediáticamente mudo como Belinda, Anabel Pantoja filtra menos de lo que dicen, Raquel Bollo no ha vuelto a atravesar la cancela de la finca y su círculo íntimo es cada vez más reducido.Para qué os voy a engañar. A mí me encantaría que Dulce se convirtiera en un libro abierto porque lo que tenga que contar no me podría interesar más...