En los años 90, el Gobierno británico entró en colapso al descubrir que el jefe del Estado Mayor de la Defensa mantenía una relación extramatrimonial con una mujer que poseía información comprometedora y que, además, podía negociar con ella. Aquella femme fatale no era otra que Bienvenida Pérez, quien terminó rentabilizando el asunto en la prensa del corazón española. Esta lady de orígenes valencianos lleva un tiempo desaparecida del foco mediático, ya que ha vuelto a fijar su residencia en el Reino Unido.
Bienvenida Pérez, toda una Lady
A sus 68 años, la española más temida de la Pérfida Albión se ha instalado en Sandbanks, en la costa sur de Inglaterra. Según relató en una entrevista concedida al periódico El Mundo, trabaja como asistente personal de un acaudalado financiero al que conoció hace tres décadas. "Me ocupo de él, gestiono sus cuentas en Inglaterra, me aseguro de que tome su medicación porque tiene problemas cardíacos y de que esté bien cuidado... No tiene hijos, y su familia está muy agradecida porque soy muy leal", explicaba al rotativo.
En aquella ocasión, aseguraba que, en su enésima reinvención, había encontrado la tranquilidad y el sosiego que siempre anheló. Además del tiempo que dedica a cuidar del anciano millonario, Bienvenida disfruta de una existencia tan lujosa como contemplativa: pasea a su perrita Chanel y se sumerge en los placeres de la lectura.
Bienvenida Pérez pasea por Valencia
La hija de una limpiadora que llegó a lady
A pesar de que la hemos conocido como una mujer de aires sofisticados y ademanes refinados, Bienvenida proviene de orígenes humildes. Nacida en el modesto barrio del Carmen de Valencia en 1957, su padre afilaba cuchillos y su madre trabajaba limpiando en la casa de un pediatra para mantenerse. Cuando sus padres se separaron, la madre de Bienvenida se marchó a Londres en busca de una vida mejor, dejando a la niña al cuidado de su abuela materna hasta que esta falleció. Fue entonces cuando Bienvenida acabó en un orfanato regentado por monjas que atendían a niñas con problemas familiares. "Bordábamos, me ponían en la cocina, estudiaba... Lo peor era que teníamos que rezar el rosario y leer el catecismo varias veces al día", relata.
Tras una temporada en Asturias, donde fue acogida por una familia y logró alcanzar cierto nivel de estudios, se marchó a Londres con su madre a los 16 años. "Yo era una niña buena, rubia, guapa, y mi madre no lo podía soportar. Ella llevaba hombres a casa, y yo acababa durmiendo en el comedor. Tenía celos de mí", ha explicado. Su vida dio un giro cuando comenzó a trabajar en una gran empresa de ingeniería, donde el dueño se enamoró de ella. Bienvenida, la hija del afilador y la limpiadora que había pasado por un orfanato, empezó entonces a moverse en las más altas esferas de la sociedad británica.
La británicovalenciana con una antigua pareja
En 1985, las mejores boutiques de Londres la conocían como cliente habitual, y en 1990 se casó fugazmente con un sir 30 años mayor que ella, llamado Anthony Buck. En ese ambiente elitista y poderoso, Pérez sedujo a sir Peter Harding, jefe del Alto Estado Mayor británico, con quien inició una relación que acabó plasmada en los tabloides británicos.
Bienvenida se hizo con los servicios de un famoso relaciones públicas y cobró una sustanciosa cantidad por la exclusiva y las fotos en las que aparecía con Harding en un hotel. "Los medios de comunicación británicos no se tomaron bien el hecho de que yo fuera una 'extranjera' que estaba sacando a la luz elementos del establishmentbritánico que la prensa y el Gobierno hubieran preferido mantener ocultos, y se me acusó de espiar para Sadam Husein", escribió.
Estrella televisiva sin parangón
La convulsa vida sentimental de la valenciana le abrió las puertas de Telecinco en los años 90. Comenzó participando en programas como Moros y cristianos o La máquina de la verdad, y ya en el nuevo milenio formó parte del reality Esta cocina es un infierno junto a Bárbara Rey, con quien tuvo sonoros enfrentamientos. Su carisma y su capacidad para generar titulares la convirtieron en una figura habitual de la televisión española durante esa época.
Una de las últimas intervenciones de Bienvenida Pérez en el Deluxe
Encantada con su vida de lujo en Sandbanks, Bienvenida Pérez descarta, a corto plazo, regresar a España para retomar su trayectoria profesional en televisión. Sin embargo, su nombre sigue presente en las quinielas, y según sus propias palabras, la productora de Supervivientes ha negociado con ella para contar con su presencia en Honduras. Aunque por ahora prefiere la serenidad de su vida en Inglaterra, su historia sigue siendo un recordatorio de cómo una mujer de orígenes humildes logró conquistar los círculos más exclusivos y hacerse un hueco en la memoria colectiva, tanto en el Reino Unido como en España.