Aída Nízar en estado puro. La controvertida española llegó al ‘Gran Hermano’ italiano, ‘Grande Fratello’, con la intención de expiar sus pecados del pasado, comedirse más en sus apariciones televisivas y, de paso, hacerse con el ansiado maletín final. Eso sí, su fuerte temperamento y que nadie ha logrado aminorarla ha conseguido que protagonice un fuerte enfrentamiento con uno de sus compañeros. De hecho, esta batalla ha hecho que toda la casa se posicionase contra la vallisoletana que, arrinconada en una esquina, pedía al resto de concursantes que no la tocasen y que dejasen de increparla.
La culpa fue del tiramisú
El motivo de la disputa ha surgido después de que Baye, uno de sus compañeros italianos de aventura, hiciese 14 sabrosos tiramisús como postre. Sin embargo, Aída Nízar quería comérselo antes de tiempo y nadie pudo frenar su impulso de probar tan apetitoso manjar. Su compañero trató por todos los medios que Aída Nízar respetase al grupo y esperase al resto para probarlo. Al final, el postre terminó en el suelo.
¿Y qué hizo entonces Aída Nízar? Acudir a la nevera y cogerse un nuevo tiramisú. Esto revolucionó la casa y se armó una gran trifulca, que terminó con Aída discutiendo con toda la casa en un fluido italiano, aunque los nervios le hacían mezclar idiomas probando suerte incluso con el inglés para hacerse entender. No hubo suerte, quizá sí sabían qué decía, pero no cómo es posible que actuase de tal manera, por lo que se ha asegurado una enemistad con la mayoría de habitantes de ‘Grande Fratello’.
[Así entró Aída Nízar a 'Grande Fratekllo' dispuesta a liarla]
Recordemos que ya incluso su entrada al concurso vino acompañada de polémica y es que ha discutido con el presentador del programa, con sus compañeros y casi hasta con las cámaras. A Aída Nízar le espera una eterna nominación hasta que el público la expulse, el maletín con los 300.000 euros se aleja cada semana más…
La productora del programa ya ha tenido que tomar medidas contra los concursantes: