El pasado lunes, conocíamos la trágica noticia de la muerte de Michu, ex de José Fernando. La joven fue hallada sin vida en su casa gaditana, en la que residía junto a su hija de 7 años. Al parecer, todo apunta a que la causa de la muerte fueron los problemas cardíacos que sufre desde que nació y por los que tuvo que pasar por quirófano en un par de ocasiones. La ex del hijo de Ortega Cano llevaba un marcapasos y se encontraba en lista de espera para un trasplante de corazón. La ex de José Fernando padecía problemas cardíacos desde su nacimiento. Hablamos con José Luis Zunzunegui, Socio de Honor de Asociación Epic y jefe de sección de UCIP y Hemodinámica del HGU Gregorio Marañón de Madrid, quien nos aclara a qué problemas de salud se enfrentaba Michu. 

Michu sufría una cardiopatía congénita, que "son malformaciones del corazón que se producen durante la gestación, es decir, el bebé ya nace con ellas. Se pueden diagnosticar en el periodo de recién nacido, normalmente por una ecografía, porque el bebé tiene un soplo cardíaco o tiene una desaturación de oxígeno al nacimiento. Incluso, actualmente, casi el 80% de las cardiopatías congénitas se diagnostican intrauteros. Eso quiere decir que, durante el estudio de la ecografía fetal, se estudia también el corazón del feto y a partir de las 16 semanas se puede establecer si el bebé tiene, si el feto tiene algún tipo de malformación estructural en su corazón", expone José Luis Zunzunegui, Socio de Honor de Asociación Epic.

Michu en una imagen de archivo

Michu en una imagen de archivo.

@mixu.rg Instagram

Existen varios tipos de intervenciones que se pueden realizar a bebés con problemas graves del corazón: "Puede haber cirugía cardíaca en la que se intenta restablecer la anatomía normal del corazón o que se intenta hacer una corrección paliativa. Esto quiere decir que, si no se puede restablecer la estructura normal del corazón, el cirujano hace que la sangre circule para compensar tanto la sangre que tiene que pasar al pulmón como al territorio sistémico". Y añade: "Hay otra forma de intervenir que es sin cirugía, que es mediante cateterismo cardíaco y actualmente cada vez hacemos más intervenciones percutáneas que pueden solucionar los problemas del bebé, aunque no siempre es posible. Pero no todas las malformaciones congénitas del corazón pueden ser tratadas desafortunadamente por vía percutánea y muchas de ellas necesitan cirugía"

Le preguntamos qué implica vivir con marcapasos desde una edad temprana, algo a lo que tuvo que enfrentarse Michu: "Realmente cada vez se ponen marcapasos, los marcapasos se han ido sofisticando y miniaturizando, es decir, cada vez son marcapasos más pequeños y que la batería dura más. En realidad, vivir con un marcapasos de por sí no significa una limitación importante si tu corazón funciona bien, pero sí necesita revisiones periódicas con el cardiólogo, que lo que va a establecer es que la forma de estimular del marcapasos y su batería están bien". 

Michu con su hija en brazos.

Michu con su hija en brazos.

Gtres

Sin embargo, nos analiza el motivo por el que es, en muchos casos, necesario el trasplante de un corazón: "Hay anomalías cardíacas que a veces van asociadas a fallo de bomba, es decir, el músculo cardíaco falla y en estos casos es cuando se necesita a veces un trasplante cardíaco porque a pesar de que la cardiopatía congénita esté corregida, el músculo cardíaco no se contrae bien. O, en situaciones más excepcionales, la complejidad de la malformación, incluso aunque haya sido operada en varias ocasiones, hace que sea necesario un trasplante cardíaco porque la reparación quirúrgica del defecto es tan compleja que no es posible sin un cambio total del circuito como supone un trasplante cardíaco". 

Tal y como hemos dicho anteriormente, en el año 2018, Michu se enfrentó a una operación para retrasar un trasplante de corazón: "Muchas veces sabemos que se pueden hacer cirugías paliativas, esto quiere decir para mantener un nivel de oxígeno en la sangre normal y una calidad de vida normal, pero sabemos que estas cardiopatías tienen un tiempo de caducidad y que en el futuro posiblemente necesiten trasplante. Se intenta retrasar la edad del trasplante porque normalmente la longevidad del injerto es de aproximadamente unos 10 o 15 años. Cuanto más tarde se trasplante un paciente, pues más durará su corazón o más tiempo de esperanza de vida tendrá". Y asegura que "no es lo mismo trasplantar un bebé de un año, que habría que trasplantarlo a los 12 años, que un paciente de 30 o 40 años que habría que trasplantarlo a los 45. El rango vital que abarcas aplazando el trasplante mediante este tipo de intervenciones va a favor del paciente". 

Estar en la lista de espera de un trasplante de corazón "significa dos cosas". Por un lado, "tienes que estar en el área de influencia de tu centro de referencia, es decir, si un paciente es incluido en lista de espera de trasplante, por ejemplo, en una ciudad pequeña como puede ser Jaén, pues posiblemente tenga que estar en el entorno de un centro trasplantador como puede ser Sevilla. Y luego, si tú estás incluido en una lista de espera de trasplante, significa que la función de tu sistema circulatorio, especialmente de tu corazón, está en el límite y que necesita ser cambiada. El riesgo de que te suceda algo en lista de espera siempre es mucho mayor, pero no por estar en lista de espera, sino porque el límite de funcionalidad de tu sistema circulatorio es ya bastante poco óptimo". Y sentencia: "Es decir, que si estás en lista de espera, es posible que seas un paciente de riesgo de muerte súbita. Y eso precisamente se intenta evitar incluyendo en lista de espera cada vez más frecuentemente y estando cerca del área de influencia del centro trasplantador". 

Pero, ¿qué problema pudo desencadenar Michu para sufrir una repentina muerte? "En un paciente que tiene una cardiopatía compleja, reintervenido varias veces, que porta un marcapasos, la posibilidad de muerte súbita siempre existe". Y nos explica que "el marcapasos, desafortunadamente, dependiendo del tipo de marcapasos y del tipo del dispositivo, no siempre puede prevenir una muerte súbita por una arritmia, a no ser que aparte de un marcapasos, también tenga la función de desfibrilador. Es decir, que pueda darte un choque para bloquear esa arritmia. Esto no siempre es posible predecirlo, y a veces también, en pacientes en los que tienen una función cardíaca límite, cualquier tipo de aumento del requerimiento hemodinámico puede suponer también la aparición de una muerte súbita, ya que la bomba cardíaca no es capaz de responder a esas necesidades puntuales".