Lola Herrera (90 años): "Ceno muy ligero como unas verduras braseadas o una tortilla francesa"

A sus 90 años, Lola Herrera está imparable. En sus planes no está bajarse de los escenarios, pues sigue actuando a pesar de su avanzada edad. Durante los últimos meses, la intérprete se ha subido a las tablas de los escenarios más emblemáticos de nuestro país con la obra teatral 'Camino a La Meca', una obra que describe la vida de la reclusa viuda Helen Martins a la que da vida la propia Herrera. A lo largo de los años, la actriz ha revelado algunos pequeños detalles de su vida más personal, más allá de los escenarios y los focos. 

Llegar a los 90 años repleta de energía y con buena salud ha sido fruto, entre otras cosas, de una buena alimentación, sana y equilibrada. Lola Herrera es consciente de los alimentos que le sientan bien para añadirlos a su dieta y rehuye de todos aquellos con los que siente hinchazón abdominal o malestar en general, sustituyendo este tipo de alimentos por otros que son más fáciles de digerir para ella. La actividad frenética de Lola Herrera a lo largo de los años ha hecho que pase buen tiempo fuera de su casa, entre giras de teatro. Sin embargo, eso no ha impedido cuidarse y mantener una dieta sana y equilibrada que, a día de hoy, sigue degustando en su día a día. 

Lola Herrera desvela qué alimentos no faltan en su día a día y cuáles evita a toda costa

Lola Herrera ha sido una de las invitadas al canal de YouTube de la actriz y presentadora Patricia Pérez, quien ha dado un giro de 180 grados a su vida como consultora de naturopatía, nutrigénetica y cuidado integral. Allí, habló de sus hábitos de alimentación y de qué productos no pueden faltar en su dieta diaria. La intérprete se considera una persona muy ordenada. De hecho, antes de irse a la cama cada noche, se deja la mesa puesta y el desayuno (casi listo) para el día siguiente. "Yo me levanto y lo primero que hago es prepararme el desayuno. Por la noche, normalmente, dejo la mesa puesta. Me dejo todo colocado, incluso la tostada de pan preparada". Y añade: "Cuando me levanto, me gusta tenerlo todo organizado y darle solo a un botoncito". 

La artista confiesa que su desayuno habitual está compuesto por "un kiwi, un café con muy poquita leche y una tostada de pan integral con cereales y me pongo un poco de queso batido y mermelada. Eso unas veces. Otras, aceite de oliva del bueno", ha continuado diciendo. Además, ha revelado que el tomate no suele integrarlo en su desayuno. "Me gusta mucho el pan con tomate, pero para otras horas", asegura. 

Las verduras y el pescado son dos productos que no faltan en la comida y la cena de Lola Herrera

Lola Herrera también ha revelado qué come a la hora del almuerzo: "Me gusta tomar verdura. Pero no todas las verduras no me gustan. No me gusta la coliflor, bueno, me gusta, pero llevo años sin probarla porque me sienta fatal. El brócoli me parece que se parece a la coliflor, pues tampoco. Tomo bastantes judías verdes, acelgas de una marca de La Rioja con un poco de zanahoria. Todo rehogado con un poco de aceite. Luego tomo más pescado que carne. Tomo más pollo que carne roja", explica. Además, confiesa que no es mucho de combinar muchos alimentos porque nota que "no me sientan bien". La artista ha asegurado que ya no toma postre, aunque en antaño sí lo hacía: "Me lo he quitado, pero era siempre fruta. Por ahí, cuando estoy de gira, cuando hay algún postre casero, pues lo pruebo porque es una gran tentación". 

Lola Herrera también ha desvelado qué cena en su día a día. Tal y como puedes ver, evita las comidas copiosas y pesadas para dejar paso a alimentos fáciles de digerir y que sean sanos. "Ceno muy ligero y me gusta cenar pronto. Ceno más cuando estoy trabajando porque luego nos vamos a cenar a algún sitio y ya se me va la hora. Antes de la función no ceno porque sino que no te sientes bien para hacer el trabajo. Pero si vas con los compañeros, ya es más tarde y yo procuro que sea una cosa leve. Algo a la plancha, unas verduras braseadas o algo ligero como una tortilla francesa", ha expuesto la artista. 

También ha revelado que aunque habitualmente bebe agua templada en las comidas, sí que le gusta una copa de vino tinto, pero prefiere tomarla cuando sale a cenar a un restaurante. "En casa una botella de vino no la abro, pero cuando salgo a cenar me gusta el vino tinto. Coma carne o pescado, a mí me gusta el vino tinto. El vino blanco me sienta mal al estómago", ha confesado. "