En verano, la piel cambia de humor: está más expuesta, más reactiva y, sí, más sedienta. Entre el sol, el salitre, el cloro y los ventiladores a tope, necesita que le pongamos atención de verdad. No hace falta complicarse con rutinas de belleza eternas, basta con conocer tres pilares clave que nos da una experta en dermocosmética.
Con la llegada del verano y la mayor exposición al sol, cuidar la piel se convierte en una prioridad. Marta Ortega, farmacéutica y fundadora de la marca de nutricosmética MLAB comparte tres pasos fundamentales para mantener la piel saludable, luminosa y protegida durante esta temporada:
Exfoliar para iluminar sin irritar
Exfoliar la piel es como abrir las ventanas: deja que la piel respire, se renueve y brille con luz propia. Eso sí, hay que tener mucho cuidado porque los excesos, como en todo en la vida, tienen sus riesgos. Exfoliar en exceso puede dejar la piel sensibilizada, más vulnerable al sol y a la aparición de manchas. Así que mucho cuidado.
“La exfoliación en verano es esencial porque elimina las células muertas, lo que ayuda a conservar la luminosidad natural de la piel”, explica Ortega. Además, este proceso permite que los ingredientes de los productos cosméticos que apliquemos a continuación penetren mejor y actúen de forma más efectiva.
¿La clave? Optar por una exfoliación suave, respetuosa, que acompañe la renovación natural sin forzarla.
- Elige fórmulas con gránulos finos, ácidos suaves como el láctico o mandélico, o exfoliantes enzimáticos si tu piel es reactiva.
- Hazlo por la noche, para que la piel se recupere sin estar expuesta a la radiación solar.
- Tras exfoliar, aplica una crema calmante con ingredientes como avena, centella asiática o pantenol.
- Zonas clave: no te olvides del escote, hombros, rodillas y tobillos. En verano, esas zonas se ven… ¡y brillan más cuando las cuidas!
Una piel bien exfoliada no solo se ve más luminosa, también permite que el bronceado sea más homogéneo y que los activos posteriores trabajen al máximo.
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Hidrata, hidrata, hidrata
Con la subida de temperaturas, la piel necesita rehidratarse igual que tú buscas agua o gazpacho. Pero ojo: hidratar no significa saturar. El secreto está en escoger texturas ligeras, que se fundan con la piel sin dejarla pegajosa.
La farmacéutica hace hincapié en la importancia de la hidratación para prevenir la sequedad. “El sol, el calor y el sudor pueden deshidratar la piel, por lo que es fundamental mantenerla hidratada para conservar su elasticidad y salud”.
El sol, el cloro de la piscina y el aire acondicionado son ladrones silenciosos de agua cutánea. ¿Qué puedes hacer?:
- Escoge texturas tipo gel, aqua-cream o sérum fluido si tu piel es mixta o grasa.
- Las pieles secas también pueden beneficiarse de emulsiones hidratantes con ceramidas o manteca de karité, siempre que no resulten oclusivas.
- Busca ingredientes como ácido hialurónico, glicerina, urea o escualano vegetal para reponer agua sin apelmazar.
- Aplícala al salir de la ducha, cuando la piel aún está húmeda: es el momento ideal para sellar la hidratación.
Un tip beauty que deberías probar es añadir unas gotas de aceite (como jojoba o rosa mosqueta) a tu crema hidratante nocturna para ayudar a reparar y recuperar ese efecto “piel de vacaciones”.
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Dieta para proteger la piel
En verano, tu piel también come lo que tú comes. Y si la idea es mantenerla radiante, protegida y con tono uniforme, los antioxidantes deben ser protagonistas en el plato. Marta Ortega recomienda una dieta rica en antioxidantes. “Estos nutrientes ayudan a combatir los radicales libres generados por la exposición solar, lo que previene el envejecimiento prematuro y las manchas, además de mantener la piel con un brillo saludable”.
Estos nutrientes combaten el estrés oxidativo que provoca la radiación solar y ayudan a prevenir envejecimiento prematuro, manchas y pérdida de firmeza:
- Elige frutas con colores vivos como frutos rojos, mango, papaya, kiwi y naranja: son ricas en vitamina C, que ayuda a reparar y dar luminosidad.
- Verduras de hoja verde como espinacas y kale contienen vitamina E y betacarotenos, que protegen la piel desde dentro.
- El licopeno del tomate es un potente fotoprotector natural. ¡Añádelo fresco en tus ensaladas!
- El omega 3 de alimentos como el salmón, las nueces o el aceite de linaza mejora la elasticidad y combate la inflamación.
- No olvides mantenerte muy hidratada: el agua con rodajas de pepino, limón o hierbas es una forma deliciosa de nutrir tu piel desde dentro.
Smoothing Yuzu Hydrating Body Scrub de Alma Secret (13,65€ / 250ml)
Es un exfoliante corporal nutritivo que combina exfoliación física y enzimática con activos vegetales y aceites no comedogénicos para transformar la piel seca y rugosa en una piel suave, luminosa y uniforme. Formulado con AHA, enzimas de papaya, ácido succínico y extractos reconfortantes como avena, arroz y manteca de karité, ofrece una renovación profunda sin irritar. Su aroma cítrico con notas de yuzu, mandarina y pomelo lo convierte en un auténtico ritual sensorial adictivo.
Talasso-Scrub Antigua de Collistar (37,50€ / 700g)
Un ritual spa que combina talasoterapia, aromaterapia y crioterapia para alisar, tonificar y energizar la piel. Gracias a sus sales marinas de distintas granulometrías, proporciona una exfoliación eficaz y embellecedora. Su fórmula crioactiva ofrece una sensación de frescor inmediata y prolongada, mientras los aceites vegetales dejan la piel suave, firme y revitalizada. Ideal como paso previo a tratamientos anticelulíticos para maximizar sus beneficios.
Sérum Corporal Piel Nueva de Clarins (62€ / 200ml)
Es un tratamiento antiedad revolucionario para el cuerpo, con la misma eficacia que los sérums faciales. Su fórmula combina ácidos de hibiscus, ácido pirúvico y tripéptido pro-colágeno para renovar, alisar y reafirmar la piel, mejorando visiblemente firmeza, luminosidad y textura. Con una textura láctea sensorial y 97% de ingredientes naturales, deja la piel satinada y sin residuos. Comprometido con la belleza responsable, es ideal para todo tipo de piel y edades, dentro de una rutina corporal avanzada.
Night Body Serum de Hada Labo Tokyo (14,95€ / 150ml)
Un tratamiento japonés intensivo que nutre profundamente la piel mientras duermes, mejorando su suavidad, firmeza y elasticidad. Su innovadora fórmula proporciona hidratación continua y deja la piel más revitalizada cada mañana. Ideal para incorporar como gesto de belleza nocturno en tu rutina corporal. Spoiler: te vas a enganchar.