Las 5 camisas de rayas de Zara para llevar con los pantalones cigarette que triunfan entre las mujeres más elegantes

Los pantalones cigarette, ese básico imperecedero que rescata lo mejor de la elegancia noventera y lo reinterpreta con pinzas más fluidas o perneras que rozan el tobillo, han vuelto a conquistar los armarios más exigentes. No es casualidad que editoras de moda, y mujeres con el don de saber siempre qué ponerse hayan vuelto a confiar en ellos. Porque tienen algo de clásico sin llegar a ser formales del todo, algo de sofisticado sin rozar la rigidez. Pero si hay una prenda que les da el contrapunto perfecto, esa que equilibra el binomio entre lo serio y lo despreocupado con la naturalidad de quien ya ha vivido muchas primaveras, es la camisa de rayas.

Esta temporada, Zara nos ha sorprendido con cinco versiones que no solo conversan a la perfección con los cigarette trousers, sino que, además, funcionan como herramientas de estilo con múltiples usos. Vamos, que lo mismo te valen para una reunión con tu jefa que para tomar una copa de albariño en una terraza del centro de Madrid. Y eso, en el mundo de la moda, es mágico.

Camisa popelín rayas de Zara 25,95 euros

Hay algo innegablemente limpio en una camisa azul celeste de rayas verdes y blancas. Este modelo de popelín, con corte recto y cuello clásico, parece sacado de ese fondo de armario ideal organizado por Marie Kondo que todas imaginamos. Las rayas son finas, y el tejido tiene esa rigidez justa que estructura sin parecer que estás dentro de una caja.

Combinarla con unos cigarette color hueso o gris perla es una apuesta ganadora. Pero si quieres jugar, súmale unos mocasines destalonados y un cinturón de piel con hebilla vintage para rematar el look. Para las más valientes, prueba con pantalón negro de pinza alta, labios rojos y gafas XL. ¿Resultado? Look de editora de revista francesa en pleno press day.

Camisa popelín oversize rayas de Zara 25,95 euros

El amarillo mantequilla —que no es ni mostaza, ni vainilla, ni limón— es ese color que ha conseguido colarse esta primavera en la gama de los neutros con carácter. Esta camisa oversize juega con las proporciones y tiene ese punto informal que da el volumen en mangas, pero sin caer en lo desaliñado.

Ideal con pantalones cigarette en tonos topo e incluso con vaqueros de corte recto si se quiere un aire más urbano. Si se anuda ligeramente a la cintura y se deja un hombro al descubierto, consigue una estética resort tan relajada como impecable. Imagina el look con unas sandalias joya, un moño bajo y un capazo original con cuentas. Es imposible fallar. 

Camisa rayas combinada popelín de Zara 29,95 euros

Hay camisas que parecen diseñadas para recibir piropos. Esta, con su doble cuello (el inferior azul y el superior blanco) y sus rayas verticales, es puro ingenio textil. Tiene algo de experimento bien resuelto, de prenda que habla de quien la lleva incluso antes de abrir la boca.

Póntela con pantalones cigarettenegros de talle alto y stilettos clásicos. Añade un reloj masculino o unos pendientes minimalistas para contrarrestar el detalle original sutil del cuello doble. El look es impecable para una presentación importante o una cena de trabajo en un hotel con historia. También queda divina bajo un chaleco de traje si te atreves con los juegos de capas.

Camisa corta con rayas lino de Zara 22,95 euros

Esta camisa es lo más cercano que encontrarás a un crop top aprobado por las madres italianas. Confeccionada en lino rosado de rayas blancas y mangas anchas que aportan movimiento y ventilación, es lo que se te viene a la cabeza con un verano infinito. El corte corto la hace ideal para marcar cintura sin ceñirse demasiado.

Funciona increíblemente bien con pantalones cigarette blancos o crudos, y con sandalias de cuña de esparto. Añade unas gafas de sol redondas, labios coral y un bolso de malla con asa corta para canalizar tu dolce vita interior. 

Camisa con rayas cuello mao ZW Collection de Zara 39,95 euros

Terminamos con una joya discreta: esta camisa de la línea más premium de Zara (la ZW Collection) que apuesta por rayas grises sobre fondo blanco y un cuello mao que lo cambia todo. No hay botones evidentes ni volúmenes forzados: solo una estructura limpia y depurada.

El maridaje perfecto aquí es un pantalón cigarette de lino color piedra y unas bailarinas en tono cuero envejecido. También se puede elevar el conjunto con mules metalizados o incluso sandalias minimalistas de tiras finísimas. El cuello mao permite jugar con pendientes llamativos o incluso con collares cortos si se quiere dar protagonismo al escote. ¿Un truco extra? Llévala abierta sobre una camiseta de canalé blanca: triunfarás.