El museo de Rocío Jurado abrirá sus puertas el día 1 de julio. A pesar de que quedan solo unos días para inaugurarlo, todavía hay flecos por cortar y así lo demuestra el primer fiasco que se han llevado. Y es que en los planes que tanto su hija, Rocío Carrasco, como el alcalde de Chipiona, Luis Mario Aparcero, tenían en mente, estaba también tener una cafetería-restaurante en el interior del museo, pero no han encontrado a nadie que se haga cargo de la misma. "Se abrió el plazo de licitación para la cafetería y tras constituir la mesa de contratación y todos los requisitos y lo que tiene que tener la cafetería-restaurante en la nave destinada al centro de interpretación, al final no se ha presentado nadie", se ha comentado.
Esta situación revelada por la periodista Beatriz Cortázar en Es Radio demuestra que no todo está saliendo como Rocío y su equipo quería. Un contratiempo que no derriba en absoluto sus sueños y que no evitará que a primeros de julio el museo comience a recibir fanáticos de La más grande en Chipiona. Después de mucho trabajo, años de espera e inconvenientes por el camino, la familia de Rocío Jurado celebrará que este proyecto vea la luz. "Ahí la única que tenía que ver era yo y el ayuntamiento. Gracias a Dios está todo solucionado, hemos decidido que el día 1 de julio se abre el museo", dijo hace unos días Rociito.
Para entonces se ha pensado un homenaje a la altura, pero no habrá ningún local preparado para que los asistentes se puedan tomar un refrigerio o comer si entran al museo. Sí podrán ver muchos recuerdos de la artista y objetos personales como vestidos, ya que estas piezas han formado parte desde el principio del inventario que se iba a mostrar al público visitante. Después de una lucha infatigable este es lo único que ha conseguido unirles, ya que todos deseaban que Rocío Jurado tuviera un museo hecho a su medida. Un lugar en el que se le rindiera tributo y permitiera conocer a la cantante más a fondo.
Luis Mario Aparcero anteriormente ha hablado con SEMANA sobre cómo ha sentado que el museo haya llegado a buen puerto. "Todos los familiares estaban totalmente de acuerdo con su apertura. Rocío está a tope, muy pendiente del logotipo, los detalles y de todo lo que tenga que ver con ello. Nunca se ha puesto en contra y también he hablado mucho con Amador, con Gloria…son encantadores. No hay pegas y me lo han transmitido así. Ellos entienden que la heredera universal es Rocío, que es la propietaria de todo lo que hay allí…Todos están contentos de que se abra". Ahora hay que esperar para saber cómo es de rentable este lugar y si han perdido dinero al haber adaptado el restaurante del museo, pues según él nos contó separar ambas zonas superaba una obra de 104.000 euros.