Mayte Zaldívar, preocupada, revela la verdadera situación de Julián Muñoz

Un caso de corrupción que terminó con condenas de prisión muy severas. ¿Su epicentro? El Ayuntamiento de Marbella. Tuvo un gran número de condenados, casi 50 y entre ellos estaba el nombre de Julián Muñoz.

A nivel sentimental antes, a nivel judicial en el año 2006. Tres años de que él alcanzara su máximo poder, estalló el caso Malaya. Según los expertos, uno de los mayores casos de corrupción municipal de la historia de nuestro país.

Exactamente 1100 euros, no obstante, esta cantidad se podría haber visto mermada debido a los embargos que tiene después de sus condenas. Sobre esta pensión él mismo ha llegado a decir que puede recibirla gracias a Isabel Pantoja, «pues me dio ella de alta».

Su aspecto dista mucho de la imagen que lucía Julián Muñoz entonces. Ahora ha perdido mucho peso y su aspecto está desmejorado si se comparan ambas instantáneas, aunque cabe señalar que su nombre se ha convertido en el centro de las polémicas por llevar una vida que nada tiene que ver con una persona enferma.

Según varias publicaciones, ha sido pillado bailando sevillanas en Mijas (Málaga) o entrando a tomar algunas sesiones de rayos UVA con el fin de lucir una piel más bronceada. Dos acciones que han sido muy criticadas, ya que el Ministerio de Justicia le había dejado abandonar la cárcel, aunque con restricciones, por “razones humanitarias y dignidad personal». 

Sus apariciones televisivas se han visto reducidas con el paso del tiempo, aunque de vez en cuando vuelve a los medios de comunicación. Él, por su lado, trata de apostar por una vida tranquila junto a su familia.

Eso sí, desde su casa al encontrarse de arresto domiciliario. Allí se confesó sobre si volvería a iniciar una relación con la tonadillera si pudiera echar el tiempo atrás: «El arrepentimiento en el transcurrir de la vida no sirve para nada (…) si lo tuviera que repetir ahora, no lo haría«.

Ahora no solamente Julián Muñoz vive una situación extrema, también la que había sido su pareja, Mayte Zaldívar. Ella misma ha revelado a la revista SEMANA en exclusiva el drama económico que le ha provocado el coronavirus.

Mayte y su pareja Fernando Marcos tienen ‘Puesto 85’, un negocio culinario en el mercado de abastos de Marbella. Una pequeña empresa que ha tenido que ver paralizada su actividad tras las medidas que ha tomado el Gobierno para frenar la propagación del coronavirus. «No es un cierre programado, por lo que previamente había hecho acopio de comida, pagado a proveedores. Nos pilló sin habernos preparado y es un palo. Tenía una persona que venía de vez en cuando y estaba yo con mi pareja también. Hemos tenido que hacer un ERTE porque así me lo aconsejó mi gestor. Al final es un negocio muy pequeño y piensa que somos autónomos», dice a este medio.