Kiko Matamoros abre su álbum de fotos más íntimo junto a su nieto el día de su boda

Kiko Matamoros sigue en una nube tras su boda con Marta López, que se celebró el pasado 2 de junio en Madrid, bajo la atenta mirada de familiares y los amigos más íntimos. Ya están de vuelta en la capital después de haber disfrutado de un increíble viaje de novios, pero siguen recibiendo fotos del gran día. Y ellos no pueden evitar emocionarse al verlas. El colaborador tuvo a su lado a su nieto mayor, Matías, hijo de Laura Matamoros, que tuvo un papel importante en su boda. Ahora le ha dedicado un post a él.

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"El penúltimo de la boda. No me pudo hacer más feliz ❤️❤️❤️", ha escrito Kiko Matamoros junto a varias fotos en las que aparece junto al pequeño. Y es que Matías fue una pieza fundamental durante el día de la boda de su abuelo, ya que llevó las alianzas durante la ceremonia religiosa celebrada en la Basílica de San Miguel en la capital. Además, se lo pasó en grande. Tanto es así que duró hasta el final de la fiesta.

El pequeño Matías tuvo un papel importantísimo en la boda de su abuelo

Su nieto es una de sus personas favoritas y con él pasó muchos ratitos durante la boda. Eso permitió al fotógrafo a hacerle muchas fotos juntos. Y a Kiko Matamoros se le cae la baba. Su cara en todas las fotos demuestra cómo vive los momentos que está a su lado. Y por este motivo, ha querido dedicarle una publicación únicamente a él. Eso sí, no deja atrás a su mujer y a su hija Laura.Matías está muy orgulloso de su abuelo, con el que comparte aficiones como el fútbol. No dudó en ir vestido como su abuelo el día de la boda. Un traje de chaqueta de rayas, que combinó con una camisa blanca y una corbata azul. Fue el encargado de llevar las alianzas al altar con un plato de plata. Un momento que por supuesto su abuelo y su madre guardarán por siempre en la retina.

Se encargó de llevar las alianzas al altar

El 2 de junio ha pasado a ser el día más increíble de las vidas de Marta López y Kiko Matamoros. La pareja se dio el 'sí, quiero' en la basílica de San Miguel en pleno centro de Madrid. El colaborador llegó del brazo de su hija, Laura Matamoros, mientras que la modelo lo hacía junto a su padre, que se ha decantado por mantenerse al margen y pedir a su hija que no lo saque en las redes sociales. Todo salió perfecto, pero hasta ahora no se conocían los detalles más íntimos de este gran día.