Así fueron los últimos meses de Tina Turner: yoga, tiendas de lujo y comida gourmet en Suiza

Tina Turner ha dejado un grandísimo vacío en la industria de la música. Falleció a los 83 años el pasado 24 de mayo tras una larga enfermedad, pero ¿cómo fueron sus últimos meses? La cantante, que ha muerto por causas naturales en su casa de Suiza, pasó su última etapa muy centrada en sí misma e intentando ser todo lo independiente que podía. Así lo han revelado sus propios vecinos de Küsnacht, la ciudad de Zúrich en la que se dejaba ver con total naturalidad y en la que lamentan enormemente su muerte. Le gustaba pasear, detenerse en un parque para disfrutar de las montañas y las vistas que tenía a su alrededor y seguir su camino en tiendas de lujo como, en especial, de diseñadores italianos. Tina Turner se sentía allí en paz y lo evidenciaba tanto en sus movimientos como en su rostro.

La artista, que contaba con millones de seguidores, aprovechaba también sus días para degustar diferentes platos en restaurantes no aptos para todos los bolsillos, para comprar exquisita comida o para conducir su Porsche Cayenne, a pesar de que tenía tanto chófer propio como personal capacitado para viajar junto a ella a donde ella deseara. Ella era quien conducía su propio coche, dando igual las calles estrechas de la ciudad. Estaba más que acostumbrada a sus barrios, de hecho, vivió allí durante sus últimos 26 años, lo que le hizo que se sintiera como una más y que se ganara todo el cariño del resto. Tanto es así que era ella misma la que junto a su marido acudía a hacer los recados, rutina que le hacía muy feliz y a la que no quiso renunciar, dando igual el dinero que tuviera en su cuenta. "Tina Turner venía a la ciudad a hacer la compra. Tenía un mayordomo, pero le gustaba ir ella misma, con su esposo Erwin. Le encantaba la Casa Gourmet Moreira. Es el mejor sitio de la zona para comprar salmón ahumado y trufas blancas, le encantaba", dice un lugareño.Aunque estos no fueron sus únicos planes durante los últimos tiempos que se dejó ver. Tina Turner también apostó por el Yoga para relajarse, una práctica con la que logró conectar el cuerpo, la respiración y la mente. Está recomendada para personas de todas las edades y ella comenzó a hacerlo en un parque cercano a su casa, un enorme castillo en el que fue tremendamente feliz. Cabe señalar que quien tuvo la oportunidad de conocerla señala "que era muy amable, que parecía muy feliz junto a su pareja y que siempre tuvo buenos gestos con el resto".

La vivienda en la que ha residido Tina Turner durante sus últimos años y donde ha fallecido, es ahora propiedad de una empresaria multimillonaria. Un impresionante castillo que cuenta con cuatro pisos, jardín y que ha sido el hogar de la cantante y su marido, Erwin Bach, durante los últimos 22 años, y cuyo coste supera los 76 millones de euros. A esto se suma una enorme fortuna, la cual se ha cifrado en más de 230 millones de euros, número nada desdeñable y que podría ir a parar a su viudo y a dos hijos adoptivos.

El homenaje que le ha rendido Carlos III

Su muerte ha dejado desolados a todos. Por ello se le han rendido cientos de homenajes en su honor, siendo uno de los más destacables el que ha tenido lugar en Londres. Fue este fin de semana cuando la Banda Real entonó la canción de Tina Turner más conocida 'The Best', un tributo muy especial al que se unió el Cuerpo de Tambores de la Guardia Galesa del Primer Batallón.