El príncipe Alberto, sobre el estado de salud de Charléne de Mónaco: "Está aún cansada"

Ha pasado más de un año desde que Charléne de Mónaco pudiera regresar de Sudáfrica tras más de medio año en su país natal por complicaciones de salud. A su regreso, la princesa monegasca ingresó en una clínica privada europea para tratar su dolencia. Ahora, más recuperada, ha retomado sus compromisos oficiales como miembro de la Casa Grimaldi. Sin ir más lejos, este fin de semana acaparó el protagonismo al reaparecer en el Día Nacional de Mónaco junto a su marido y sus hijos, los mellizos Jacques y Gabrielle. A pesar de que poco a poco va retomando sus quehaceres, todavía requiere de tiempo para recuperarse al cien por cien. Así mismo lo cuenta el príncipe Alberto, quien ha hablado sobre el estado de salud de su esposa.

Alberto de Mónaco ha concedido una entrevista a Nice-Matin, donde ha hablado de cómo se encuentra Charléne un año después de su regreso al Principado. "Estoy muy feliz de que su salud haya mejorado y pueda estar presente en muchos eventos", ha comenzado diciendo a coalición de su aparición en el Día Nacional de Mónaco, ya que el pasado año fue la gran ausente de la jornada. A pesar de su felicidad por el hecho de que su mujer esté volcada  en diferentes compromisos sociales y humanos como es la Cruz Roja, protectoras de animales o incluso su propia fundación, Alberto es consciente de que la recuperación de su esposa es lenta y, lamentablemente, todavía no ha logrado estar al cien por cien. "Está aún cansada en algunos momentos", ha dicho. "Hay que dejarle todavía tiempo para que se recomponga y para asumir otros compromisos, pero lo hará", ha revelado en el citado medio.

Alberto habla de sus mellizos, Jacques y Gabrielle, fruto de su amor con Charléne de Mónaco

En esta entrevista, Alberto también ha hablado de sus mellizos, Jacques y Gabrielle. Será el próximo mes de diciembre cuando cumplan 8 años y tal y como asegura su padre, orgulloso, asegura que progresan "muy rápido en términos de madurez", además de que define como "extraordinario" verlos crecer. Según ha contado el príncipe, ambos "están muy unidos y muy cómplices". Alberto y Charléne no quieren, por el momento, que haya distinción entre ellos, a pesar de que solo el príncipe vaya a ser el soberano del Principado. Según Alberto, la princesa Gabrielle "también tendrá un papel destacado y tiene que estar lo más preparada posible para poder ayudar a su hermano". Asegura que ambos podrán compartir responsabilidades.

Esto no será algo inédito, pues sus hermanas, Carolina y Estefanía de Mónaco, siempre han demostrado su apoyo al Principado. Tanto ellas como sus respectivos hijos están implicados en las diferentes iniciativas que hay en marcha dentro del Principado. Sobre este tema, Alberto también se ha pronunciado: "Estoy muy contento de que se impliquen tanto. Sé que puedo contar con ellos y sé que mis hijos también podrán contar con ellos", ha dicho.

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