Sara Saiz, maquilladora: "Emma García opta en su maquillaje por un delineado difuminado para no endurecer la expresión"

Emma García es uno de los rostros más reconocidos de la televisión en España, que ha conquistado a todos por su carisma y un estilo inconfundible. Con sus looks acordes a las tendencias, y una melena rizada icónica, su maquillaje ha sido otro de los reflejos inconfundibles de su personalidad: cercano, luminoso y sin excesos.

Dentro de la naturalidad, ha sabido potenciar los puntos fuertes de su rostro, siendo una gran inspiración para las que quienes desean verse arregladas sin parecer artificiales.

Para las que quieran recrearlo, y no sepan cómo sacarse el máximo partido, hemos hablado con una maquilladora, quien nos ha dejado todos los trucos clave para priorizar la frescura y la elegancia.

La piel: el centro de todo

Lo que más llama la atención del look de Emma García es su piel. Siempre luce luminosa, tersa y sin un ápice de pesadez, algo difícil de conseguir si no se aplican los productos y las técnicas adecuadas. “La preparación de la piel es fundamental y se cuida al detalle”, afirma la maquilladora Sara Saiz.

El secreto está en una base de maquillaje que unifica sin cubrir en exceso, probablemente con acabado satinado o glow, que aporta frescura sin llegar al brillo.

Pero no solo es importante escoger un producto adecuado, sino que hay algunos pasos previos que podemos realizar, y que marcan un antes y un después en el resultado según la experta:

• Limpieza profunda y tónico suave, para equilibrar la piel.
• Hidratación intensiva con texturas ligeras (sérum con ácido hialurónico o cremas glow). que aporten ese aspecto jugoso sin dejarla grasa.
• A veces se incluye una prebase iluminadora o con efecto blur para alisar la textura y reflejar bien la luz del plató.
• El uso de rodillos o masajeadores faciales ayuda a desinflamar y activar la microcirculación antes del maquillaje(sobre todo en pieles ya algo maduras).

Además, su rutina parece incluir toques estratégicos de iluminador en puntos altos del rostro: pómulos, tabique nasal y arco de Cupido. Así se consigue ese aspecto radiante y vital, que transmite un acabado saludable. “Siempre se elige un iluminador sutil, con partículas finas, para que se vea natural en cámara. A veces se mezcla con la base o se aplica en capas muy finas, integrándolo con una esponja para que parezca parte de la piel”, añade.

Los ojos: expresivos, pero nunca sobrecargados

Otro de los puntos focales del maquillaje de la presentadora son sus ojos, los cuales maquilla con gran inteligencia. Nunca opta por delineados excesivos ni sombras demasiado dramáticas; en cambio, recurre a tonos neutros, marrones cálidos o rosados empolvados que intensifican la mirada sin endurecerla. 

“Algunas de las claves que utiliza Emma García en su maquillaje, y que ayudan a potenciar la mirada, es realizar un delineado difuminado con sombra marrón o gris topo en vez de negro puro, para no endurecer la expresión. Las pestañas suelen estar muy trabajadas y las cejas definidas pero naturales, peinadas hacia arriba para elevar visualmente el ojo”, comenta la maquilladora.

En cuanto a las sombras, parece que hay algunos colores que son habituales en su neceser de maquillaje. “Tonos tierra, cobrizos, melocotón y topo para un efecto suave pero luminoso; champán y dorados suaves en el lagrimal o párpado móvil para agrandar e iluminar; y tonos ligeramente satinados que capten la luz, evitando los excesivamente brillantes o metálicos”, añade. El efecto es limpio y femenino, ideal para cualquier hora del día.

El poder del colorete

Otro detalle que siempre hay que tener en cuenta en nuestro makeup, es el uso del colorete. Este puede quedar o muy bien, o ser un completo desastre si no se aplica de forma correcta.

En el caso de la presentadora, ya tiene cogido el punto perfecto, apostando por tonos rosados o melocotón que consiguen ese efecto de ese rubor natural que revitaliza el rostro al instante.

No lo utiliza solo en las mejillas, sino que a menudo lo extiende ligeramente hacia las sienes, integrándolo con el iluminador para un efecto lifting sutil pero eficaz.

Esta técnica, lejos de ser nueva, es una de las claves del maquillaje más actual: no solo embellece, sino que rejuvenece. “Lo suele aplicar en la parte alta de las mejillas, no demasiado cerca de la nariz, para elevar el rostro. Predominan los acabados satén o crema para mantener la jugosidad del maquillaje”, declara Sara.

Errores que debes evitar si quieres replicar su estilo

Aunque no hay demasiados artificios en su look, es cierto que requiere precisión. Hay algunos consejos que la maquilladora nos ha dejado, para que no caigamos en errores que consigan un acabado apagado y que nos sume años, en lugar de tener un efecto rejuvenecedor.

1. Abusar del polvo matificante: mata el glow natural que caracteriza su look.
2. Contornos demasiado marcados: su estilo huye del contouring agresivo.
3. Sombras oscuras o muy frías: pueden endurecer la mirada y apagar el rostro.
4. Labios muy oscuros o mates: Emma suele llevar tonos naturales, nude rosados o melocotón con acabados cremosos o jugosos

“Para recrear un look tipo Emma García, pero en la vida real no en televisión, recomiendo enfocarte en una piel bien preparada, usar productos en crema, jugar con tonos suaves y definir los ojos con suavidad. El objetivo no es parecer maquillada, sino reflejar vitalidad y elegancia con naturalidad que creo que es la base del maquillaje de Emma”, finaliza la experta.

El resultado es un maquillaje que tiene una intención, un propósito. No se trata de seguir tendencias efímeras que estén de moda en ese momento, sino de conocer qué es lo que funciona en el propio rostro y potenciarlo con elegancia. Porque más allá de productos o técnicas, Emma García nos recuerda que el buen maquillaje no transforma, sino que potencia.