Piernas sin varices

No solo aparecen en las piernas, pero sí es esta zona donde son más visibles, frecuentes y antiestéticas. Unas piernas sin varices es el sueño de muchas personas que las padecen. En primer lugar, ¿qué son? Las varices son dilataciones venosas que se caracterizan por la incapacidad de establecer un retorno eficaz de la sangre al corazón; de ahí que aparezcan en los miembros inferiores con mayor asiduidad.

Las conocidas como arañas vasculares son a veces casi imperceptibles, pero otras están engrosadas y resultan dolorosas. Tener unas piernas sin varices muchas veces depende del componente genético. Pero también está íntimamente ligada a la falta de actividad física y a determinados trabajos. Aquellos que nos obligan a permanecer mucho tiempo de pie o mucho tiempo sentados no ayudan.

La prevención es imprescindible para evitar que se presenten y conseguir unas piernas sin varices. ¿Cómo? Imprescindible caminar a diario, el movimiento de las piernas favorece la circulación de retorno. Tampoco debes ducharse con agua más allá de 37 grados. Termina además el ritual bajo la ducha con un buen chorro de agua fresca desde la rodilla hasta el tobillo. El contraste frío-calor favorece la circulación de retorno.

Al acostarte, eleva un poco las piernas por encima de la cabeza. Utiliza siempre que sea posible, medias o pantis de compresión que activen la circulación. También son ideales, deportes como el yoga, la bicicleta o la natación. Las cremas de efecto frío, pueden ayudar a paliar la pesadez y mejorar la microcirculación. Están prohibidos los focos de calor directo (calefactores, braseros, cera caliente,…); los tacones de más de 5 centímetros y los pantalones excesivamente ajustados.

¿Y en cabina, existe algún tratamiento preventivo? Sí, todos aquellos masajes que estimulen el drenaje linfático y circulatorio son perfectos como prevención. Hay protocolos especiales como Infinity Legs, que combina tres tecnologías en un solo cabezal. Se trata de radiofrecuencia, vacunterapia y magnetoterapia. Estimulan los puntos de drenaje con el fin de mejorar la circulación y favorecer la eliminación de líquidos retenidos y toxinas. Al mismo tiempo incrementan la producción de colágeno y elastina, engrosando los tejidos y combatiendo las pequeñas arañas vasculares.

Si a pesar de las precauciones, la varices hacen su aparición, lo fundamental es un buen diagnóstico médico. Te ayudará a distinguir el tipo de variz que es y cuál es el mejor medio de suprimirla. El láser puede sustituir el bisturí en muchas ocasiones, pero debe ser el especialista el que incline la balanza por una u otra opción.