Al igual que el cabello en la cabeza, las cejas pueden perder pigmentación con la edad, lo que a menudo resulta en la aparición de cejas más grises o canosas. También es común que las cejas se vuelvan menos densas y al notarse una importante disminución en el número de pelos en las cejas, puede hacer que parezcan más delgadas. No solo se pierde el grosor, también la forma. Esto puede deberse a la pérdida de elasticidad de la piel o al debilitamiento de los músculos que sostienen las cejas en su lugar. Como consecuencia, hace que las cejas se desplacen ligeramente hacia abajo.

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Para abordar estos cambios relacionados con el envejecimiento en las cejas, algunas personas optan por técnicas de maquillaje, como rellenar las cejas con un lápiz o sombra de cejas, o teñirlas para devolverles el color. Otras opciones incluyen procedimientos cosméticos como el 'microblading' que lleva Rosa Benito (un tipo de tatuaje semipermanente en las cejas). También está la opción de una técnica conocida como 'micropigentación' a la que ha caído rendida la madre de la Reina Letizia, Paloma Rocasolano, con el fin de restaurar la forma y la posición.

Letizia, Sofía y Paloma Rocasolano, en la Confirmación de la Infanta Sofí
Letizia, Sofía y Paloma Rocasolano, en la Confirmación de la Infanta Sofía. (Gtres)

La micropigmentación y el microblading son dos técnicas diferentes utilizadas para mejorar la apariencia de las cejas, pero tienen diferencias significativas en cuanto a cómo se realizan y los resultados que ofrecen. La diferencias está no solo es el procedimiento, sino también de los instrumentos utilizados, la duración de los procesos estéticos, y los costos. Por ejemplo, en el microblading, el dibujo se hace pelo a pelo a partir de pequeños cortes sobre los que se deposita el pigmento. En cambio,  la micropigmentación llega a resultados mucho más simétricos y parecidos a los de un tatuaje convencional.

¿En qué consiste la 'micropigmentación' de cejas que se ha hecho Paloma Rocasolano?

De un tiempo a esta parte nos hemos dado cuenta que el rostro de la madre de Doña Letizia ha cambiado, se ve más estilizado. Y mientras algunas teorías cuentan sobre sobre si se ha sometido a alguna cirugía o a algún tratamiento estético con bótox para verse más rejuvenecida , nosotras hemos caído en la cuenta de que lo que sí ha cambiado por completo son sus cejas. Paloma Rocasolano se ha apuntado a la tendencia que consigue que sus cejas se ven más bonitas, pobladas y definidas. Asimismo,  ampliar su mirada y tapa por completo las pequeñas calvas o la pérdida de espesor que pueda tener.

Paloma Rocasolano en los Premios Princesa de Asturias 2023
Al igual que otras partes del cuerpo, las cejas experimentan cambios a medida que envejecemos. (Gtres)

La micropigmentación, también conocida como maquillaje permanente, implica la aplicación de pigmento en la piel mediante una máquina especializada que deposita el color en capas superficiales de la dermis. Esta técnica se utiliza para crear una sombra o rellenar áreas con falta de cabello en las cejas, labios o párpados. Está recomendando para personas que desean una apariencia más uniforme o para quienes tienen poco vello en la zona, y es semipermanente y puede durar de 1 a 3 años, dependiendo de diversos factores como el tipo de piel, los cuidados posteriores y el color utilizado. Por lo tanto, si el resultado no te gusta siempre hay 'marcha atrás'.

La micropigmentación se realiza con una máquina y suele ser menos dolorosa que el microblading porque no implica incisiones en la piel. La recuperación es más rápida, y la zona tratada puede experimentar algo de hinchazón y enrojecimiento, que se desvanece en unos días.

El precio de una micropigmentación de cejas oscilará dependiendo del lugar que escojamos para realizarla, pero por lo general se encuentra entre los 300 y los 500 euros.

Así eran las cejas de Paloma antes de la 'micropigmentación' de cejas

Si echamos la vista atrás podemos ver cómo han cambiado las cejas de Paloma en los últimos años. Ha pasado de finas y depiladas a gruesas y naturales, aunque siempre las ha llevado perfectamente arregladas. En el año 2003 lucía unas cejas muy finas, aunque ya presentaban la forma arqueada, tendencia de los años 20’s cuando las cejas se solían llevan delgadísimas, y con una curva muy más pronunciada para aumentar la expresión y el dramatismo en la mirada

Paloma Rocasolano y sus cejas en el año 2003
Así se veían las cejas de Paloma Rocasolano en el año 2003. (Gtres)

Antes, Paloma mostraba el color de la ceja más oscuro. Después, sobre el año 2014, ya presumía de unas cejas más gruesas, bien definidas en su forma curva y más claritas lo que le permitía lucir una mirada más amplia y rejuvenecida. En esta tapada la forma de su ceja hacia una media circunferencia que sigue la línea de los párpados y no se arquean hacia arriba.

Paloma Rocasolano cejas 2014
En el año 2014, su forma de ceja fue cambiando poco a poco hacia una forma más grasa, pero curva. (Gtres)

Ahora, gracias a la micropigmentación de cejas, no solo ha conseguido que la ceja se vea más tupida y simétrica, también ha cambiado la forma por completo. Ahora luce una cejas angulares que son las denominas perfectas o de revista y qu, todas deseamos. Su forma es fácil de ditinguir, pues tiene un ángulo muy marcado y ascendente, desde su nacimiento hasta el punto más alto del ángulo y desde allí descienden radicalmente hasta la punta exterior de la ceja. Es un diseño que crea un perfil más juvenil. Además, consiguen alargar el rostro y resaltar las facciones.

Paloma Rocasolano Premios Princesa de Asturias 2024
El microblading ayuda a construir una ceja poco poblada, así lucen ahora las cejas de Paloma Rocasolano.

Aunque hayamos hablado de “la ceja perfecta”, es importante tener en cuenta la forma del rostro de cada persona en particular.