Alba Díaz ha dado un drástico giro de 180 grados a su vida. A sus 25 años, ha pasado de vivir rodeada de comodidades en pleno Barrio de Salamanca de Madrid, para mudarse a Parla junto a su chico, Marcos Terrores. En esta localidad de la periferia parece haber encontrado todo aquello de lo que carecía en el corazón de Madrid, como por ejemplo, mayor facilidad para disfrutar de momentos familiares. A estos se suma el cachorro de la pareja, un Golden Retriever que parece haberse adaptado a las mil maravillas a su nuevo hogar.
Los 'pequeños placeres' de los que Alba Díaz puede disfrutar en esta localidad madrileña, pero no en el centro
Cabe destacar que, el hecho de permanecer en Parla y no en Madrid capital, hace que Alba Díaz pueda disfrutar de una mayor privacidad. De hecho, ahora hace movimientos que quizá hace unos meses eran impensables para ella, como por ejemplo, el simple hecho de acudir a un bazar a comprar. Además, el Barrio de Salamanca de Madrid no dispone de este tipo de establecimientos con tanta facilidad como su anterior localidad, y la hija de Vicky Martín Berrocal parece estar encantada con el cambio.
Aunque es cierto que tampoco ha hecho un ‘house tour’ en el que sus seguidores hayan podido ver con detalle su nuevo hogar, a través de vídeos y publicaciones en Instagram sí que ha presumido de su nidito de amor. Sobre todo, en clips que posteriormente ha subido a TikTok, donde deja constancia de cuál es su rincón favorito para grabarse frente a su teléfono móvil. Este no es otro que el salón, con predominio de los tonos en color crema y tres sofás a tono con textura suave y similar al ante. Al fondo de esta habitación, la joven cuenta con un amplio armario de tres puertas, ideal para depositar todas las prendas de ropa con las que cuenta, y tenerlas a su alcance cuando lo desee.
Otra de las habitaciones que ha dejado ver en sus redes sociales es el dormitorio principal, que comparte con su chico. Este cuenta con las mismas tonalidades que el salón, además de armario, una silla tipo banqueta en color negro y algunos complementos como bufandas. Si algo está claro, es que la pareja ha conseguido hacer de esta casa su nidito de amor, y Alba se muestra totalmente feliz ante el cambio de vida que ha experimentado.
Este hogar nada tiene que ver con el de la hija de ‘El Cordobés’ antes de mudarse. Tras haber vivido en París durante unos cuantos años, Alba se marchó de la Ciudad de la Luz y se decantó por Madrid, hasta donde viajó para instalarse junto a su tía Rocío. Desde ese momento, ambas compartieron un piso de lo más coqueto y moderno, con el color gris como principal protagonista.
La hija de Vicky Martín Berrocal decía adiós al hogar que compartió con su tía Rocío
Así lo ha demostrado en los últimos años la hija de Vicky Martín Berrocal. En multitud de sus publicaciones de Instagram, Alba enseñaba un sofá chaise longue en color gris oscuro que combinaba a la perfección con el mismo color, pero en una tonalidad más clara, de las paredes de la estancia. Además, se hizo con dos estanterías de este último tono y de pladur, ambas repletas de libros, fotografías y esculturas. En la zona del sofá, y para mayor comodidad de las inquilinas, el suelo estaba cubierto por una alfombra de pelos, también en el mismo color.
En cuanto a la cocina, también se trataba de una estancia con elegancia por doquier. Tía y sobrina decidieron salir de su zona de confort al romper moldes con muebles negros y madera en tonos oscuros. Aunque para dar más luminosidad, ambas se decantaron por los electrodomésticos en color plata.
A diferencia de la oscuridad de esta zona, los dormitorios sí que contaban con tonalidades mucho más claras. Por ejemplo, la habitación de Alba estaba protagonizada por el color blanco en su versión más pura. Este estaba presente tanto en paredes, como en cuadros o incluso en la ropa de cama. Aunque para romper con esta dinámica, la joven apostó por mesitas de noche y lámparas en dorado.
Como no podía ser de otra manera, la hija de Vicky Martín Berrocal también se hizo con un vestidor en esta vivienda, con el objetivo de acceder a su ropa y accesorios con mayor facilidad. Este era completamente abierto y repleto de baldas ancladas a la pared, además de percheros y estanterías apoyados en el suelo. La habitación contaba con suelo de madera, pared en gris topo y elementos blancos. Una combinación muy original, aunque habrá que esperar para ver si Alba sigue con esta tónica en su nuevo hogar.