El anuncio de que Dulce Delapiedra, la que fuera niñera de Isabel Pantoja, iba a pisar el plató de ‘Sábado Deluxe’ para descubrir a Alejandro Albalá, ex de su “niña”, puso en jaque no solo al cántabro, sino también a su ex suegra. Las posibilidades de que la nanny hablara sobre la tonadillera eran casi inevitables, por lo que esta intentó que la entrevista no se produjera.
Según informa el portal digital LOOK, Isabel no dudó en llevar a cabo una complicada maniobra con el objeto de callar a Dulce que consistió en poner el asunto en manos de la Policía y enviar a las autoridades a Mediaset para que entregaran una notificación al programa. A pesar de los esfuerzos de la artista, no se pudo entregar el documento y quien fuese su amiga íntima terminó hablando de Alejandro y también de su relación.
Sin embargo, las palabras de la asistenta no fueron para hacer daño a Pantoja, ni mucho menos. “He querido muchísimo a Isabel Pantoja. Jamás habría pensado, aunque naciera 10 veces, que me iba a encontrar en esta tesitura. Me decía que quería envejecer conmigo, que yo era sus pies y sus manos”, reconoció en cierto momento de la noche.
Tan solo las preguntas de los de ‘Sálvame’ hicieron que Dulce Delapiedra contara detalles hasta el momento desconocidos de cómo era su vida con la cantante o de cuál era su sueldo por una dedicación 24/7. “Yo estaba allí entregada las 24 horas. Me dio de alta en la seguridad social. Yo llevo cotizados 26 años”, confesaba, “salgo de la vida de Isabel Pantoja cuando me partí la espalda. Me dieron la baja. Yo no paraba, era una máquina y me pagaban 500 euros al mes”.
Toda su verdad
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El pasado sábado Dulce Delapiedra pisaba el plató de 'Sálvame Deluxe' con un claro objetivo, contar toda su verdad sobre Alejandro Albalá. Una entrevista que Isabel Pantoja intentó detener conscietne que ella también se convertiría en tema.
El plan de Pantoja
Según informa el portal digital LOOk, la cantante intentó detener la entrevista poniendo el asunto en manos de la Policía, que envió a las autoridades a Mediaset para que entregaran una notificación al programa.
Esfuerzo en vano
A pesar de los esfuerzos de Isabel Pantoja, no se pudo entregar el documento y quien fuese su amiga íntima terminó hablando de Alejandro y también de su relación.
La sorprendente confesión
“He querido muchísimo a Isabel Pantoja. Jamás habría pensado, aunque naciera 10 veces, que me iba a encontrar en esta tesitura. Me decía que quería envejecer conmigo, que yo era sus pies y sus manos”, contó Dulce.
El salario
"Yo estaba allí entregada las 24 horas. Me dio de alta en la seguridad social. Yo llevo cotizados 26 años”, confesaba, “salgo de la vida de Isabel Pantoja cuando me partí la espalda. Me dieron la baja. Yo no paraba, era una máquina y me pagaban 500 euros al mes".
El objetivo: Alejandro
Con respecto a Alejandro, Dulce no tuvo reparo en tachar al joven de vago y de obsesivo con la hija de Isabel Pantoja.
Una vida dedicada a Isabel
Con respecto a su propia vida, Dulce reconoció que le hubiera gustado formar una familia. "Mi deseo era casarme y tener la parejita. Mi dedicación a Isabel no me ha permitido tener vida propia”.