Candela Peña es una de las actrices más reconocidas y de mayor éxito en nuestro país. Sin embargo, ni la fama ni los tres Goya que tiene en su haber han evitado que haya tenido que pedir trabajo al grito de "de premios no se come". La catalana estrena el próximo 26 de abril 'El caso Asunta' en la plataforma Netflix, una serie sobre el trágico asesinato de la pequeña Asunta Basterra Porto, de apenas 12 años, a manos de sus padres adoptivos.
No ha sido fácil llegar hasta aquí, que la vuelvan a dar la oportunidad de protagonizar una producción, como ella misma ha confesado en el 'podcast' 'LaScript'. Echando mano de su característico sentido del humor, la siempre recordada Nina en 'Todo sobre mi madre', de Pedro Almódovar, ha compartido un poderoso alegato sobre la precariedad en el mundo de la interpretación, con vivencia precaria incluida.
El olvido al que ha sumido la industria del cine y la televisión a Candela Peña
Desde hace dos años no veíamos en la pequeña pantalla a Candela Peña y desde hace cuatro en los cines. La última vez que la actriz se puso al frente de un proyecto televisivo fue en 2022 con 'Buen Trabajo', un programa de Movistar+ en el que Peña se acercaba a la realidad de diferentes profesiones. En el caso de las grandes producciones, la última que protagonizó fue 'Black Beach', en 2020. Desde entonces, a la catalana le ha resultado tarea complicadísima recibir una oferta de trabajo que le permita pagar las cuentas.
Hasta ahora. La catalana de 48 años está a punto de estrenar la serie de Netflix, de seis capítulos, que 'versiona' con licencias el asesinato de la niña Asunta que consternó a toda España en 2013. Candela Peña se mete en el papel de Rosario Porto, la madre adoptiva de la pequeña, de origen chino, en esta producción en la que comparte reparto con el actor Tristán Ulloa, que hace del padre de Asunta, Alfonso Basterra. "Me han insultado muchísimo. Ya no solo por el personaje que estás interpretando, sino por ser una actriz que va a sacar dinero de algo terrible. Nos han dicho unas cosas horribles", se ha sincerado Candela Peña sobre esta nueva aventura profesional en el podcast 'LaScript'.
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Candela Peña en una foto de archivo. GTRES.
La gran encrucijada de la actriz de 'Todo sobre mi madre' en su nuevo proyecto
No ha sido tarea fácil ponerse en la piel de un personaje tan siniestro, pero, como reconoce Candela Peña, de premios no se vive ni se llena la nevera Una auténtica encrucijada entre ser fiel a su vocación actoral o ceder a las connotaciones tan atroces que arrastra su personaje en la vida real y las críticas que recibió por aceptar el papel. "Lo básico es no juzgar a un personaje. Durante los seis episodios, me he mantenido en la verdad de Rosario", se ha defendido.
Sea como fuere, la catalana no ha desaprovechado la ocasión para hablar sobre la precaria situación en la que se ven inmersos la mayoría de actores y ella, en particular cuando se cumplen una determinada edad. Hasta que recibió la llamada de Netflix, el camino no ha sido ni de rosas ni sencillo hasta lograr el papel que la ha devuelto a la actualidad y la ha situado en el centro de una serie después de años en el más ingrato olvido.
"Yo soy positiva y la alegría de vivir, pero yo he pasado fatigas"
Como la propia Candela Peña ha relatado en el citado 'podcast', a pesar de la extensa trayectoria que la avala en la industria del cine y la televisión, tuvo que afrontar un proceso de 'casting' como cualquier actor. "Cuando tú tienes millones de seguidores o lo has partido con una serie que hiciste en el año 2018 y sigues viviendo de esa renta y te dan un papel, cúrratelo. Porque hay otra gente que con esta edad, con sus Goyitas aquí y allá que nos dicen 'Tú haz la prueba para Rosario Porto y que Netflix diga que sí'", ha comenzado diciendo la actriz en un aplaudido alegato que ha corrido como la pólvora en redes sociales.
A la catalana no se le han caído los anillos a la hora de reconocer que hubo un tiempo en el que tuvo que pedirle dinero a una amiga para pagar algo tan básico como la factura de la luz. "Yo soy positiva y la alegría de vivir… Pero antes que esto, había pasado fatigas. Esto es como la playa de la Concha, hay días que la marea está baja y otros que la marea está alta. Yo no puedo estar en la cresta de la ola de un ‘va a ir todo de maravilla’ porque yo he visto en mí que eso no es así. Porque a mí me cortaron la luz y esa chica de ahí, mi amiga Sonia, me tuvo que hacer un Bizum porque no tenía para pagar la luz. Y me di cuenta que todo va con luz. No puedo hacer un té, usar el microondas… Que todo va con luz", ha sentenciado Candela Peña sin perder su humor tan particular, pero con toda la rotundidad del caso.