Antonio Banderas no gana para disgustos este año. Si el susto que sufrió a principios de 2017 cuando sufrió un infarto parecía de una mala suerte insuperable, una serie de desdichas que han quedado atrás con la irreemplazable pérdida de su madre, Ana, han convertido el presente en el ‘annus horribilis’ de uno de los actores más emblemáticos de nuestro país.
El infarto, según contó Antonio, estuvo causado por un cuadro de estrés provocado por su adicción al trabajo y le hizo pasar por el quirófano para una intervención que como contó el hermano del actor, habrá de repetirse en los próximos meses. Poco después de su achaque, Banderas tuvo que despedir a Celia Trujillo, una gran amiga que, además, había sido su primer amor. Una vez más el intérprete dio muestra de su cercanía, sencillez y sensibilidad y no dudó en despedirse de ella públicamente.
Si un infarto y una pérdida importante no eran suficientes, el andaluz tuvo que ver también como uno de sus proyectos profesionales más personales quedaba en nada por presiones políticas y debido a la opinión pública: Junto a otros socios, Banderas ganó un concurso para restaurar dos edificios de su Málaga natal y convertirlos en espacios multidisciplinares entre los que se encontraba un teatro que sería gestionado por sí mismo. Si bien todo apuntaba a que sería un éxito mayúsculo, dos partidos políticos acusaron al concurso de haber hecho las bases a la medida del actor. Ante esta acusación, Banderas decidió abandonar el proyecto y es que sintió que le habían tratado de una forma muy injusta.
Este mismo sábado Antonio Banderas perdía a su madre, acusada de Alzheimer desde hace años, en lo que se ha confirmado como uno de los peores años para el ‘Zorro’ que, por lo menos, puede hablar con orgullo del incondicional apoyo que ha recibido en todo momento por parte de su hija y de su pareja, las dos mujeres de su vida.
Despedida de su madre
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Antonio Banderas no gana para disgustos este año. Si el susto que sufrió a principios de 2017 cuando sufrió un infarto parecía de una mala suerte insuperable, una serie de desdichas que han quedado atrás con la irremplazable pérdida de su madre, Ana, han convertido el presente en el ‘annus horribilis’ de uno de los actores más emblemáticos de nuestro país.
La pérdida de una buena amiga
Poco después de su achaque, Banderas tuvo que despedir a Celia Trujillo, una gran amiga que, además, había sido su primer amor. Una vez más el intérprete dio muestra de su cercanía, sencillez y sensibilidad y no dudó en despedirse de ella públicamente.
Así lo anunció
Antonio Banderas no gana para disgustos este año. Si el susto que sufrió a principios de 2017 cuando sufrió un infarto parecía de una mala suerte insuperable, una serie de desdichas que han quedado atrás con la irremplazable pérdida de su madre, Ana, han convertido el presente en el ‘annus horribilis’ de uno de los actores más emblemáticos de nuestro país.
Apoyado por su hija
Este mismo sábado Antonio Banderas perdía a su madre, acusada de Alzheimer desde hace años, en lo que se ha confirmado como uno de los peores años para el ‘Zorro’ que, por lo menos, puede hablar con orgullo del incondicional apoyo que ha recibido en todo momento por parte de su hija y de su pareja, las dos mujeres de su vida.