Kate Middleton ya sabe que no va a volver al piso de Chelsea que compartía con su hermana. La duquesa de Cambridge ha decidido ponerlo en venta, dejando atrás su vida en ‘Old Church Street’ por la cuantía de 2,17 millones de euros. Secretos, confidencias y lazos familiares quedarán en el olvido entre las paredes de su piso, que espera nuevo inquilino o inquilina. ¿Tendrá algo la casa que te convierta en miembro de la Familia Real Británica?

Ya vivía como una reina

Kate Middleton

Antes de convertirse en esposa de Guillermo de Inglaterra,  Kate Middleton ya vivía como una reina. La casa que compartía con su hermana Pippa la compraron los padres en 2002 por 870.000 euros. Ahora, 16 años después, la casa sale al mercado por más del doble. Nada más y nada menos que por 2,17 millones.

Un sitio privilegiado

Kate Middleton

La casa está situada en una de las mejores calles de Londres, que goza de elegancia y tranquilidad en medio de la ruidosa ciudad. La antigua residencia de la duquesa se distribuye en tres plantas con tres luminosas habitaciones, decoradas con un estilo tradicional, alfombras con patrón oriental y muebles de madera tratada.Leer más: Kate llega a Chipre y su look es comparado con el de su cuñada Meghan

Una cosa luminosa

Kate Middleton

Knight Frank, la firma encargada de la venta, afirma que el piso cuenta con mucha luz, ya que la parte frontal de la casa está orientada de este a oeste.

Familia unida y adinerada

Kate Middleton

La familia de Kate Middleton siempre ha estado muy unida. Su gran relación con su hermana no supuso un problema para vivir con ella. Los padres, adinerados, decidieron comprarles el piso durante la juventud de ambas. 

Hermanas y amigas

Kate Middleton

Los jóvenes que se independizan suelen querer irse a vivir con los amigos. Pero no fue el caso de ellas dos. La estrecha amistad que hay entre ambas las unió hasta para independizarse, compartiendo así el momento de solteras que les brindaba la vida. Ahora, después de llevar tiempo la casa vacía, los padres han decidido deshacerse de ella. Sus hijas, ambas casadas, ahora disfrutan de nuevas vidas en casas incluso más grandes. ¿Quién será el próximo habitante de ‘Old Church Street’