Charlène de Mónaco, en chándal o pijama, del brazo del príncipe Alberto en Florencia

Charlène de Mónaco ha reaparecido nada menos que en Florencia y del brazo de su esposo, el príncipe Alberto de Mónaco. Aparte del gesto cariñoso (que una vez más vuelve a apaciguar los rumores de la supuesta eterna crisis del matrimonio), la princesa lucía un aspecto estupendo y un look que ha sido bastante comentado. A juzgar por las imágenes, ¿qué lleva puesto? ¿Es un chándal, un pijama? ¿Ninguno de los dos? Charlène es conocida por su estilo vanguardista, pero en esta ocasión ha dejado boquiabiertos a más de uno con un conjunto del que no se sabe muy bien qué pensar...

La pareja ha viajado hasta la Cuna del Renacimiento para celebrar el 160 aniversario de la fundación del Consulado del Principado de Mónaco. Además disfrutaron de los encantos de la ciudad toscana, porque otra cosa hubiera sido un pecado. En su paseo turístico, rodeados de una enorme expectación, Alberto y Charlène recalaron en el Palazzo Gondi, una joya arquitectónica situada al lado del Palazzo Vecchio. También pasaron por la Fundación Franco Zeffirelli, ubicada en otro espectacular palacio renacentista, dedicado al insigne cineasta y director de ópera, donde les esperaba el cantante Andrea Bocelli y el cónsul honorario de Mónaco en Florencia, Alessandro Giusti.Los príncipes continuaron ruta por la Piazza San Firenze y mantuvieron un encuentro con el diseñador Marco Colasanti. Este les hizo entrega de un regalo muy especial, una pluma de edición limitada llamada I Colori dell'Oceano (Los colores del Océano).

El matrimonio se mostró feliz con esta escapada llena de arte y cultura, justamente después de los relajados días que acababan de pasar durante la Semana Santa con sus dos hijos, los mellizos Jacques y Gabriella, en la isla francesa de Córcega.

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Charlène de Mónaco luce nueva imagen. Adiós al pelo ultracorto y platino; hola a un peinado algo más largo con base ceniza y mechitas rubias. Pero no nos desviemos del tema. Su estilismo para recorrer Florencia ha dado mucho de qué hablar. Un conjunto gris claro de chaqueta y pantalón muy casual, de inspiración deportiva y chandalera. Un diseño de líneas cómodas y relajadas, que también sugieren los cortes de los pijamas. A sus pies, unos salones de tacón en tono nude. Lo que la cantante Martirio bautizó en su día como "arreglá pero informal".

Hace un par de años la princesa atravesó un auténtico calvario a causa de sus problemas de salud (que le pillaron en Sudáfrica en plena pandemia). A su regreso al Principado tuvo que ser ingresada en una clínica de Suiza para recuperarse por completo. Ahora Charlène de Mónaco ha retomado sus deberes oficiales con normalidad y de la mano de su marido, quien de vez en cuando desmiente que su relación esté rota. Charlène de Mónaco este año ha declarado en una entrevista: "Mi familia es mi roca". Con eso lo dice todo.