Rocío Carrasco (46) ha vuelto a la escena pública. Apenas unas semanas después de la final de 'Bake Off', donde la vimos en la pequeña pantalla por última vez, la hija de Rocío Jurado ha concedido una entrevista. En ella se sincera sobre algunos de los momentos que más han marcado su vida.
La madrileña ha respondido a numerosas cuestiones sobre su trayectoria personal. En un encuentro con Pilar Vidal en su podcast 'Drama Queen' de ABC, la periodista le ha preguntado de qué cosas se arrepiente. Sin duda alguna, los tiros iban por los aspectos íntimos de su biografía. Esta ha contestado: "¿Yo, arrepentirme? No". Se trata de una interrogante que mucho tiene que ver con su doloroso pasado junto a Antonio David Flores. De su exmarido y padre de sus dos hijos ha dicho en reiteradas ocasiones que ha sido la principal fuente de sufrimiento de su existencia.
![Rocío Carrasco lanza una bomba contra Antonio David Flores en su regreso a televisión](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 800 450"%3E%3C/svg%3E)
Rocío Carrasco en Lazos de sangre. Foto: RTVE
"¿Cambiarías algunas cosas?", insistía la periodista. Entonces, Rocío Carrasco resoplaba de manera prolongada antes de soltar sus conclusiones. "Que si cambiaría...", decía, en tono reflexivo. Finalmente se ha rendido a la evidencia: si tuviera que echar atrás hay cosas que no haría de nuevo, "pero yo como todo el mundo".
"A cualquier ser humano le preguntas si cambiaría algo y por lo menos te diría cinco o seis cosas", confiesa Rocío Carrasco
La hija de Rocío Jurado ha detallado: "A cualquier ser humano le preguntas si cambiaría algo y por lo menos te diría cinco o seis cosas". Quien sepa leer entre líneas sabe que lo que hay tras sus declaraciones es lo que piensa sobre su extinta relación sentimental con el malagueño, con el que lleva décadas enfrentada en los tribunales.
Con un discurso bastante ambiguo, Rocío Carrasco profundizaba un poco más en el tipo de cosas de las que podría haber deseado retractarse. "A ver, cuando digo que no me arrepiento de nada es que no tengo de qué arrepentirme de cosas en cuanto en tanto a que yo haya ocasionado mal a alguien, que es lo más importante de lo que te puedes arrepentirme", continuaba diciendo.
"De cosas que yo a otras personas haya podido ocasionar", matizaba. Sus comentarios han recordado, inevitablemente, al conflicto familiar que la distancia de sus hijos, Rocío Flores y David, a los que no ve desde hace años.
Rocío Flores y los duros reproches a su madre: "Me ha destrozado la vida"
Las palabras de Rocío Carrasco contrastan radicalmente con el testimonio de su hija, quien ha confesado públicamente haberse sentido víctima de su progenitora. "Mi madre me ha destrozado la vida", dijo en junio de 2023, rota en llanto. La joven considera que su madre le ha hecho "mucho daño" con acciones como haberla "señalado públicamente en un documental".
"Estoy viviendo un infierno todos los días de mi vida. No entiendo muchas cosas y nunca las entenderé. Lo único que quiero es que se haga justicia y que esto se acabe. Quiero que salga a la luz la realidad", espetaba hace un año la hija mayor de Rocío Carrasco. "Vivo en un infierno todos los días de mi vida".
Rocío Flores ha hablado muchas veces de la situación que atraviesa desde que saliera a la luz el documental de su madre en Telecinco. Nunca ha ocultado que le gustaría "que se haga justicia".
Volviendo a la entrevista de Rocío Carrasco... Qué duda cabe que ha tenido una vida llena de experiencias. Algunas dramáticas y otras felices, como su relación con su actual marido, Fidel Albiac. Si echa la mirada a su pasado, sí encuentra de qué arrepentirse: "¿De decisiones tomadas en mi vida? Me arrepiento de mil y una".
Rocío Carrasco y Antonio David Flores
La separación de de Rocío Carrasco y Antonio David, una guerra sin tregua
Rocío Carrasco y Antonio David Flores se casaron el 31 de marzo de 1996. Se dieron el 'Sí, quiero' en la ermita Las Vírgenes, en la finca Yerbabuena, donde un año antes contraído matrimonio su madre, Rocío Jurado, y el torero José Ortega Cano. Ella llegó a la iglesia de la mano de su padre, Pedro Carrasco, en una calesa del siglo XVII. Apenas siete meses después nació su hija Rocío. Después, en 1998, nació su hijo David.
La pareja poco tardó en romperse. Fue en el verano de 1999 cuando se produjo la separación. Se divorciaron en enero de 2001. Con la ruptura llegó una batalla judicial que se ha prolongado durante más de dos décadas. En el complejo y extenso proceso la expareja se ha tirado los trastos a la cabeza dentro y fuera de los juzgados.
Se han reprochado de todo y se han reclamado de todo también: desde el dinero de la manutención de los jóvenes (Antonio David la acusó de un delito de abandono de familia por impago de pensión a su hijo David), presunto alzamiento de bienes, y hasta supuestos malos tratos del excolaborador a Rocío Carrasco. Una denuncia que se archivó después de que el juez determinada que no existían pruebas que avalen su historia.