Kiko y Shara: "Nuestros hijos ya apuntan maneras en la música"

Kiko y Shara han vivido muchas vidas antes de cumplir los 40. Comenzaron en la música siendo adolescentes, primero él a los 14 años, formando parte del grupo Los Caños, y luego ella, a los 17, uniéndose a Kiko formando el dúo que a día de hoy conforman. Juntos han compartido los sinsabores de una industria que les ha dado algún palo, pero hoy, echando la vista atrás, están orgullosos.

Casi 20 años después, siguen viviendo de la música y acaban de lanzar su último single, Quiero oír tu voz.
Mantenerse es para ellos su mayor triunfo. “Para algunos el éxito es ser número 1 en
ventas, pero para mí es el seguir manteniendo el mismo público de hace 18 años”, dice Shara.

Empezasteis juntos en 2006, ¿os imaginabais que tanto tiempo después ibais a seguir haciendo música?
Kiko: Nuestro sueño siempre ha sido mantenernos. Sabíamos que la carrera iba
a tener altibajos, pero al final la constancia, la fe en lo que hacemos y, sobre todo, ser
fieles a nuestro estilo ha hecho que estemos aquí. (Shara lo interrumpe)

Shara: ¿No crees que hemos ganado madurez? Cuando empezamos, como éramos
unos niños, éramos más inconscientes y éramos felices en nuestros mundos de yupi.
Ahora somos padres y somos más conscientes de las cosas.

¿Cuál fue vuestra primera decepción en este mundo?
Shara: Creo que fue cuando nos separamos como dúo en 2010. Veníamos de unos
años de mucho éxito y cuando decidimos separarnos y empezar nuestras carreras
por separado, las personas que pensábamos que iban a seguir a nuestro lado, dejaron de estarlo. Fue la primera bajada de la montaña rusa. Antes solo habíamos subido y tocó bajar.
Kiko: Así es, vimos la verdadera cara de mucha gente.

¿Se enfadaron?
Kiko: No lo sé, pero me da igual, la verdad.
Shara: Yo no creo que fuera un enfado. He llegado a la conclusión de que para ellos
solo fuimos un producto. Éramos unos críos y nos creíamos que ese vínculo era
más personal y había amistad, pero no, era trabajo.

Kiko, tu hijo tiene 17 años. ¿Crees que está preparado para vivir lo que viviste tú?
Qué va. Yo ahora veo a los chavales de esa edad y me siento muy orgulloso de nosotros porque hemos vivido cosas que no nos tocaba y no fue fácil. Creo que hemos sido unos valientes.

¿Sentís que os habéis perdido vuestra juventud?
Kiko: Claro. Cualquier chico de 15 años lo que hacía era estar con los amigos, hacer
botellón, ir al instituto… Y yo no, yo no he vivido eso.

¿Vuestros padres tuvieron miedo de que se os fuera la cabeza?
Shara: Claro. Yo tenía estudios porque empecé en esto con 17 años, pero mi hermano
Kiko no y eso a mis padres no les gustaba. A ellos les aseguraron, por ejemplo, que
mi hermano iba a continuar sus estudios, pero a la hora de la verdad ni profesor particular ni nada. Se confiaron.
Kiko: Traíamos de cuna una manera de ser que nos iba a ayudar a no descarrilarnos.
Nunca perdimos la cabeza y éramos muy responsables.

¿Qué hicisteis con vuestro primer sueldo?
Kiko: Compré puertas nuevas para la casa de mis padres. Vivíamos en una casa muy
humilde, muy antigua, y la tuvieron que apuntalar, y cuando yo tenía 8 años, nos trasladaron a otra vivienda. Esta casa era mejor, pero era de protección oficial y las
puertas eran muy feas, así que con mi primer dinerito cambié las puertas. ¡Ah, también le pagué la operación de la vista a mi madre!

¿Y el primer capricho?
Shara: Mi coche.
Kiko: Sí, yo también mi coche, pero en lo que más creo que me he gastado ha sido en
gafas de sol, no sé porqué, pero me compraba muchísimas. (risas) 

Kiko, tú tienes tres hijos y Shara, tú, dos. ¿Os ha cambiado la paternidad?
Kiko: Completamente. Creo que no hay nadie que sea la misma persona después de
ser padre.

¿Vuestros hijos apuntan maneras en la música?
Kiko: Yo estoy enganchadísimo a la pequeña, Julia, que tiene tres añitos. Le ha dado
por bailar flamenco y la veo y se me cae la baba.
Shara: Mi niña de 11 años dice que quiere ser actriz y cantante y el pequeño, que tiene seis, ya está con clases de batería. Parece que quiere ser músico, lo lleva en la
sangre.

¿Qué consejo les daríais?
Kiko: Sobre todo que estudien. Yo quiero que se formen y tenga una base porque yo
no pude hacerlo. Y que no confíen en cualquiera, que tengan cuidado.

Vuestro último single se llama Quiero oír tu voz. ¿Qué voz queréis oír?
Shara: La de nuestro público siempre.

¿Y qué voz querríais escuchar porque ya no podéis hacerlo?
Kiko: La de nuestras abuelas Rosi y Carmen.