Los cortes de pelo que más favorecen con pelo rizado pasados los 50

A medida que cumplimos años, nuestras prioridades van cambiando, y no nos referimos únicamente al cuidado facial, sino que en nuestro pelo también hay diferencias: buscamos cortes que aporten frescura al rostro, que realcen nuestra textura natural y, sobre todo, que requieran un mantenimiento sencillo y realista.

Para las que tienen el cabello rizado, esto puede suponer un mayor reto, pero la realidad es que, cuando se entiende y se trabaja correctamente, no hay complicaciones.

Lo que tenemos que buscar es potenciar el movimiento natural del cabello rizado con cortes inteligentes que trabajen a favor de su forma, densidad y elasticidad. No hace falta que todo esté pensado al límite, sino que se respeten sus curvas y se les de libertad. Si estás pensando en hacerte un cambio de look, estos son los cortes que tienes que apuntar antes de pedir tu próxima cita en la peluquería.

Consigue un aspecto rejuvenecido con estos cortes impecables para pelo rizado

Bob rizado

El clásico corte bob ha evolucionado, y en su versión rizada encuentra una nueva vida que resulta ideal a partir de los 50. Se trata de un corte que se caracteriza por llegar a la altura de la mandíbula o un poco más abajo, enmarcando el rostro de forma natural y estilizando el cuello. Ayuda a aportar volumen, pero sin ser exagerado, pudiendo jugar con capas sueltas para un mayor movimiento. Sin duda, la mejor opción para las que busquen algo atemporal y muy elegante.

Pixie curly

Para las más atrevidas y prácticas, no hay nada mejor que el corte pixie. Este deja al descubierto la nuca y parte del cuello, pero mantiene cierta longitud en la parte superior para jugar con el volumen natural del rizo. A la hora de peinarlo es mejor ese efecto desenfadado o ligeramente despeinado, funcionado especialmente bien en rostro ovalados o con estructura ósea marcada, ya que realza los pómulos y resta años (dejando un acabado muy fresco).

Midi con capas

También conocido como clavicut, es uno de los más recomendables para las que busquen una longitud larga, pero al mismo tiempo que siente bien a sus rizos. Eso sí, si abogas por esta opción, tienes que comprometer a una mayor dedicación, con hidratación constante y un corte frecuente. Permite realizar un amplio abanico de peinados: desde recogidos informales y semirrecogidos, hasta melenas sueltas con cuerpo. ¿Un consejo? Incorpora capas largas para evitar el efecto “triángulo”.

Shag rizado

Hay una tendencia generalizada en la actualidad que ha traído de vuelta todo lo que tuvo éxito en décadas pasadas, destacando especialmente los años 70. No solo los pantalones de campana o el estilo boho arrasa, sino que cortes de pelo como el shag es todo un reclamo.

Este incorpora múltiples capas, flequillo (opcional y adaptado al rizo) y una estructura que aligera el cabello al tiempo que multiplica el volumen. Es ideal para las que busquen un peinado con esencia casual, pero con mucha intención. Además, ayuda a difuminar líneas de expresión y resalta la mirada.

Lob rizado con flequillo

También conocido como long bob, es uno de los grandes aliados de las mujeres a partir de los 50. Esta versión alargada del bob permite una mayor variedad de peinados sin perder control sobre el volumen.

También puedes incorporar un flequillo, ya sea desfilado o de cortina, para suavizar los rasgos faciales y conseguir un resultado juvenil inmediato. Es el punto perfecto para conseguir longitud sin sacrificar frescura, disimulando signos de la edad como las arrugas de la frente.

Corte afro redondeado

Para quienes tienen un rizo más cerrado, tipo 3C o 4A, el corte afro redondeado es una elección excelente y cada vez más reivindicada en pasarelas y campañas de belleza. Lejos de ocultar el volumen, este corte lo celebra y abraza, demostrando que no hay nada como un cabello natural.

Eso sí, hay que trabajarlo bien, predominando la forma esférica clásica, que ayuda a equilibrar la simetría del rostro y aportar una imagen empoderada.

Consejos imprescindibles para cuidar el pelo rizado y mantenerlo impecable

Aunque un buen corte siempre es acertado, de nada sirve si no lo cuidamos con consciencia. El rizo, por su estructura en espiral, tiende a ser más seco y frágil que otros tipos de cabello, algo que a partir de los 50 se intensifica aún más. Por ello, lo principal para lucir pelazo, es tener una buena rutina de hidratación.

Para ello, lo mejor es usar champús sin sulfatos, acondicionadores nutritivos y mascarillas intensivas una vez por semana ayuda a conservar la humedad y evitar el encrespamiento. Otros productos que podemos incluir son los aceites nutritivos, como el de argán o jojoba, que, aplicados en medios y puntas, sellan la hidratación sin apelmazar.

El uso excesivo de calor, con secadores y tenacillas también debería evitarse, dejándolo secar al aire o utilizando difusores de aire templado. El corte regular es otro consejo clave para mantener las puntas sanas y evitar que quede un resultado apagado. Por último, siempre cepilla el cabello en mojado y duerme con una funda de satén para evitar la rotura y el frizz. Con estos pequeños consejos, tu cabello no solo se verá impecable, sino que será tu mejor seña de identidad.