Con la llegada del verano, nuestras rutinas cambian. Es cierto que estamos más relajadas, menos pendientes al horario y, en consecuencia, más descuidadas con nuestros cuidados diarios, Esto es algo que se refleja especialmente a nivel capilar, donde nuestra melena se pasa gran parte del tiempo expuesta.
“La exposición solar prolongada daña el cabello, provocando sequedad, pérdida de brillo y fragilidad. Además, el agua salada del mar y el cloro de las piscinas resecan la fibra capilar y pueden alterar su color y textura, especialmente en cabellos teñidos o sensibilizados”, explica Pilar García, Education Expert en Authentic Beauty Concept, algo que puede tener consecuencias desastrosas si no nos mimamos como es debido.
En este contexto, el objetivo debería ser, no solo lucir un cabello bonito, sino también protegerlo para que llegue al otoño sano y salvo. Los expertos en peluquería coinciden que la prevención es el secreto del éxito: “La preparación del cabello antes del verano es clave para mantenerlo fuerte y saludable durante toda la temporada”, comenta la experta, y en este artículo te vamos a dejar la guía completa sobre todo lo que tienes que hacer para mantenerlo sano y brillante.
El protector solar capilar: tu nuevo imprescindible
Al igual que tenemos muy interiorizado que tenemos que aplicarlos protector solar en el rostro, el SPF también es un must en el terreno capilar. La exposición prolongada al sol deteriora la queratina, deshidrata la fibra capilar y acelera la pérdida de color, y es aquí donde entran en escena los protectores solares capilares. “El error más común es no adaptar la rutina capilar al cambio de estación y al ritmo de vida propio de las vacaciones. Es fundamental ajustar los cuidados y utilizar productos específicos que protejan y mantengan el cabello en buen estado”, afirma la experta.
La protección solar es fundamental en nuestra rutina capilar.
Gtres
Pueden venir en formato spray, aceite o crema ligera, actuando como una película invisible frente a los rayos solares. Algunos, incluso, añaden ingredientes antioxidantes y nutritivos para combatir el daño desde el interior.
Aplícalos cada mañana antes de salir de casa, y reaplícalos cada vez que salgas de la piscina o el mar. Otro consejo, es llevar siempre un sombrero o una gorra si sabemos que vamos a estar mucho tiempo al sol.
Hidratación profunda: el ritual que salva la fibra capilar
Durante el verano, el cabello pierde agua con rapidez, lo que da paso al encrespamiento, la pérdida de elasticidad y las temidas puntas abiertas. La hidratación es algo que se vuelve fundamental, eligiendo champús y acondicionadores sin sulfatos, que limpien suavemente sin arrastrar los aceites naturales del cuero cabelludo. “A la protección se deben sumar productos hidratantes que compensen la pérdida de humedad provocada por el sol, el cloro y el agua salada”, declara Pilar.
La hidratación es clave para evitar la sequedad y la rotura en nuestro pelo.
Gtres
Una o dos veces a la semana, incluso tres si notas el pelo muy seco, se aconseja aplicar una mascarilla nutritiva que contenga ingredientes como manteca de karité, aceite de coco, argán o aloe vera, que siempre dan ese extra de nutrición. Un truco para las que sean más perezosas, es usarla mientras tomas el sol (protegido, por supuesto).
Evita los peinados agresivos
Aunque puede ser tentador alisar el cabello con planchas o usar el secador a diario, en verano lo ideal es dejar que el pelo se seque al aire siempre que sea posible. El exceso de calor, sumado al que ya aporta el clima, solo contribuye a la deshidratación y al deterioro de la fibra.
También es recomendable evitar peinados demasiado tirantes, como coletas altas o moños con gomas agresivas, que pueden provocar rotura. “Se suele abusar de recogidos muy tirantes o líneas marcadas que, junto a la exposición solar, pueden provocar quemaduras en el cuero cabelludo o roturas en la fibra capilar”, declara Pilar.
Lo mejor es decantarse por recogido más suaves, trenzas o moños bajos, siempre con scrunchies de seda.
Cómo lavar el cabello de forma efectiva en verano
Uno de los gestos más importantes para conseguir una melena impecable es cómo la lavamos. “En verano, lo ideal es lavar el cabello cada vez que entre en contacto con el agua del mar o de la piscina. Tanto la sal como el cloro contienen agentes que pueden resecar, debilitar y alterar el color del cabello, especialmente en melenas teñidas o sensibilizadas", confirma la experta.
Siempre hay que lavar el cabello con agua dulce para que no queden restos de cloro o sal.
Gtres
"Por eso, es importante aclararlo bien siempre después del baño y, si es posible, realizar el lavado con una gama hidratante, como la línea Hydrate de Authentic Beauty Concept, que ayuda a mantener el cabello sano, flexible y protegido durante toda la temporada”, añade.
Después aplicamos un acondicionador sin aclarado o un leave-in hidratante con protección térmica y desenredante. Esto te ayudará a evitar la rotura al cepillarlo y mantendrá la cutícula cerrada, lo que reduce el encrespamiento y mejora el aspecto general del cabello.
Con todo ello, es cierto que hay que relajarse y disfrutar de la esencia estival, pero no hay que bajar la guardia en lo que al cuidado capilar se refiere. Has visto que, con simples gestos que introduzcamos en nuestro día a día, podemos marcar por completo la diferencia.