Mary de Dinamarca y su marido, Federico de Dinamarca, han sido objeto de numerosas críticas en su país después de que se haya desvelado que poseen una residencia en Suiza.
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Según la revista ‘Billet Bladet’, Mary y su marido poseen un chalet en Suiza, adonde se han trasladado de manera temporal para estar cerca de sus hijos. Desde el pasado 6 de enero, estos cursan estudios en un internado, por lo que el príncipe heredero de Dinamarca y su esposa se han mudado a un chalet tradicional para estar cerca de ellos.
La casa, de estilo tradicional suizo, se encuentra en una zona residencial en las faldas de los Alpes. La residencia posee una amplia terraza y está a poca distancia del exclusivo colegio donde se forman los niños.
Cuando Mary y Federico decidieron trasladarse a Suiza, el movimiento no fue el agrado del pueblo danés. El traslado suponía el retiro institucional de la pareja, que ha decidido acompañar a sus retoños durante las doce semanas de curso. Ahora, la noticia de que son propietarios de una casa valorada en dos millones de euros en dicho país tampoco ha sentado muy bien.