Las lágrimas de Ángel Llàcer tras su confesión más dura y la emotiva reacción del ganador, rematan una gala inolvidable en 'Tu cara me suena'

Tras la última y reñida victoria del programa, la cuarta gala de 'Tu cara me suena' ha dejado, como cada viernes, 'momentazos' para el recuerdo. Imitaciones de altura, lágrimas entre el público y hasta en el jurado, risas y muchas sorpresas. Y un ganador, claro. Gisela Lladó tuvo que enfrentarse a un gran reto esta semana: ¡se convirtió en su amiga Chenoa y se sometió a su exigente Training VIP! Aunque otro reto mayúsculo fue el de Mikel Herzog Jr., que se metió en la piel de India Martínez. Goyo Jiménez llevó a Sergio Alcover para imitar a El Alfa y Nfasis, Bertín Osborne volvió a viajar al pasado para interpretar a Frank Sinatra y Manu Baqueiro se transformó en el vocalista de Celtas Cortos. Por su parte, Ana Guerra, imitó a Alicia Keys, Melani a The Ronettes, Esperansa Grasia a Marisol y Yenesi se metió en la piel del vocalista de Carolina Durante.

Uno de los momentos más esperados de la noche era la imitación de Gisela, y es que la catalana debía meterse en la piel de la mismísima Chenoa, que además de estar presente en el plató, es su fiel amiga desde hace años. ¡Y lo clavó! El público se quedó boquiabierto y la propia Chenoa, más aún. Hasta se lanzaron a cantar juntas.

Pero, sin duda, el momento más emotivo lo llevaba Mikel Herzog. Metido en la piel de India Martínez, el cantante conseguía emocionar al público y hasta sacar las lágrimas de Ángel Llàcer. "Me he emocionado porque el arte emociona, y es lo que da sentido a nuestras vidas. Y yo, como bien sabéis, he estado muy mal, y una vez renuncié a vivir, dije 'me dejo y me voy', y estaba muy equivocado, porque si no, no habría visto lo que he visto. No hay que renunciar, y ya está", explicaba entre lágrimas.

Manu Baqueiro también conquistaba al público y al jurado, que no dudaba en destacar su versatilidad y asegurar que es "un concursante de 10". Para él era una noche especial, y es que ¡celebraba su cumpleaños! Así que el programa no dudó en sorprenderle con una tarta tras su actuación al ritmo de 'Cumpleaños feliz' coreado por compañeros, jurado y público.

"Eres un prodigio de este país", le decía Lolita a Melani, que una vez estuvo impoluta en su imitación. Con la boca abierta se quedaba Ángel tras ver a Yenesi imitar a Carolina Durante. El Frank Sinatra de Bertín tampoco dejaba a nadie indiferente: "ha sido brillante", le señalaba Chenoa. Esperansa Grasia y su Marisol conseguían trasladarnos a otra época y darle alegría al programa: "Todo lo que tocas lo conviertes en algo que hay que quedarse mirando, tienes un talento...", le decía Flo.

Goyo Jiménez llevaba al plató una de las actuaciones más divertidas (ojo, y conseguidas), que ponía a bailar a los miembros del jurado. Por su parte, Ana Guerra cerraba la gala con una actuación muy complicada, tocando el piano y moviéndose por el escenario, que ya prometía una "buena nota" de Lolita. Ángel conseguía hacerle brotar las lágrimas: "Qué bien cantas, Ana, es una pasada".

"Esta promoción es una de las mejores que hemos tenido nunca", confesaba Llàcer tras el fin de las actuaciones. Y así lo demostraban las puntuaciones. 

Ana Guerra gana la cuarta gala

La cantante canaria se hacía con la victoria de la gala tras un triple empate con Mikel y Melani. "Qué barbaridad", confesaba, antes de contar a dónde destinaría el premio de la noche: "Quiero mandar estos 3.000 euros a una fundación de Tenerife que ayuda a las personas que tienen ELA, un caso que además tengo en la familia", desvelaba emocionada. "Es que nos olvidamos de lo que hace este programa, que va de ayudar a los demás", añadía.

En la próxima gala veremos a Rigoberta Bandini, Emilia Mernes y Tini, Raphael, Dani Fernández y Rosana, entre otros. Desde luego, promete.

Ángel Llàcer reaparece lesionado en la cuarta gala

Llàcer aparecía luciendo un cabestrillo en su brazo derecho que dejaba a todos perplejos. Las reacciones de sorpresa no tardaron en llegar, tanto en plató como en redes sociales. Y aunque él intentó restarle importancia con humor y gesto sonriente, la preocupación ya estaba sembrada. "Pero, ¿qué te ha pasado?", le preguntaba, preocupado, Manel Fuentes. "Se me va la cabeza", confesaba Ángel, "porque yo creo que soy joven, y ni soy joven ni estoy bien", añadía antes de desvelar cómo había sido el accidente. "Entonces yo el otro día estaba haciendo 'twerking' encima de una silla, giró la silla y me caí. Me he roto el radio", confesaba con humor.