La Infanta Cristina hace trampas con su alianza

La Infanta Cristina (58 años) se ha convertido en la protagonista del nuevo número de SEMANA. Su nombre ha vuelto a copar todos los titulares después de conocerse la noticia de que ya ha firmado el divorcio con Iñaki Urdangarin. La hermana del Rey Felipe VI y el exdeportista sellaron el fin (legal) de su matrimonio en diciembre de 2023. Lo hicieron en una notaría de Barcelona y en el más absoluto de los secretismos. Ni cámaras ni comunicado oficial anunciando la disolución de la pareja. En los últimos años, ha llamado poderosamente la atención un detalle que, valga decir, ha protagonizado un sinfín de titulares: su alianza de casada. Hubo quien apuntó a que la lució durante el almuerzo en Madrid por el 60 cumpleaños de su hermana, la Infanta Elena. El cónclave Borbón, celebrado el pasado 20 de diciembre, suscitó muchas incógnitas entorno a esta joya que aparece y desaparece a conveniencia e, incluso, cambia de mano. ¿Y si solo es una trampa de la Infanta?

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La Infanta Cristina juega al despiste con su alianza de casada

El 24 de enero de 2022, la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin anunciaban públicamente su separación. Dos años después, la pareja ha firmado los papeles del divorcio. Un acuerdo que, entre otros, no incluye el pago de una pensión al padre de sus cuatro hijos. En cambio, obliga a las partes a asumir la manutención de los jóvenes por una cantidad acorde a los ingresos de cada progenitor. La noticia ha vuelto a poner en el centro del debate una de las grandes incógnitas que ha rodeado durante todo este tiempo el fin del ya extinto matrimonio. ¿Sigue o no luciendo la Infanta el anillo de casada? La realidad es que no, sino que hace trampas. Quiere evitar a toda costa la buscada fotografía sin la alianza que confirmaría su nuevo estado civil, el de soltera. Es por ello que, en su lugar, luce joyas similares. Como mínimo cuatro, según hemos podido comprobar desde revista SEMANA.

El misterio resurgió con fuerza el pasado 20 de diciembre, coincidiendo con el citado aniversario de la Infanta Elena. A su llegada al restaurante madrileño donde tuvo lugar la celebración, la cuñada de la Reina Letizia se esforzó y mucho por taparse la mano izquierda, donde escondía un vistoso anillo localizado en el dedo anular. Mientras en gran parte del territorio español, la alianza de matrimonio se porta en la mano derecha, en comunidades como la catalana, es tradición llevarlo en la otra. Cabe recordar que la expareja se dio el sí, quiero' en Barcelona en 1997 y que fue en la Ciudad Condal donde fijaron su residencia antes del estallido del caso Nóos. En la capital catalana nacieron, además, los cuatro hijos que tienen en común. En otras palabras, la joya con la que acudió al encuentro doña Cristina podría pasar perfectamente por su alianza de casada, pero no lo es. 

El "juego del anillo" que la Infanta ha personificado en los últimos años

Desde revista SEMANA nos hemos dado a la tarea de analizar al detalle el accesorio. Se trata de un anillo de oro de doble banda que, 'a priori', no coincide con la que la Infanta Cristina recibió durante su enlace por todo lo alto de manos de Iñaki Urdangarin aquel 4 de octubre de 1997. ¿Ha estado jugando la exmujer de Iñaki Urdangarin al despiste todo este tiempo? El pasado 25 de abril, a la hija de Doña Sofía se la pudo ver luciendo la misma joya en su dedo anular, también en la mano izquierda. Es curioso porque, cuando se casó con el padre de sus hijos, se colocó la alianza, de una sola banda, en la mano derecha, como manda la tradición por antonomasia. Durante los años que el matrimonio gozó de estabilidad, la alianza se mantuvo inamovible en la misma mano, la derecha.

Hasta finales de 2011, doña Cristina no se quitó este símbolo representativo de su unión con Iñaki. Sin embargo, tras el estallido del caso Nóos, la hermana del Rey Felipe VI comenzó a retirarse la alianza o cambiársela de mano. Por ejemplo, en 2013, durante la conmemoración del 25 aniversario del fallecimiento de Don Juan, no la llevó. La decisión de quitársela solía coincidir con los actos oficiales que involucraban al resto de miembros de la Casa Real. En cambio, en 2016, a su  llegada al cuarto día de juicio celebrado en Palma de Mallorca que acabó con Iñaki en la cárcel, la Infanta situó la joya en su mano izquierda.

¿Una joya con significado o indirecta a su ya exmarido?

Dicho esto, vale la pena referirse a uno de los últimos partidos de balonmano a los que acudió doña Cristina para ver a Pablo Urdangarin jugar. Tuvo lugar el 3 de octubre de 2023. Sentada en las gradas, como una madre orgullosa más, el detalle de su anillo en la mano, esta vez, en la izquierda, tampoco pasó desapercibido. Era de un solo halo, también de oro, pero, en esta ocasión, de diseño trenzado. En esta ocasión, la actitud de la progenitora de la estrella de balonmano fue muy distinta a la que personificó durante la celebración del cumpleaños de la Infanta Elena. Ajena a cualquier polémica, lo lució a la vista de todos, sin esconderlo ni mucho menos tapárselo. 

En el último año, hemos dado por sentado que la Infanta Cristina no se ha desprendido de su anillo de casada. Tras visionar decenas de imágenes que se remontan desde su enlace con Iñaki Urdangarin hasta el 60 cumpleaños de su hermana, cobra fuerza que, simplemente, se haya dedicado a sustituir la joya por otras similares. El modelo de doble banda por el que se decanta últimamente no parece el mismo que lució durante su matrimonio, como se observa en las dos primeras imágenes que incluye este artículo. Tampoco el de diseño trenzado de la foto inmediatamente anterior a este párrafo. Por supuesto, eso no significa que este intercambio consciente de anillos no asocie un poderoso significado, tenga o no que ver con su ahora exmarido ante la ley. Esto al tiempo que disfruta de su nueva vida, ya liberada, en Ginebra.