Anthony Delon: "Nadie se acuerda ya de mi romance con Estefanía de Mónaco"

Anthony Delon ha tenido una vida un tanto tumultuosa, con relaciones sentimentales erráticas, problemas con la justicia, de hecho llegó a estar unos días en la cárcel, y una carrera como actor que nunca acabó de despegar del todo. Sin embargo, la palabra ‘fracaso’ no entra en su vocabulario, y ahora relanza su propia firma de ropa de cuero en la que trabaja como empresario, diseñador y hasta comunicador.

Cercano en las distancias cortas, entrevistamos a Anthony en inglés, por el que se desliza su acento francés, que le da un toque de distinción. Con un discurso muy metabolizado y el bagaje del que se las ha visto de todos los colores, no esquiva ninguna pregunta, aunque, eso sí, no es que tenga muy buen concepto de la prensa…

¿Eres un amante de los coches?

Me encantan, pero no tanto como antes. Me encantan los deportivos. Pienso que los coches de antes tenían más personalidad que los de ahora, excepto algunas marcas. Muchos de los coches de hoy en día parecen iguales. Hay firmas como Jaguar que incluyen muchas innovaciones en su diseño y eso es estupendo. La creatividad en el diseño es fundamental.

No te vemos con mucha frecuencia en España, ¿cuál fue tu última vez aquí?

Hace veinticinco años nada menos…

Cuando cumpliste 50 años manifestaste que estabas en una etapa de cambios. ¿Podemos decir que hay un nuevo Anthony Delon?

No soy una persona nueva, porque en mi interior sigo siendo el mismo, pero cuando llegas a los 50 quieres llegar a lo que es importante, a lo esencial, no quieres malgastar tu tiempo. Es algo que pasó de manera natural. Hay un momento en el que tienes que hacer lo que sientes, lo que amas y empiezas a saber lo que no quieres.

¿Echas de menos tus años rebeldes? ¿Te arrepientes de algo de esa época?

No me arrepiento de nada, porque gracias a eso soy lo que soy. No fracasas, aprendes y eso es muy importante. Lo importante es levantarte. En las chaquetas que diseño hay un dicho japonés del siglo XVII en las etiquetas. Dice que “cáete siete veces y levántate ocho”.

En tu infancia y adolescencia viviste cosas muy duras, ¿miras al pasado con ira?

No me gusta mirar al pasado. Si pasas cosas duras en tu infancia, la rabia está dentro de ti y tienes que ver qué haces con ella, librarte de ella. Cuesta mucho tiempo conseguirlo. Ahora he criado a mis hijas, vivo en París con ellas dos, mi vida es muy distinta.

Tienes otra tercera hija que vive en Los Ángeles…

Sí, pero a esa no la crié. Mantengo contacto con ella, pero lo que ocurrió es que tuve un ‘affaire’ con su madre, que no era mi novia, y un día volvió y me dijo que yo era su padre. Las otras dos las tuve en mi matrimonio, las crié y vivimos juntos. Ahora su madre, que es francesa, vive en Los Ángeles.Vivir con mis dos hijas me ha cambiado mucho como padre y como hombre.

Imagino que has intentado evitar que vivan cosas como las que te pasaron a ti…

Es algo que evité ya hace mucho tiempo. Un día me confrontaron, especialmente, la que tiene 21 años, hace dos años, porque tenía que ‘matar al padre’ –nos dice el actor, recurriendo a estos términos freudianos-. Lo comprendí y creo que es bueno que lo hicieran, porque me ayudo a crecer como persona.

En España todavía se te recuerda por tu corto noviazgo con Estefanía de Mónaco…

No creo que sea así, sois los periodistas que seguís hablando sobre ello.

Mi madre todavía se acuerda de eso…

Tu madre sí, pero ya demasiados años de eso… 34 exactamente. La gente joven no sabe ni quien soy. Para mí es bueno que no se me recuerde porque me permite empezar de nuevo.

En España te diste a conocer por tu primera película, ‘Crónica de una muerte anunciada’, sobre la novela homónima de Gabriel García Márquez, y has protagonizado bastantes títulos desde entonces…

Mi última película se estrenó hace un año en Francia y ahora se ha mostrado en el Festival de Roma, es una opera prima, una comedia divertida.

Otro de los momentos más mediáticos de tu vida fueron unas fotografías tuyas con Brooke Shields, realizadas por Bruce Weber…

En realidad nunca fui modelo. Lo que pasó es que después de rodar ‘Crónica de una muerte anunciada’ tuve un momento de gran popularidad, porque abrimos el festival de Cannes, y la película tuvo mucho éxito en diversos países. En ese momento, la carrera de Brooke no estaba en su mejor momento, así que su madre, que era su mánager, pensó con quién debería fotografiarse para dar que hablar y me eligió a mí. Yo me encontraba en Nueva York, la conocí e hicimos esa sesión de fotos para Life Magazine. Se suponía que era solo para esa revista, pero su madre las vendió para las revistas de todo el mundo para conseguir una mayor difusión.

La época en la que viviste en Nueva York conociste a gente muy interesante como Andy Warhol… ¿qué recuerdos guardas de esa época?

Eran los años 80, una época buenísima. Lo echo de menos. Pienso que esos tiempos pasados eran mejores que los actuales. Veo que la gente joven está preocupada por muchas cosas, pensando, por ejemplo, en su jubilación, en qué va a ocurrir con ellos en el futuro, tienen miedo. En los 80 y los 90 no pensábamos en eso, porque todo era posible, cualquier cosa podía pasar.

¿Qué proyectos tienes?

Mi único proyecto ahora es mi marca de ropa de cuero. Este es el motivo por el que he vuelto a España y por este compromiso con Jaguar. Ahora vuelvo a ser un hombre de negocios y diseñador.

Fue una marca que fracasó en los 90 cuando la lanzaste y ahora la recuperas…

No creo en el fracaso sino en levantarse. Cuando la creé en 1995 fue un éxito muy grande, pero tuve que dejarlo porque tuve un problema muy grande con mis socios.

Hemos estado muy preocupados por la salud de tu padre, Alain Delon… Incluso se decía que no tenía ganas de vivir.

Todas las revistas me preguntan lo mismo, pero no es verdad. Afortunadamente está bien, no tuvo ningún problema con su corazón, fue un problema con su pierna. Alguien en Francia sacó esa mentira.

¿Hablas con él a menudo?

No, la verdad es que no, pero él está bien.

Has afirmado que no has encontrado todavía el amor de tu vida, ¿sigues soltero?

Sí, sigo soltero, pero acabaré por encontrar a alguien. Tengo mucho trabajo con mi firma de ropa, hay que diseñarlas, fabricarlas, llevar la comunicación…