Hay actrices que, más allá de su talento incuestionable, se convierten con los años en símbolos de autenticidad, de presencia y de una belleza que no responde al capricho de la cámara. Glenn Close (Connecticut, 1947) es una de ellas. Siete veces nominada al Oscar antes de llevarse uno honorífico, y capaz de transformarse en Cruella de Vil, la pérfida marquesa de Merteuil o la inolvidable Alex Forrest de Atracción fatal, Close no ha tenido nunca miedo de mostrar su rostro tal cual es: sin filtros, sin pretensiones, con la serena confianza de quien sabe con seguridad quién es realmente.
Y aún así —o precisamente por eso—, su piel ha sido siempre motivo de admiración: fresca, luminosa y cuidada sin artificio. ¿El secreto? Nada de rutinas complicadas, gadgets de última generación ni rituales coreanos de doce pasos. Glenn Close lo tiene claro: “Utilizo mucho Mario Badescu. Tengo su crema limpiadora de pepino y la cosa amarilla que te pones después. No me gusta mucho porque no me gusta la rutina larga. El mantenimiento personal siempre ha sido, para mí, muy aburrido. Por eso tengo el pelo corto”, según publicaban Today y Journal des Femmes. La actriz revelaba que su idilio con la marca comenzó en los años 80 y por recomendación de otra estrella: Carrie Fisher.
Glenn Close y su firma de belleza favorita
Gtres
El limpiador favorito de Glenn Close
Una revelación que no puede ser más coherente con su carácter: pragmático, sin concesiones al drama, con un punto incluso punk si se piensa en cómo ha resistido a la presión hollywoodiense de congelarse la cara con bótox o rellenarse hasta perder la expresividad. Glenn Close ha optado por lo contrario: por productos asequibles, eficaces, con historia, y que responden a una necesidad real, no al marketing.
La Cucumber Cleansing Lotion de Mario Badescu es la crema limpiadora a la que la actriz estadounidense se refiere como uno de sus imprescindibles. Pese a que la marca la define como “loción”, en realidad funciona como un híbrido entre tónico y solución limpiadora ligera. Lo interesante es su diseño pensado especialmente para pieles mixtas o grasas: no contiene aceites, tiene propiedades astringentes suaves y se basa en extracto de pepino, un ingrediente clásico —y a veces infravalorado— que en cosmética tiene mucho que decir.
Cucumber Cleansing Lotion Loción Limpiadora de Pepino de Mario Badescu 13,95 euros
Mario Badescu
Cucumber Cleansing Lotion Loción Limpiadora de Pepino de Mario Badescu 13,95 euros
El pepino no es solo un cliché de spas y hoteles de lujo, esas rodajas frías sobre los párpados que parecen más decorativas que efectivas. Es un potente antiinflamatorio natural, con efectos calmantes y refrescantes que reducen la hinchazón y ayudan a equilibrar el pH de la piel. En esta loción, el pepino actúa como purificador: limpia sin resecar, ayuda a reducir el brillo de la zona T y, sobre todo, devuelve la frescura al rostro.
Lo más interesante de este producto, más allá de su precio amable, es su eficacia silenciosa. No promete milagros ni revoluciones dermatológicas. Es, simplemente, un básico que cumple su función. De ahí que actrices como Close —que se han pasado la vida bajo focos, maquillaje profesional y jet lag constante— lo valoren tanto: limpia, reconforta, no irrita y está siempre disponible en la estantería sin necesidad de esperar listas de espera interminables en webs exclusivas. Es una firma que puedes encontrar fácilmente en Sephora, El Corte Inglés o Primor.
Mario Badescu Special Cucumber Lotion 236ml 16,95 euros
Mario Badescu
Mario Badescu Special Cucumber Lotion 236ml 16,95 euros
Cuando Glenn Close menciona “la cosa amarilla”, se refiere sin saberlo a uno de los productos más populares (y más queridos en redes sociales) de Mario Badescu: la Special Cucumber Lotion. Este tónico amarillento —que podría pasar por un elixir alquímico de otra época si no fuera por su packaging tan sencillo— es una fórmula ligeramente más potente que la Cucumber Cleansing Lotion. Está pensada para pieles más problemáticas, grasas o con tendencia al acné, y se ha convertido en un imprescindible para quienes buscan claridad y limpieza profunda sin los efectos agresivos de los tónicos tradicionales con alcohol.
Lo que distingue a esta loción de otras del mercado es su capacidad para barrer —literalmente— las impurezas que obstruyen los poros. No exfolia de forma abrasiva, sino que limpia en profundidad gracias a una combinación equilibrada de ingredientes astringentes y calmantes. El extracto de pepino vuelve a ser protagonista, acompañado de una fórmula que controla el sebo, elimina brillos indeseados y deja la piel visiblemente más clara.
Se aplica con un algodón después de limpiar el rostro y no necesita más explicación. No extraña que Close, tan poco dada a los excesos en lo que al mundo beauty se refiere, lo defina con cariño como “la cosa amarilla”. No hace falta saber el nombre técnico para saber que funciona.
Además, su elección no es trivial: Mario Badescu es una marca fundada en Nueva York en los años 60 por un químico y cosmetólogo rumano que creía en fórmulas simples, ingredientes activos bien seleccionados y tratamientos que no nos arruinan el mes. De ahí que su clientela fiel incluya desde actrices de la vieja escuela como Close hasta nuevas generaciones que descubren la marca a través de TikTok.