Los concursantes de 'Supervivientes 2025' se han enfrentado, este martes, a una de sus pruebas más duras hasta la fecha. Playa Calma y Playa Furia han tenido que luchar por una nueva y jugosa recompensa: churros con chocolate. Un premio muy dulce que ha provocado que se dejen la piel en la arena. Casi literalmente. Los nuevos equipos de las playas lo han dado absolutamente todo para llevarse a la boca un bocadito de esos apetecibles churros cuyo olor casi podía traspasar la pantalla. Para lograrlo, los concursantes debían recuperar unas piezas del mar con las que posteriormente formarían un acueducto humano por el que tendría que pasar agua que ellos mismos debían recoger en cubos. Esta agua llenaría un barreño que al estar lleno haría contrapeso para liberar el tridente de Poseidón que sería la cúspide de una gran torre de piezas que estaban enterradas por la playa. Tras colocar la torre, deberían esperar unos 10 segundos de estabilidad para que la torre no se viniera abajo. Ganaría el equipo que lograra hacerlo en menos tiempo.
Los primeros en enfrentarse a la prueba eran los integrantes de Playa Furia: Carmen Alcayde, Anita Williams, José Carlos Montoya, Álex Adrover, Borja González y Álvaro Muñoz Escassi. Un equipo que ha demostrado una fortaleza imparable en cada prueba y esta vez no ha sido menos. El equipo terminaba la prueba con un tiempo de 13:41 y con todo en orden.
No corría la misma suerte Playa Calma. El equipo formado por Nieves Bolós, Pelayo Díaz, Damián Quintero, Makoke, Manuel González y Joshua Velázquez también demostraban su fortaleza y resistencia en la prueba, sin embargo, terminaban sufriendo un percance que dejaba al diseñador de moda gritando de dolor y rabia. Era en el momento en el que el equipo debía formar esa torre de piezas, cuando decidían que Pelayo se subiría a los hombros de Joshua mientras este estaba subido a los de Damián, que ejercía una fuerza sobrehumana como pilar. Pelayo, quedando a gran altura para poner la última pieza de la torre, cayó de espaldas a la arena. "No os hagáis daño, por favor", les señalaba Laura desde la orilla.
Equipo Calma en la prueba de recompensa
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"Por Dios, ¿está bien?", se preguntaba Carlos Sobera desde el plató. "Pelayo, Joshua, ¿estáis bien?", continuaba insistiendo Madrueño. Aunque en un primer momento continuó con normalidad para terminar la prueba en el menor tiempo posible, pese a la insistencia de Laura Madrueño de que tuvieran cuidado de no hacerse daño, al finalizar, el diseñador se quedó postrado en el suelo quejándose del dolor que estaba sufriendo en la espalda.
Pelayo se queja del dolor
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Una vez que colocaron el tridente, el equipo celebraba su hazaña: "Eres un campeón, Pelayo", le decía Makoke dándole ánimos, pero él permanecía tumbado en el suelo. "Se ha hecho daño", señalaba Nieves. "Parece que Pelayo se ha hecho daño, van a ser ahora atendidos por el equipo médico", anunciaba Laura para tranquilizar a familiares y amigos del diseñador, que vivían la escena con preocupación. Y no era el único, el equipo también atendió a Joshua, que caía aunque de menor altura.
"Viva la madre que os parió", celebraba Sobera, "yo no sería capaz, me quito el sombrero, los ves una semana y otra y aguantan, superan... mirad lo que acaban de hacer. Durísimas condiciones las de esta aventura", añadía emocionado.
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El equipo médico atiende a Pelayo
Tras la aparatosa caída, el diseñador recibía atención médica para ver la dimensión de su caída, y aunque las cámaras no capturaban el momento, salimos de dudas gracias a la reaparición de Pelayo con total tranquilidad. Era a la hora de recibir la recompensa cuando Pelayo aparecía junto al chocolate con churros como si nada hubiera pasado.
Finalmente, fue Playa Furia quien logró salir victoriosa de la prueba y degustar esos apetecibles churros como recompensa a su esfuerzo. Sin embargo, la organización del programa quiso premiar el esfuerzo realizado por el equipo Calma, entre los que se encontraba Pelayo, y dejarles comer durante menos tiempo y disfrutar también de la recompensa.
La audiencia sentencia a Pelayo
Su caída y recuperación han demostrado, una vez más, las grandes dotes de supervivencia del diseñador, y la audiencia así lo ha descubierto. "Pelayo casi se parte la maldita columna y el tío se levantó para seguir a pesar de estar retorciéndose de dolor. VAYA TÍO DE 10. Sabe discutir, sabe crear tramas, sabe dar contenido y sabe ser superviviente", escribe un usuario en 'X' (antes Twitter).
Aunque las críticas a la organización no han faltado... "Prueba tan espectacular como peligrosa y sin medidas de seguridad ninguna. Es incomprensible que no hubiera al menos unos cascos sabiendo que iban a tener que subirse unos a otros para colocar el tridente", escribe otro usuario.