Hay prendas que se desenvuelven con una soltura casi política entre las tendencias y la atemporalidad. El vestido con escote en uve —o en pico, para las más clásicas— es una de ellas. Ni necesita presentación ni acepta sustitutos: estiliza, afina, eleva. No es casualidad que sea el favorito de las editoras de moda, los estilistas y todas aquellas mujeres que dominan su lenguaje corporal desde el clóset. En Zara, este patrón ha vuelto a florecer: tres nuevos vestidos, tres siluetas diferentes, pero el mismo magnetismo gracias al poder del escote inteligente.
Y aunque llevamos décadas glorificando los escotes bardot, los halter o incluso los asimétricos como si fueran experimentos de laboratorio, la verdad es que hay algo en la forma en que el escote en pico nos hace sentir. El foco visual se alarga, la clavícula respira y el pecho se ve más firme, nunca exagerado.
Vestido plisado bordados de Zara 59,95 euros
Zara
Vestido plisado bordados de Zara 59,95 euros
Este vestido entra en otra categoría: la de las prendas con narrativa y en tendencia. Es largo, fluido, con un sutil efecto arrugado que cae desde el escote en pico hasta el bajo, creando un efecto cascada que afina y eleva la silueta como un truco óptico. Los bordados y calados verticales que acompañan este color amarillo mantequilla tan trendy. Es el típico vestido que podrías ver en el armario de una editora de moda o en la maleta de una invitada a una fiesta en Formentera con dress code relajado.
Sí, puedes ponértelo con sandalias de dedo y bolso de mano con textura, pero también puedes —y deberías— llevarlo con mules planas y gafas de pasta bimateriaoversize para esa paella que tus amigas llevan organizando en el jardín de su casa desde hace semanas. Añade brazaletes de inspiración bereber y un moño bajo deshecho. Es ese vestido que eleva lo cotidiano sin que tengas que devanarte los sesos. Ese triángulo invertido del busto no puede ser más favorecedor.
Vestido drapeado textura de Zara 49,95 euros
Zara
Vestido drapeado textura de Zara 49,95 euros
Zara aquí se ha puesto nostálgico. Este vestido podría haber estado en el armario de Cari Lapique o haber salido en una boutique en Serrano en 1997. El tejido tiene un relieve sutil, casi invisible desde lejos, pero táctil y envolvente al acercarse. El corte es midi, entallado, y el escote en pico aquí es más pronunciado, más sensual, pero elegante y fresco. El drapeado frontal construye la silueta desde el abdomen, creando un efecto faja invisible (y eficaz).
Te lo vamos a poner fácil. Nada de sandalias plateadas ni de clutch con strass. Aquí lo suyo es apostar por un zapato joya discreto. Queremos un detalle, no un despliegue de brillos. El vestido pide pelo pulido con raya al medio tipo clean look y un maquillaje natural pero no de esos que se hacen en 5 minutos. Vamos a pararnos un poco en el espejo, a conseguir una piel glowy, eyeliner bien trazado, una ceja laminada. ¡Lo tienes! No es solo un vestido bonito, es una declaración de intenciones para quien sabe que la elegancia está en los matices.
Vestido corto bordados engomados de Zara 29,95 euros
Zara
Vestido corto bordados engomados de Zara 29,95 euros
Zara ha creado un vestido que parece haber salido de una percha de Charo Ruiz Ibiza o de un desfile de moda adlib (con la licencia del azul bebé). Corto, con un bordado floral delicado a base de troqueles y pequeñas perforaciones que no resultan empalagosos, y una goma en el puño que abullona ligeramente las mangas. La textura ligera lo convierte en un aliado real de las temperaturas veraniegas, y el tono pastel le permite convivir con tonos tierra y empolvados. El escote en pico aquí, acompañado del ligero volumen en hombros hace que nuestro busto se vea más equilibrado. Una fórmula que favorece tanto a mujeres con mucho pecho, como las que no.
Aquí funciona lo que yo llamo el truco del 'escaparate': sandalias minimalistas (pero en cuero marrón oscuro, no en nude) y una cestavintage de mimbre con pañuelo de seda (o satén) de colores anudado. Si necesitas adaptarlo a un evento de día, añádele unas alpargatas de cuña y unos pendientes de cerámica o resina moteada. En cuanto al beauty look: ondas suaves y labios efecto mordida. No necesita más.