Acaban de llegar a Zara y ya están arrasando las sandalias 'hide' que ya llevan todas las editoras de moda: cómodas, bonitas y diferentes

En la vorágine de microtendencias que sacuden el calendario estival —desde las bailarinas mesh al retorno cíclico de la cuña de esparto —, hay una línea de diseño que ha escalado posiciones de forma silenciosa pero imparable: las sandalias ‘hide’. Un gesto de estilo que parece contradictorio en verano, la estación por excelencia de lo ligero, pero que, precisamente por eso, conquista con su singularidad.

Frente al calzado excesivamente desestructurado que ha dominado los últimos veranos —tiras finísimas, transparencias, pies desnudos casi como declaración de intenciones—, estas nuevas sandalias proponen cubrir estratégicamente el empeine, esa zona olvidada y siempre a la intemperie en el calzado de verano. ¿El resultado? Un efecto muy potente, que da carácter a nuestros estilismos. Y Zara, como de costumbre, ha detectado el gesto y lo ha transformado en tendencia de masas con una selección que ya está volando de la web.

Las sandalias 'hide' no buscan solo seducir a través de la piel visible. Lo hacen con proporciones, con silencios, con una especie de understatement sexy. Cubren parte o completamente el empeine —esa zona que rara vez protagoniza titulares—, mientras dejan el talón, los dedos o los laterales al aire libre. Una suerte de equilibrio entre estructura y ligereza, entre contención y libertad. Desde las firmas de más alta moda como Dries Van Noten hasta Bershka las han incorporado a sus colecciones, pero Zara ha sido una de las firmas que más espacio le ha dado a este trend en su colección estival.

Sandalia plataforma piel de Zara 45,95 euros

La primera propuesta es una sandalia de piel marrón chocolate con suela tipo clog y un diseño que recuerda a las chanclas de inspiración india (kolhapuri chapal meets estilo escandinavo). El empeine aparece cubierto por una banda ancha, pulida, mientras un pequeño aro de cuero abraza el dedo gordo. La suela, de madera oscura ligeramente curvada, suma unos centímetros sin comprometer la pisada.

No es una sandalia “fácil”, pero por eso funciona. Tiene algo de fashion insider, de calzado conceptual que no busca agradar sino diferenciarse. La clave está en equilibrar su contundencia con prendas suaves: una falda de lino blanco cortada al bies, una camisa azul claro oversized remangada hasta el codo y un bolso tote de rafia estructurada. 

Sandalia plana piel de Zara 39,95 euros

Más allá del negro, del camel o del blanco óptico, hay un tono que este verano ha ganado estatus de nuevo neutro: el burdeos. Zara lo ha aplicado en esta sandalia plana que combina minimalismo con presencia. La piel, pulida pero no brillante, recorre el empeine en una línea envolvente, con un diseño que podría haber salido de una colección cápsula de COS en colaboración con algún estudio de diseño nórdico.

El interior y la suela acolchada prometen comodidad, pero lo que realmente eleva este modelo es su silent luxuryattitude. ¿Cómo llevarla sin caer en lo evidente? Con pantalones masculinos de pinzas y camiseta blanca de algodón de gramaje bajo, o con un vestido camisero sin mangas. También es ideal para reinterpretar un dos piezas satinado de noche, jugando con lo informal desde los pies. Como quien dice: soy elegante, pero no necesito tacones de aguja para demostrarlo.

Sandalia plana asimétrica piel de Zara 39,95 euros

Cuando una sandalia en rojo se convierte en el foco de un look, sabes que no estás ante un accesorio: estás ante una buena compra. Pensarás: '¡Qué dinerito más bien invertido!'. Este modelo asimétrico con hebilla lateral y suela negra tipo sporty tiene todo lo que hace vibrar a las editoras de moda: diseño limpio, comodidad asegurada y un punto de provocación cromática que no se ve todos los días. El corte lateral deja el empeine parcialmente cubierto con una curva inusual y muy atractiva.

¿Cómo integrarlas sin parecer demasiado literal? Fácil: con pantalones blancos anchos, camiseta negra cropped y joyas doradas con algún detalle veraniego. Hoy te recomendamos que pienses en Singularu (nos ha encantado su colección de verano). O con un vestido camisero en beige o topo. También funcionan en clave resortwear con un caftán en algodón rústico y gafas XL. Lo importante es que las prendas no compitan con ellas. No quieren compañía, quieren aplausos.

Sandalias tacón piel de Zara 49,95 euros

Entre todas las versiones ‘hide’ de Zara, esta sandalia de tacón bajo en burdeos oscuro merece mención especial. Su silueta recuerda a los zapatos de las colecciones más elegantes de -como ya dijimos- el diseñador belga Dries Van Noten, pero en versión low cost, claro. El empeine cubierto hasta el metatarso, la tira en el dedo, el talón libre y ese tacón curvado (ni fino, ni cuadrado: sencillamente perfecto) hacen de esta sandalia un básico incombustible para verano y buena parte del otoño. 

¿Cómo incluirla con gracia en un estilismo? La respuesta corta es: con cualquier cosa. Pero si afinamos, es la aliada ideal de un pantalón sastre con bajo tobillero y blazer fluida. También de un vestido lencero midi con cuello halter y un bolso tipo sobre de piel trenzada, algo tipo Campomaggi o Bottega Veneta. Incluso con jeans rectos y top drapeado, puede ser ese detalle inesperado que convierte un conjunto en una historia.