La presentadora de televisión ha salido de su casa cuando decía acompañar a una de sus mejores amigas al médico después de haber pasado unos días delicada de salud. Cuando ha abandonado su casa de Las Rozas junto a su chófer, Gustavo, no ha dudado en pararse con la cámara de 'Sálvame', y lo ha hecho con una gran sonrisa.María Teresa ha comentado que está pasando un delicado momento y asegura que está muy agobiada. Y es que la noticia de su ruptura se ha convertido en el tema más mediático. Aún así, la presentadora de televisión saca su sentido del humor y hace un llamamiento: "Solo quiero que busquéis un novio bueno", decía entre risas.
“Si me encontráis un novio nuevo, me lo mandáis”. Además, ha querido aprovechar la oportunidad para dejar algo claro: “Otra cosa, no pienso llorar más. Ya no lloro”, dice tajante después de haber pasado unos días muy delicados, que además han coincidido con la celebración de la Navidaid.
Gustavo González le ha dejado claro que le consta que Bigote Arrocet la quiere mucho. María Teresa no ha dudado en contestarle de la forma más contundente:
"Yo también lo quiero pero yo no soy la que me he ido", declaraba lanzando una pulla de lo más tajante.
Este encuentro con el reportero del programa ha tenido lugar después de que se encontraran en unos grandes almacenes durante la mañana del miércoles. En este momento, María Teresa se mostraba muy enfada por el seguimiento que está sufriendo por parte de los medios. "No me atosiguéis. Estoy harta, que me dejéis tranquila ya de una vez”.