Tras meses de vacaciones, sumado a su extensa luna de miel, Íñigo Onieva vuelve al trabajo. El marido de Tamara Falcó ha disfrutado de un verano de lo más ajetreado y un otoño de idas y venidas por Europa, siempre junto a su inseparable mujer. Pero el ocio ha llegado a su fin y ya está listo para afrontar su nueva andadura profesional. Con las pilas más que recargadas, y no es para menos, el marqués de Griñón encara una aventura profesional muy ilusionado. Mucho se ha especulado en los últimos tiempos sobre cómo se gana la vida el empresario. Sobre todo después de que el emblemático Café de Gijón desmintiera que iba a empezar a trabajar con ellos. Poco a poco se van desvelando más detalles sobre su inédito proyecto laboral para el que ya ha encontrado oficina, a un precio no apto para muchos.

Íñigo Onieva y Tamara Falcó se dieron una segunda oportunidad a solo 6 meses de su boda (Foto: Gtres)

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Tamara Falcó e Íñigo Onieva durante una de sus apariciones públicas
Tamara Falcó e Íñigo Onieva durante una de sus apariciones públicas. Foto: Gtres.

El nuevo edificio de oficinas de Íñigo Onieva

El matrimonio conformado por Íñigo Onieva y Tamara Falcó acaba de aterrizar de Londres, donde han celebrado el 42 cumpleaños de ella. Un viaje idílico que ha dejado imágenes de ensueño, como ya es costumbre en la pareja, que no dejan de agasajarse con escapadas románticas. Ya en Madrid, el marqués de Griñón no ha desaprovechado ni un momento para ponerse manos a la obra. Y es que un nuevo desafío laboral le espera. Tal y como han revelado desde 'TardeAR', el pasado 13 de noviembre se personó a las nueve de la mañana en un edificio en una exclusiva zona de la capital. Estaba en busca y captura de una nueva oficina desde donde liderar el proyecto profesional que tiene entre manos.

"Le han enseñado el bloque entero, ha mirado la fachada. Finalmente, ha cogido el edificio completo, 78.000 euros al mes. Ya no está disponible. Estaba muy interesado. Ha mirado todas las plantas. Ha hecho gestos como de asentimiento. Desde que se supo que había dejado de trabajar, Iñigo no ha trabajado de nada más", han indicado desde el programa que presenta Ana Rosa Quintana. El nuevo edificio donde estará localizada la oficina del marido de Tamara se ubica en un barrio de la capital donde el  metro cuadrado cuesta 39 euros, han recalcado.

Íñigo Onieva
Íñigo Onieva desayunando con su mujer, Tamara Falcó, durante un viaje a París. (@tamara_falco)

Todo apunta a que, con este movimiento inédito de Íñigo Onieva, ha decidido volver a emprender, han subrayado desde 'TardeAR'. También podría estar ejerciendo de intermediario o comisionista para un tercero. Es decir, su objetivo no sería tanto alquilar el edificio de oficinas para él, sino para un fondo de inversión. Esta visita se realizó antes de que pusiera rumbo a Londres con su mujer. Previamente, el ahora aristócrata también visitó un restaurante, lo que podría dar pistas sobre su nuevo proyecto laboral. No sería la primera vez que se le vincula con el mundo de la gastronomía y la hostelería.

El marqués de Griñón dejó de trabajar como relaciones públicas de una conocida discoteca de Madrid en mayo. Desde entonces, nada de sabe sobre a qué dedica el tiempo libre cuando no está disfrutando de su nueva vida de casado. El joven se graduó en la Universidad Antonio de Nebrija en Ingeniería Técnica en Diseño Industrial. Tras su paso por este centro privado, completó su educación universitaria con dos másters fuera de España, uno de ellos en arte de diseño de vehículos.

La polémica del empresario con El Café de Gijón

En verano, Íñigo Gijón se vio involucrado en una polémica después de que se apuntara a que mantenía vínculos empresariales con El Café de Gijón. El histórico establecimiento tuvo que salir al paso con un comunicado en el que se desvinculaba completamente del yerno de Isabel Preysler. Ni era socio ni tenía nada que ver con ellos. Una información que adelantamos días antes y en exclusiva desde Revista SEMANA. El, por aquel entonces, prometido de Tamara Falcó no tenía vinculación alguna con la empresa que gestiona el local.

"Quisiéramos desmentir rotundamente las mencionadas noticias y manifestar que es absolutamente falso que el Café Gijón se haya vendido a nadie", explicaban los propietarios del café en la misica que hacían pública dos horas después de que esta revista anunciara que el madrileño no había firmado nada con el negocio. No existía ni existió, por lo tanto, relación alguna entre los dueños del Café y el joven empresario.