Entramos en la lujosa terraza del ático de Carmen Lomana en Marbella: con unas vistas privilegiadas y una estética mediterránea

Carmen Lomana ya ha dado por inaugurada la temporada de verano. Época en la que pasa gran parte de su tiempo (si su apretada agenda se lo permite) en Marbella, ciudad a la que se desplaza para disfrutar del buen tiempo, amigos y la gastronomía local, entre otras cosas. A través de las redes sociales, la socialité ha querido compartir con su séquito de seguidores cómo es su espectacular terraza. De estética mediterránea, esta zona de la casa es, sin duda, la joya de la corona. Un lugar donde se respira paz y se puede desconectar del bullicio de las grandes ciudades. 

Así es la espectacular terraza de Carmen Lomana

"En verano con sol y amigos para mi todo es alegría, si hay mar ya no necesito más", explica Lomana en el post en el que muestra esta estancia que cuenta, como no podía ser de otra manera, con una vistas privilegiadas. Esta amplia zona está flanqueada por un muro blanco que, además de aportar privacidad, aporta ese toque mediterráneo y cálido a su conjunto.

 

 

 

 

Ver esta publicación en Instagram

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Una publicación compartida por @carmen_lomana

Uno de los elementos más llamativos es el aplique con forma de triángulo invertido que tiene en uno de los muros de la pared. De esta manera, una vez cae el sol, tanto la anfitriona como sus invitados pueden disfrutar de un ambiente cálido y acogedor mientras comparten confidencias. 

Estética minimalista

Carmen Lomana ha optado por el minimalismo, evitando así el ruido visual. Por ello, esta estancia tan privilegiada tiene tan solo una mesa central, también de gran tamaño, cuadrada. A su alrededor sillas forjadas a juego para esas jornadas de disfrute.

En cuanto al suelo, el color ocre es el gran protagonista. Aunque para hacer de este un lugar único y especial, Carmen Lomana ha incorporado varias alfombras de exterior. Por un lado, tal y como ella misma muestra podemos observar una de color verde con un 'print' de cuadros que combina a la perfección con el resto de elementos decorativos, ya que siguen la misma línea estética. Y, por otro, ha colocado una de un tamaño mayor. 

Tumbonas minimalistas 

Carmen Lomana puede descansar y tomar el sol en unas tumbonas ideales de color marrón chocolate de ratán. La zona del cojín es blanca, lo que hace que esta explosiva combinación de colores cree una atmósfera de lujo y buen gusto. 

Decorado con plantas y flores

Gracias a la elección de diversas plantas y flores que rodean el muro principal, esta terraza te transporta a un lugar de lo más exótico. Además, el color de los adornos florales y el vede de sus hojas iluminan, en gran parte, esta zona, en la que Carmen Lomana crea recuerdos cada vez que se desplaza a Marbella.

No es la primera vez que Carmen Lomana muestra píldoras de la que es su residencia en Marbella, su particular refugio estival. Sin ir más lejos, hace tan solo unos días publicó otro vídeo con el que mostraba su perfecta habitación en suit, de estilo clásico y toques pintoresco. 

Un dormitorio sacado de una revista

La habitación la preside una cama tamaño XL con sábanas blancas perfectamente colocadas. Tras la pieza principal, un cabecero de lo más estiloso de inspiración barroca con toques dorados, lo que aporta ese toque de luz a la estancia. Este elemento decorativo además de transmitir elegancia se fusiona a la perfección con el resto de las piezas del dormitorio. A los lados, dos espejos de tamaño pequeño con el borde dorado, jugando así en la misma línea que el cabecero. 

A ambos lados, buscando una perfecta simetría y jugando con , dos mesillas de noche de madera con un cajón en la parte superior, y una balda en la inferior. Para lograr esa calidez al conjunto, Carmen Lomana ha apostado por colocar dos lámparas de estructura blanca y cuadrada. Como cortinas, unas en tonos rojizos con detalles dorados. 

La socialité quiso plasmar su esencia y destacó una de las paredes en un azul cielo ideal. De hecho, parece que se ha pintado con la famosa y viral técnica denominada Wabi Sabi, que consta de mezclar un color con blanco y dar brochazos en forma de cruz para crear un efecto de relieve y cálido al mismo tiempo. Sin embargo, la parte del techo es completamente blanco. Una fusión de tonalidades que combinan a la perfección. De esta manera, Lomana ha jugado con los contrastes creando una habitación con mucha personalidad.

Llama también la atención la alfombra que ha escogido, que cuenta con un estampado de diversos colores (verde, marrón, blanca y negra), con diferentes dibujos que combinan entre sí. Al mismo tiempo, podemos observar, que Carmen Lomana ha querido incluir un sofá individual blanco con respaldo medio, acolchado con las patas de madera. De estilo clásico, pero con ese aura minimalista.