‘El Hormiguero’ de Antena 3 cierra la semana recibiendo a parte del elenco de la nueva temporada de ‘Tu Cara Me Suena’: Ana Guerra, Esperanza Gracia y Florentino Fernández. El cómico se ha incorporado este año al jurado del programa en sustitución de Carlos Latre. Su paso por el espacio de Pablo Motos ofrece una oportunidad perfecta para adentrarse en su poco conocida vida personal.
A sus 52 años, el madrileño Florentino Fernández, más conocido como Flo, es sin duda uno de los rostros más populares del entretenimiento en España. Humorista, actor, presentador, doblador… Flo es un todoterreno que ha conquistado todos los ámbitos, también el de la esfera familiar. Sin embargo, siempre ha sido muy celoso de su intimidad, manteniendo su vida privada lejos de los focos. Aun así, sabemos que lleva casado desde 2011 con Lidia, una antigua compañera de trabajo, y que juntos tienen un hijo, Juan.
Se conocieron en 'El Informal'
El equipo de 'El Informal'
Los caminos de Flo y Lidia se cruzaron en 1999, cuando ambos coincidieron en el mítico programa de Telecinco ‘El Informal’. Él debutaba como presentador del espacio humorístico, mientras que ella formaba parte del equipo de producción. “Yo haciendo el tonto en el plató y ella detrás de cámaras, seria, organizándolo todo. Creo que le di pena antes que gracia”, relata con su característico humor. El flechazo fue casi instantáneo, y poco después comenzaron a salir y a convivir. “Ella es la jefa en casa”, asegura él con cariño.
Flo es muy discreto y rara vez habla de su mujer en entrevistas o la menciona en redes sociales. Sin embargo, en 2019 rompió esa norma con un emotivo mensaje por su vigésimo aniversario: “Son 20 años ya, amor mío. 20 años, 20 días, 20 horas, 20 segundos… no es nada, mi niña preciosa. Te amo”, escribió el 6 de enero de aquel año.
Juan, su hijo: un joven discreto pero divertido
Lidia y Flo se convirtieron en padres en 2004 con el nacimiento de su único hijo, Juan, que ya ha cumplido los 20 años. El joven también prefiere mantenerse alejado de los focos, aunque ha heredado el talento cómico de su padre. “Es un payasete como yo. Me gusta, porque hay una parte de la vida que hay que tomársela a risa”, cuenta Flo. En 2017, durante una charla con Bertín Osborne en Telecinco, afirmó que Juan “es una versión mejorada de mí mismo”.
En una visita anterior a ‘El Hormiguero’, Flo compartió una divertida anécdota sobre su hijo. Relató cómo, al salir apresurado de casa para ir a trabajar, dejó a Juan en el portal pensando que Lidia ya lo había recogido. Minutos después, su mujer lo llamó: “¿Dónde está el niño?”. Flo regresó corriendo y encontró a Juan sentado tranquilamente, jugando con un cochecito. “Me dijo: ‘Papá, ¿te has olvidado de mí?’ con esa cara de listo que tiene. ¡Casi me da algo!”, recordaba entre risas.
Juan tuvo un papel especial en la boda de sus padres, celebrada en 2010 en la Embajada de España en París, cuando llevó las arras con tan solo 7 años. La elección de un lugar tan poco convencional se debió a la presencia de familiares de Lidia en la capital francesa. Flo ha contado que fue una ceremonia sencilla pero muy significativa. “Corta pero bonita”, la describió en una entrevista, destacando la emotividad del momento. Dado el carácter reservado de la pareja, apenas han trascendido detalles como el número de invitados o la celebración posterior, que mantuvieron lejos de la prensa.
Vigilante de seguridad antes que estrella
Antes de convertirse en un rostro conocido, Flo trabajó como vigilante de seguridad y conductor de autobús, siguiendo los pasos de su padre. Tal como explicó en ‘Mi casa es la tuya’, “las noches eran largas y había que pasar el rato”, así que aprovechó esas horas para perfeccionar un sinfín de imitaciones. Sus compañeros lo animaron a presentarse a un casting televisivo, una idea que aceptó sin muchas expectativas. Meses después, Telecinco lo contactó a través de su padre, quien le dio la noticia. Así comenzó su aventura desde su pueblo natal hasta la capital.
En la prueba para ‘Esta noche cruzamos el Mississippi’ sin preparar ni una sola intervención, Flo deslumbró con sus imitaciones y se convirtió en colaborador del programa de Pepe Navarro. Su madre le pidió que “dejara de hacer el tonto” hasta que vio las 380.000 pesetas (unos 2.200 euros) que había ganado. Aun así, durante los primeros cuatro meses compaginó la televisión con su trabajo como vigilante: por la mañana en su empleo habitual y por la noche en el plató.